El acontecimiento tuvo lugar el pasado 11 de Diciembre a las 19 h. en la sala Ámbito Cultural de El Corte Inglés de Colón, 27 (6ª Planta)  en Valencia.

El Rincón Romántico estuvo presente en el evento  por medio de Maite Moraga quien, cámara de fotos y grabadora en mano, nos cuenta así cómo transcurrió el acto:

Llegué a las seis y media de la tarde y allí me encontré con la Editora, Aránzazu Sumalla, y Olivia Ardey,  ambas expectantes y deseosas  porque todo fuera un éxito.

Aránzazu nos dijo que lleva trabajando en el mundo editorial desde hace 8 años. Anteriormente estuvo en Titania. Desde hace dos años ha estado luchando por  un sello romántico en La Esfera de los libros y el resultado es Romanticae, que además se arriesga con una autora inédita.

Aránzazu Sumalla comenzó presentando el nuevo sello y también cómo llegó a conocer a Olivia Ardey  y su libro Dama de tréboles. Destacó  el personaje protagonista y leyó  unas líneas del comienzo de la historia. A continuación dio paso a la autora para que presentara su novela.

Olivia nos contó que comenzó a escribir haciendo un taller de escritura, siendo así como nació su Dama de tréboles.  Explicó que le aconsejaron escribir una historia distinta, con otra temática que fuera más popular y que se vendiera mejor, pero ella eligió escribir aquello que le “había nacido”, una novela que no pensó nunca que pudiera publicarse, al menos no tan rápido, puesto que sólo ha tardado 3 meses en conseguir Editorial que apueste por su historia.

Habló de cómo se documentó para ambientar el libro. Dijo que había buceado en revistas del género y se había leído todo lo que pudo encontrar en la biblioteca donde trabaja y en otra más de Valencia. Explicó que esta novela no tiene nada que ver con las típicas del oeste, con desierto y zonas áridas, ya que la acción de Dama de tréboles se desarrolla en Denver, una ciudad que intenta imitar el estilo de vida del este y está situada en una zona frondosa. Nos presentó a sus protagonistas y matizó que su historia es de corte clásico.

Llegados a este punto, se abrió la rueda de preguntas. Me presenté como representante del Rincón Romántico y le pregunté a la autora cómo se sintió al ver su novela como una de las tres seleccionadas en noviembre como recomendación en nuestra Web, y que qué le parecían las opiniones de las lectoras de nuestro foro tras la primera crítica que se había hecho de su libro por una de nuestras foreras. Olivia comentó que se sintió muy contenta al ver su libro como uno de los tres recomendados entre los más de 60 libros publicados ese mes. Dijo también que no conocía a la autora de la crítica  y que un conocido le había comentado que eso no era una crítica, sino una declaración de amor. Por supuesto, valora y agradece las críticas de las participantes de El R. R. que han opinado positivamente sobre su novela.

Hubo varias preguntas más, entre ellas las de  Rosario Raro y Jordi Torner, de la Universitat Jaume I de Castellón, quienes le preguntaron si los protagonistas o algún otro personaje de la novela estaban basados en personajes reales, a lo que la autora respondió que no.

Otra de las participantes de nuestro foro, Sara,  felicitó a la  editorial por el buen gusto a la hora de escoger la portada  y preguntó si Olivia había tenido voz y voto a  la hora de su elección. Aránzazu  dijo que en principio los autores no eligen las portadas de sus libros. Que una vez que se diseña la portada se le pasa a la autora para que la vea y salvo que no les guste absolutamente nada, la portada que decide la editorial es la que se pone.

Una vez finalizado el turno de preguntas, acabó el evento y la autora de Dama de tréboles firmó libros a todos los que se acercaron. Tras ellos,  la editora quiso que la autora le firmara también su libro y posaron para unas fotos.

Una vez que se marcharon todos los que asistieron a la presentación y firma, incluida la editora, Olivia Ardey se quedó conmigo a comentar algunas cosas más sobre su libro.

Nos dijo que estaba muy contenta por cómo se había desarrollado la tarde. Estaba encantada porque el aforo estaba casi lleno y ella pensaba que iba a acudir muy poca gente.

Nos explicó más extensamente cómo fue el taller de escritura que hizo en Mayo de 2009, así como que el trabajo de fin de curso consistía en hacer el primer capítulo de la novela. Una cosa curiosa que nos contó fue que no escribe los capítulos en orden y que para cuando tenía que presentar el trabajo, ella ya tenía el prólogo y alguna escena suelta del medio del libro.

En Septiembre, una vez acabado el curso, Olivia siguió escribiendo su novela y para evitar bloqueos y trabajar en la concisión, practicó haciendo relatos y microrrelatos. Dos de ellos fueron premiados, lo que supuso una sorpresa muy agradable para ella.

Le pregunté  por qué tituló la novela  Dama de tréboles y por qué la había ambientado en el oeste americano, y me contó que el protagonista es irlandés y el símbolo de Irlanda es el trébol. La novela comienza con una partida de cartas y la carta que une a Ethan y Linette es la dama de tréboles. Ethan considera sobre todo (luego se lo explica a Linette) que esa carta, el trébol, es un símbolo de presente, pasado y futuro y a lo largo de la novela  se ve por qué.

En cuanto a la ambientación, nos explicó que  como jamás pensó que pudiera editarla porque era su primera novela, era una autora inédita y porque una autora novata de romántica española lo tiene bastante difícil, se la planteó como ejercicio de aprendizaje y  como tal ¿por qué iba a hacer algo que no le gustara?  pues eligió el subgénero que más le gusta y el que más le apetecía escribir por el puro placer de hacerlo.

Otra de las cosas que quise saber fue si se había planteado escribir algo ambientado en España. Me contestó que no lo descartaba porque en España hay historias muy interesantes pero que de momento no le apetecía ya que ahora mismo, lo que más le gusta es escribir historias ambientadas en E.E.U.U. y que tiene en mente escribir algún día algo en el quattrocento italiano. Me contó que tiene relatos ambientados en nuestro país. Uno de ellos, por ejemplo,  se llama Tú de menta y yo de fresa, en el que los personajes viven en Valencia y hacen una incursión, cuando tienen el conflicto como pareja, hacia la zona de Morella.

A la pregunta de si iba a hacer solamente romance histórico dijo que de momento iba a seguir con la histórica, porque cree que para cambiar de registro tiene que ser cuando ya estás asentado como autor en el mercado. Piensa que las lectoras esperan de ella más histórica y eso es lo que va a hacer.

Tenía curiosidad por saber en qué y en quién se inspiraba a la hora de dar vida a sus protagonistas y situarlos en un marco específico. Su respuesta fue que se pone a pensar y hay veces que surge solo. Otras, a lo mejor de una canción, pero sobre todo de cosas que pasan, de noticias del periódico, que de pronto lees un titular y dices “pero si esto podía haber pasado en tal época…”

Quise saber si se había planteado escribir una serie o una saga y continuar con algún personaje de Dama de tréboles, o si lo tenía pensado para futuras novelas puesto que es algo que está ahora muy de moda. Me contestó que aunque mucha gente se lo ha preguntado y podría hacerlo, eso sería forzar un poco la máquina, así que de momento no. La historia que tiene ahora mismo en la cabeza y todas las historias que tiene imaginadas, son también novela única. Para un futuro no lo descarta, ya que ella es una enamorada de las series (las wallflowers  le encantan y lee todo lo que sale sobre ellas).

Le pedí un consejo para aquellas escritoras españolas que no están publicadas aún y que tienen mucho talento pero que no han podido ver editadas sus novelas. Ésta fue su respuesta:   que no tengan miedo a la palabra no porque son sólo dos letras. Esto es cuestión de suerte, evidentemente, pero no es sólo suerte, es perseverancia y confiar plenamente en lo que se hace. Si tú crees que tu novela es buena, seguramente convencerás a alguien de que es buena, o alguien se dará cuenta de que es buena. Si tiras la toalla al primer no, o al segundo o al quinto o… pues los editores no van a ir a casa a buscarte, así que como es de ellas de quien  depende pues, perseverar, es lo único que hay… intentarlo y si no es la primera novela será la segunda o la tercera…

Para finalizar le solicité unas palabras para todas las personas que la habían acompañado en la presentación de su libro, que lo habían comprado y para todas aquellas que ya lo habían leído y vinieron con él para que se lo firmara. Emocionada, sólo pudo decir: “gracias, gracias, gracias. Me encantaría verlos aquí para un segundo libro”.

Me despedí de Olivia Ardey dándole las gracias por su amabilidad y su tiempo. Fue un placer conocerla y estar con ella en ese día tan importante. Me alegro muchísimo que le fuera tan bien.

Artículo realizado por Maite Moraga