Emma Wildes - Sin miedo al escándalo

Valoración:

Crítica realizada por Wanda

Primera entrega de la trilogía «Solteros y truhanes».

La joven Amelia se encuentra a un apuesto intruso en el balcón de su dormitorio. No es otro que Lord Alexandre, hijo menor del duque de Berkley.

Su reputación y la antigua enemistad entre sus familias se interpone entre ambos. Pero Amelia no puede evitar sentirse atraída. Él, tan solo, entró para recuperar una misteriosa llave. Sin embargo, en cuanto la vió, la belleza y la inocencia de la joven lo fascinaron.

Tal vez se trate del destino, pues aunque ambas familias están enemistadas, existen pruebas de una relación "prohibida", hace muchos años...

Esta autora es una de esas que descubres por casualidad y que te engancha desde la primea página. Tener una saga de ella es todo un lujo y en mí ya tiene a una ferviente admiradora.

La novela es de las que podemos enmarcar en Regencia. Dama de buena familia y libertino encantador y atractivo que cae en las redes del amor. Pero las novelas de esta escritora no son simples novelas de la Regencia, sino mucho más. Son verdaderas novelas románticas, de las que siempre nos han gustado, de las que nos unieron al género y con las que hemos soñado. Hacía mucho tiempo que no disfrutaba tanto con este tipo de lectura.

En la historia, hay dos familias enfrentadas que se odian. ¿Por qué? Pues por un antiguo escándalo. El abuelo de la protagonista tuvo un romance con una mujer de la familia de Alex que acabó en tragedia y, como consecuencia, en años de desconfianza y antipatía mutua.

Alex debe recuperar algo que pertenece a su familia, pero que está en poder del padre de la protagonista. Y lo que son las cosas, la muchacha se lo encuentra en medio de una reunión social y queda intrigada por ese hombre fascinante y guapísimo... a quien ya ha visto antes.

Es posible que esta no se la mejor novela que he leído de esta autora, pero sigue resultándome estupenda cuando narra. Y divertida, sobre todo divertida, algo que no es fácil de encontrar.

La evolución del argumento se me hizo muy entretenida, me han gustado los personajes y me ha gustado también el entorno en el que los mueve de modo magistral.

Luchando contra las normas sociales y el odio que se tienen ambas familias, los protagonistas de esta novela consiguen alcanzar el amor en un final más que adecuado para el género romántico.

El personaje de Amelia es discretamente recatado, nunca ha tenido un escarceo amoroso, mientras que el de Alex es de un cinismo aplastante, el de un mujeriego, lo que da bastante animación a la narración.

En alguna parte he leído que el libro resulta aburrido. Lo siento, pero a mí no me lo ha parecido, ninguna de las novelas que he leído hasta ahora de esta autora podría catalogarla de aburrida. Pero claro, para gustos se hicieron los colores del arco iris y cada uno es libre de decir lo que piensa.

No es una historia especialmente complicada, todo lo contrario. Resulta sencilla de leer, entretenida y chispeante en muchas ocasiones, con diálogos que me han hecho sonreír. No esperéis encontrar en esta novela uno de esos misterios inescrutables que podemos ir investigando según pasan los capítulos. Es simplemente una novela entretenida para pasar un buen rato o llevarla de vacaciones y disfrutarla bajo una sombrilla y al lado de un martini.

 


 

Crítica realizada por Anasy

Me encanta esta autora desde que el año pasado publicó su primer libro en España, el modo de relatar las historias, sus personajes y las tramas que cuenta, enganchan desde la primera página.

Amelia es la joven hija de un conde, que como muchas otras, se encuentra en Londres para la temporada social, o sea, para encontrar marido. Criada en el campo sola con la única compañía de los criados y las esporádicas visitas de su tía materna, es una joven distinta del resto de debutantes, la relación con su padre es distante y casi impersonal.
Aunque posee belleza, es inteligente y nada altiva, suele mantenerse alejada de la gente y apenas socializa en los bailes, lo que algunos tildan de frialdad, es sólo la incomodidad de una joven ante las reuniones frívolas y de inseguridad al padecer ciertos problemas respiratorios que su padre se empeña en ocultar al mundo, ya que se considera un defecto no muy aceptable en una futura esposa.

Alex es el hijo pequeño de un duque, ex soldado joven, guapo y con fortuna propia es uno de los mejores partidos de la sociedad, pero padece una fama de libertino heredada de su hermano que no termina de gustarle, aunque no es ningún santo está lejos de la fama que le achacan, es serio, agradable y cariñoso con las personas que quiere.

Los jóvenes se conocen de la manera más inverosímil cuando Alex allana la casa del conde bajo las órdenes de su abuela en busca de una llave. Pero en esa intrusión se encuentra con Amelia, y la atracción de los dos es casi instantánea, pero hay un problema y es que familias de ambos se odian desde mucho tiempo atrás.

Por suerte los dos cuentan con personas amigas que los ayudarán en su relación, como la muy original tía de Amelia o los dos amigos de Alex.

Si algo caracteriza a esta autora es que cuenta historias sencillas que hemos leído mil veces, pero de una manera novedosa y original, con personajes refrescantes, como sus protagonistas femeninas, que suelen llevar la voz cantante sin llegar a ser unas espabiladas nada acordes con la época como pasa en muchos libros de otras autoras.

Si bien tenemos mujeres fuertes, independientes, con iniciativa propia, no desentonan con la sociedad de aquella época ni son petulantes. Y en cuantos a sus protagonistas masculinos, aunque sean reacios al matrimonio y al amor cuando los conocemos, no dudan en ponerle nombre a lo que sienten y conseguir a la mujer que aman cuando la encuentran.

Una historia preciosa, sencilla, muy entretenida que te hace pasar muy buen rato con la relación de Alex y Amelia, la peculiar tía de esta que cuenta con historia propia y es uno de los personajes que más me gustaron y bajo el pequeño misterio de las disputas familiares y lo que esconde la llave.

Mi valoración: Muy bueno

 


 

Crítica realizada por Katon

Lady Amelia Patton se enfrentaba a su primera temporada social. Había vivido toda su vida en el campo, y aunque tenía curiosidad por conocer Londres, pronto se hartó de la ciudad y de las veladas de la temporada. Debido a su dolencia respiratoria no bailaba todo lo que le gustaría, lo que le generó fama de joven inaccesible. La relación con su padre, el conde de Hathaway es distante, él ha vivido siempre en Londres y ella en el campo, se siente más unida a su tía Sophie que a su propio padre.

Una noche, frente a su balcón abierto y tras una velada singularmente tediosa se encuentra cara a cara con un apuesto desconocido que, además de ayudarla a llegar a la cama, le roba un beso. Amelia no sabía quién era el desconocido, pero a pesar de su sorpresa y aturdimiento pudo comprobar que era un aristócrata, solo tenía que buscar en los salones de baile hasta que diera con él. Lo que no esperaba era verlo con otros dos hombres diabólicamente atractivos y saber que era uno de los calaveras con peor fama de Londres.

Lord Alexander St James, tercer hijo del duque de Berkely, pensaba que con la guerra se había acabado el tener que ser sigiloso, trepar por los tejados y allanar casas. Hasta que su abuela le pidió que encontrara una llave en el hogar del hombre más odiado por su padre. Tras buscar la llave con ayuda de su amigo Michael, Alex debe esconderse en el balcón de una habitación. En las sombras verá a la joven desvestirse y abrir el balcón para respirar mejor. Sin darse cuenta, y creyendo que está enferma, entra en la alcoba y la aborda con afán protector, pero la atracción es inmediata y no puede evitar robarle un beso.

Con la excusa de sonsacarle información, Alex tendrá varios encuentros con Amelia. Descubrirá que es una joven culta, nada afectada, dulce y sincera, algo muy difícil de encontrar en su entorno social, incluso le ayudará con la búsqueda de la llave. Por otro lado, Amelia comprobará que la fama de Alex no es lo que parece. Sí, ha tenido amantes pero no es tan libertino ni tan promiscuo como todo el mundo cree. Poco a poco la atracción de su primer encuentro les conducirá a un punto sin retorno.

Con una trama sencilla y unos personajes muy de su estilo, Emma Wildes inicia una nueva trilogía. Personajes que no son lo que parecen y con un reparto coral que arropa perfectamente a los dos protagonistas. La forma de narrar tan amena y divertida de esta autora consigue que una historia bastante manida se convierta en un relato muy entretenido.

En cuanto a los personajes; me ha gustado cómo ha caído Alex, sin quererlo y sin darse cuenta, preocupándose por la salud de Amelia y devorado por los celos. Amelia me ha gustado mucho en la primera mitad del libro, pero me ha parecido que desde que se casan Amelia desaparece por así decirlo, le resta protagonismo. Se convierte casi en un personaje pasivo, como si hubiera perdido toda su decisión y arrojo.

Gracias a la forma de escribir de esta autora las hojas más que pasar, vuelan. Me lo he leído rapidísimo y lo he disfrutado bastante. Aunque la historia es bastante sencilla y predecible También, y esto es una apreciación mía, me hubiera gustado más el libro con alguna escena de cama menos, aunque no son excesivamente largas, algunas sobran. La trama de la enemistad entre las familias estaba un poco coja, demasiado al estilo de Romeo y Julieta pero sin la intesidad de esa magnífica obra. No creo que sea el mejor de la autora, pero consigue entretener desde la primera página. Como me ha hecho pasar un rato entretenida, me doy por satisfecha.

 


Crítica realizada por LadyZarek

 

OPINIÓN:

Alexander St. James, hijo menor del duque de Berkeley, y lady Amelia Hathaway, son los protagonistas de “Sin miedo al escándalo”, de Emma Wildes. Una bonita historia de  amor, con misterio incluido. Una agradable sorpresa, que me ha dejado satisfecha, y con ganas de repetir con la autora.

Alexander St James no puede creer que tenga que entrar en una casa ajena a buscar algo que su abuela le ha pedido que le traiga. Él no es un ladrón, pero esa noche no se va a ir sin haberle robado un beso a lady Amelia Hathaway. Amelia sorprende a Alexander cuando éste intenta salir de su casa, y no puede olvidar el beso que se dan. Cuando otra noche le ve en un baile, sus miradas se cruzan, y así cambia su vida.

Amelia y Alexander me han parecido dos protagonistas sencillos y con chispa. Emma Wildes les describe con acierto, se nota su talento y que no mete paja en la historia, como separarle por tonterías o alargar las escenas más de lo imprescindible. No son orgullosos, y se complementan a la perfección.

En cuanto a los secundarios, destaco a Michael y a Luke, protagonistas de los otros dos libros de la trilogía. Me han gustado ambos mucho, y estoy deseando leer sus historias, especialmente la de Michael.

La trama en sí no es muy original, pero al menos se disfruta, y no es enrevesada. Creo que si alguien busca un libro que no sea dramático y que le deje con una sonrisa de oreja a oreja al terminarlo, "Sin miedo al escándalo" es un buen ejemplo y lo recomiendo. Sin ser perfecto, se deja leer y el estilo de la autora ayuda a que la historia fluya fácilmente, sin demasiadas parrafadas aburridas. No las hay, por cierto.

Nota: 4/5.

 

 

 

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