Karen Robards - Nobody's angel

Crítica realizada por Mariam

Novela sin traducir

Con veintiséis años, Susannah Redmon ha renunciado al amor pero no a causa de un desengaño, sino por falta de oportunidades. Tras la muerte de su madre, doce años antes, se ha dedicado a criar a sus tres hermanas menores, a velar por el bienestar de su padre, el reverendo Redmon, y a ocupar el lugar de  la señora Redmon  entre los parroquianos.
Se la considera casi un ángel por su misericordia al prójimo y por su lealtad, siendo siempre una mano amiga para los más necesitados.

Con el fin de conseguir un mano fuerte que la ayude con las tareas más pesadas de la granja de la familia, en una subasta compra a un hombre que fue acusado de asesinato y condenado a siete años de servidumbre en Las Carolinas.
Él es Ian Connelly, a primera vista un hombre harapiento, famélico y que muestra señales físicas de haber recibido palizas continuas. Tal es el estado en que se encuentra que apenas llegan a la granja cae inconsciente.
Tras la barba y aspecto intimidante se esconde un rostro apuesto que queda al descubierto con los cuidados de Susannah, alimentación regular e higiene.

Ian, que en realidad es el marqués de Derne y el heredero de un duque, ha sido víctima de un complot para acabar con su vida. En el último momento logró escapar de una muerte segura pero acabó encarcelado en Newgate y, más tarde, embarcado a las Colonias para cumplir condena.
Enseguida se da cuenta que Susannah es una mujer confiada y de buenos sentimientos, algo de lo que planea sacar provecho. Bajo la custodia de ella la huida no será complicada, se dice. Pero mientras se recupera de su enfermedad y se encuentra siendo parte de los trabajadores de los Redmon, descubre en Susannah a una mujer que le provoca gran curiosidad. Tan alejada del tipo de mujeres con las que se ha rodeado toda su vida, la encuentra directa, refrescante y encantadora.

Susannah es consciente que no es una gran belleza y que a su edad no va a conseguir una propuesta de matrimonio, algo que en realidad no espera. Su vida se ha centrado durante años en su familia y en la granja, pero la llegada a ésta de un hombre joven y atractivo la enfrenta a sentimientos y sueños que había enterrado mucho tiempo atrás.

Nobody’s angel nos traslada al 1769 y a las Colonias americanas, donde en un torno humilde y rural se desarrolla la historia de amor entre Susannah Redmon, la hija solterona y remilgada del reverendo de la región, e Ian Connelly, el hombre que compró en subasta, aunque en realidad, sin que ella no lo sepa, ostenta el título de  marqués de Derne, de barón de Speare, junto a otros tantos títulos rimbombantes más.

La novela transcurre en dos escenarios, por un lado la granja de los Redmon en las Carolinas, por otro en Inglaterra, entre los pares y distinguidos nobles de Londres. Sin embargo, gran parte del libro se basa en la vida cotidiana de la granja, donde cómo señora de la casa y siervo de ésta, Susannah e Ian se enamoran.

Susannah es un personaje al que vemos florecer poco a poco. A primera vista es una mujer anodina, sencilla y sin aspiraciones de encontrar el amor. Con la llegada de Ian, un hombre que aún siendo un siervo y un hombre condenado por asesinato, despierta en ella la atracción física, el deseo y el amor. Algo que la obligará a luchar contra los principios morales que se le han inculcado desde niña y que, a su vez, se ha esforzado por transmitir a sus hermanas menores.
El personaje de Ian también sufre una transformación, aunque de otro tipo, su cambio es más a causa de ocultar su verdadera identidad.
El roce diario hace que la atracción entre la pareja sea más evidente tanto para ellos como para los que lo rodean, lo que obliga a Susannah a negar lo que se siente o bien a ir en contra de su educación y creencias.

Me ha parecido muy bonita la relación entre Susannah e Ian, así como el modo en que la historia va madurando a través de las rutinas y labores de la vida en la granja. El de ellos es un amor que crece poco a poco, sin que en realidad ni uno ni otro lo encaren como amor, sino como una locura deliciosa que los ha atrapado entre sus hilos.
A medida que los vínculos entre ambos se afianzan, decisiones importantes deben ser tomadas. Si para Susannah es luchar contra su principios morales, para Ian es plantearse qué lugar puede ocupar Susannah en su vida y en sus planes de vengarse de aquellos que trataron de asesinarlo, ya que, tal como no tarda en descubrir, el alcance de esa mano negra se extiende más allá de Londres, llegando al otro lado del pacífico, a las Carolinas y a esa humilde granja.

Como secundarios, la novela cuenta con las tres hermanas menores de Susannah: Sarah, Mandy y Em, el reverendo Redmon, y los vecinos de la granja entre los que destacan algunos de los pretendientes de las señoritas Redmon.
Las hermanas Redmon son jóvenes muy diferentes las unas de las otras. Dada la diferencia de edad entre Susannah y ellas -y el que ésta ha velado por ellas ocupando el lugar de su madre- la relación entre  ellas es casi es madre e hijas, con excepción de Sarah que actúa casi como la confidente y aliada de Susannah.
La vida de las hermanas Redmon, sus inquietudes, sus sueños y cómo viven la relación prohibida de la siempre correcta y estricta Susannah con un siervo es uno de los focos más interesantes de la novela, desde mi punto de vista.

Nobody’s angel es una de las novelas históricas inéditas en nuestro país de Karen Robards. Escrita en 1992 es una muestra de la narrativa que caracteriza a Robards en aquella época, muy diferentes a las últimas publicadas, sobre todo porque son de suspense romántico.
Particularmente me parece una pena que no podamos disfrutar en español de más de estas novelas históricas, ya que las considero de lo más interesante y demuestran el buen hacer de esta autora como escritora de romántica histórica.

Nobody’s angel es una novela sencilla, protagonizada por dos personajes curtidos por la vida. Susannah una joven de estricta moralidad que ha renunciado al amor, Ian un aristócrata inglés que se encuentra de repente objeto de una intriga, acusado y vendido como siervo.  Pertenecientes a clases diferentes, a convenciones sociales y mundos abismalmente opuestos, dan pie a una novela clásica, sencilla pero conmovedora, por lo que me parece una pena que no esté al alcance de todas las lectoras románticas.

Valoración: 4.5/5