¡Hola, Rita! Lo primero de todo felicitarte por ganar el VII Certamen de novela romántica RNR – Vergara. Queremos agradecerte también que nos hayas concedido esta entrevista, es un honor y una alegría para nosotros.
Muchísimas gracias a vosotras; y no solo por el premio, sino por todo el trabajo que hacéis, y que TANTO agradecemos las amantes del género romántico. Es un verdadero placer hablar con vosotras.
A la hora de presentarse a un certamen es fundamental creer en una misma y en la obra que se entrega, ¿cuáles fueron las razones que te decidieron a tomar parte en esta convocatoria?
Pues exactamente esas; había una historia que me estaba haciendo reír y llorar, que me tenía completamente hechizada mientras le daba vida, unos personajes que hacían y decían lo que les daba la gana porque eran completamente libres. Para serte sincera te diré que en esos momentos no pensaba en el futuro lector, tan solo escribía lo que me salía del corazón. No sé muy bien si yo llevé a la historia, o la historia me llevó a mí, pero cuando terminé y la vi en su conjunto pensé que era exactamente lo que quería. Después de las primeras correcciones se la pasé a mi mejor amiga. A la mañana siguiente me llamó y lo primero que me dijo fue, literalmente: ¡la madre que te parió! (risas). Al parecer había estado toda la noche en vela, riendo y llorando a moco tendido con la historia, y completamente enamorada de todos los personajes. Además, en nuestra charla me di cuenta de que hablaba de ellos como si fueran personas reales; creo que ese fue el momento que creí que podía ser algo bueno.
¿Qué importancia tiene para ti haber ganado este premio?
Para mí es una gran inyección de entusiasmo. A pesar de que he escrito desde la adolescencia, no llevo mucho tiempo en el mundo de la escritura profesional. Siempre digo que soy una autora con suerte porque el público me trata muy bien. No quiero decir con esto que no haya recibido críticas, pero casi todas me ayudaron a mejorar. Estoy casi segura de que desde mi primer libro al último se ha notado (aunque solo sea un poquito) que he tratado de mejorar, y eso es gracias a las críticas constructivas. Está claro que no le puedes gustar a todo el mundo, pero, al igual que es bueno que te señalen lo que haces mal, también se agradece mucho que te digan que les gusta lo que haces. Es «el refuerzo positivo» del que hablan los psicólogos, eso que te estimula a sentarte durante una infinidad de horas de soledad a escribir. Así que para mí este galardón es un gran estímulo positivo, toda una motivación para seguir trabajando y aprendiendo. Creo además que muchas lectoras me conocerán gracias a este premio y, tal vez, si les gusta, ya se queden conmigo para siempre.
¿Te acuerdas del día exacto en que mandaste tu obra al concurso? ¿Sentiste un pálpito especial al pulsar «enviar»?
Sí, me acuerdo porque fui tan a contrarreloj que lo envié el último día de plazo. Me llevaba el manuscrito a la playa para hacer las últimas correcciones, pensando si me daría tiempo. Recuerdo que el 31 de julio anoté en mi agenda «Enviado» entre un montón de corazoncitos (risas). Y sí, sentí un pálpito cuando le di a enviar, aunque en aquel momento creí que se debía al alivio de que me hubiera dado tiempo a terminarla; aunque tal vez no, y después de todo sí que fue algo premonitorio (risas).
Desde el momento en que se envía una obra hasta la fecha en la que se conoce el resultado hay tiempo suficiente para...
En mi caso, una vez que le di a enviar me propuse descansar. Traté de pensar poco en el libro, pues la suerte ya estaba echada. Poco podía hacer para cambiar nada. Aún así, mientras disfrutaba de lo que quedaba de verano, no podía evitar que, de vez en cuando, Lena y Alex se colaran en mi mente. Entonces, una enorme sonrisa me curvaba la boca al pensar: «qué bonito sería...».
De todos los ingredientes que componen tu obra, ¿cuál crees que ha sido decisivo para inclinar la balanza a tu favor?
Pues yo pienso que pudo ser el ambiente tan pintoresco que rodea a los personajes. El bar y el conventillo, viejos y decadentes lugares que han sido vencidos por el tiempo y las circunstancias y que, sin embargo, guardan auténticos tesoros en su interior. Como las mejores personas, ¿no crees? Tan solo es necesario que alguien que sepa mirar los descubra para que el antiguo esplendor aparezca de nuevo, porque siempre ha estado ahí, aunque la gente pasara frente a su fachada sin reparar en ellos, sin mirarlos siquiera. Como las mejores personas ¿no crees?
¿Recuerdas dónde y cómo surgió la idea que dio lugar a Corazones en el café?
Pues fíjate que yo creo que surgió en un aeropuerto. A mí me da miedo volar y no me gustan los aviones pero, sin embargo, los aeropuertos me encantan. Son las «puertas al cielo», como yo los llamo (risas). Creo que si viviera más cerca, me iría a pasar el día allí. No hay ningún lugar en el que se concentre tanta emoción humana como en un aeropuerto: alegría por los reencuentros entre amigos, parientes, amantes; tristeza por las despedidas. La gente se toma de la mano con más fuerza; los mejores abrazos y los mejores besos los he visto en un aeropuerto. ¿Os habéis fijado alguna vez? Me encanta observar a la gente allí porque creo que es donde sacamos todo lo bueno del humano que llevamos dentro. Para mí, todas las personas son capaces de lo mejor y lo peor, todos llevamos luz y oscuridad en nuestro interior, un cielo y un infierno. Creo que la forma en que nos movemos entre los dos es lo que nos define como personas. Y ahí es donde entran los artistas, el arte, la música, la poesía, las novelas románticas, los finales felices; para mí, herramientas esenciales que nos iluminan un poquito la vida. Deseaba crear una historia en la que el hilo conductor fueran todas estas teorías mías. Espero haberlo conseguido (risas).
¿Cuánto tiempo te llevó crearla?
Alrededor de unos siete meses. Debí hacer un parón por unos problemillas familiares, que se resolvieron para bien, y después la retomé con muchas ganas, porque la historia me atrapó por completo.
¿Por qué escogiste esa ambientación en particular?
En primer lugar, me fui a Buenos Aires porque el destino de Lena tenía que quedar muy lejos, pero, en esencia, debía parecerse mucho a lo que dejaba atrás, ya que en realidad el viaje es una búsqueda de sí misma. Me encantaban los destinos de Londres, París, Italia, o Nueva York, por poner un ejemplo, pero creía que, tal vez, teníamos más en común con la capital Argentina; formada, en su gran parte, por emigrantes españoles. Por otro lado, en lo que se refiere al bar y al conventillo, que bajo esa fachada decadente esconden grandes tesoros, debían ser una alegoría de los personajes que la protagonista hallará allí: los tres ancianos. A raíz de mi trabajo en Servicios Sociales he conocido a gente mayor absolutamente maravillosa, personas a las que respeto y que considero amigos, de los que aprendí que nunca hay que fiarse de las apariencias, que bajo la fachada más decaída pueden hallarse verdaderas maravillas. Considero que la gente mayor tiene un punto de franqueza (a veces despiadada) que supongo que te dan los años. Esa capacidad de decir lo que les de la gana sin medir mucho las consecuencias es algo que me encanta. Por lo que decidí establecer esa simbología entre el lugar y las personas que hay en él; de hecho, el título Corazones en el café podría interpretarse como las personas que Lena se encuentra en la cafetería, y no tanto como los dibujos que se hacen en la espuma del reconstituyente elixir. Además, como hacen los pintores, también he tratado de jugar con la luz; por aquello que te contaba sobre la capacidad que tenemos las personas de inclinarnos hacia el lado bueno de la vida. Por eso, si os fijáis, el libro comienza y termina con «luz»; y no, no es una coincidencia (risas).
¿A ojos de su creadora cómo es y qué podremos vivir a través de las páginas de Corazones en el café?
Además de todos estos símbolos de los que te he hablado, y que traté de ir introduciendo de forma suave, para que el lector los percibiera sin resultar pesados, te diría que Corazones en el café es la historia de un viaje: el viaje de Lena a la búsqueda de sí misma. Creo que la gran mayoría de nosostros sufrimos algún revés en nuestra vida que nos rompe los esquemas, haciéndonos replantear si el camino que tenemos marcado es el que deseamos o si, por el contrario, deberíamos transitar otras sendas. Normalmente, cuando tomamos la determinación de cambiar no pensamos en lo que el destino nos depara. Yo creo que Corazones en el café es la historia de una mujer que se lanza al mundo con la intención de encontrar su lugar en él.
Los personajes principales son una de las bases donde se asienta el éxito de una obra romántica, ¿qué nos puedes contar de ellos?
Al conocerles parecen distintos; incluso se podría decir que son como la noche y el día. Sin embargo, tan solo hay que observar con detenimiento para ver que tienen muchas similitudes. Ambos son dos personas que han perdido y sufrido; puede que él más, lo que le ha convertido en un hombre cínico y un tanto arisco. Pero si le damos tiempo y le conocemos un poco mejor, creo que descubriremos a alguien extremadamente sensible y brillante. Ella es una chica que, a simple vista ha tenido más suerte, proviene de una familia acomodada, aunque eso no la ha convertido en una caprichosa, sino todo lo contrario; alguien muy especial para ella le enseñó que todo lo que merece la pena requiere de tiempo y esfuerzo. No obstante, la ausencia de dificultades le ha conferido un carácter amable y dulce que la convierten en alguien difícil de olvidar.
Una novela romántica es la historia de un amor. ¿Cómo es el amor entre Lena y Alex?
Conocerse les cambia a los dos, solo que el proceso será desconcertante y muy intenso para ambos, ya que esa emoción tan poderosa del amor los pilla desprevenidos. Como la historia se cuenta a través de los ojos de Lena, seremos conscientes de cómo la emoción surge y se transforma en ella. Sin embargo, los sentimientos de él tendremos que ir descubriéndolos a través de sus actos. A mí me gustó mucho ver cómo la dulzura de Lena iba desgastando y ganando la partida al mal humor y al cinismo de Alex.
¿Te atreves a darnos tres razones por las que no debemos privarnos de la lectura de esta novela?
Pienso que si creéis en el azaroso destino y las segundas oportunidades, si confiáis en la «buena gente», y creéis que el amor se cocina bien a fuego lento, esta historia podría gustaros.
Ha sido un enorme placer tener la oportunidad de hacerte esta entrevista. Muchas gracias por tu tiempo y por compartir con todos nosotros esta experiencia como ganadora de este certamen. Te deseamos mucha suerte con Corazones en el café y muchos éxitos futuros.
Antes de despedirme quisiera felicitaros por todo lo que trabajáis a favor del género romántico. Me gustaría además haceros llegar, al equipo de El Rincón de la Novela Romántica y a todas vuestras lectoras y lectores, toda mi gratitud y cariño. ¡Infinitas gracias!
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Comentarios (29)
Fina Andres Garcia
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Rajae
En cuanto a la presentacion de el libro , me ha parecido estupenda, me encantaría leérmelo ya que nuca he leído nada de esta autora y se ve que ha puesto mucho cariño a la hora de escribir la novela y lo transmite a través de sus personajes.
Felicidades una vez más y que le sigan más novelas
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María Arca
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MARIAN
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Mónica Agüero Fernández
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Montse
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Paqui
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Adriana Rubens
Enhorabuena por el premio, Rita!!
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Dougless
Mucha suerte a la autora a partir de ahora.
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LadyLaura
Solo me queda decir que será de mis próximas lecturas, que muchas gracias por esta presentación tan bonita del libro y suerte para la autora.
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Amparo
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Rociodc
Me ha parecido muy curioso lo que dice Rita en la entrevista sobre la gente en el aeropuerto. Como a ella yo tampoco soy muy amiga de los aviones y nunca me había parado a pensar lo que ella dice, pero es cierto que de alguna manera es uno de los sitios más románticos o reales que existen XD
Me ha encantado conocer algo más de la autora, así que gracias por la entrevista! Le deseo mucha suerte.
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raquel romero rodriguez
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Alla
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Carmen Zapico Zapico
Me ha encantado la entrevista y las explicaciones de Rita han hecho que tenga ganas de leer el libro y la portada es genial. Vaya, que no me voy a quedar sin leerla, eso seguro.
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Pepa Alcaraz
Me han hablado muy bien de esta novela y, tras leer la presentación en palabras de la propia autora, me entran todavía más ganas de poder leerlo
Felicidades por el premio!!!
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Avi
Tengo que leer algún libro más de esta autora. Me hace gracia porque yo también me emociono mucho en los aeropuertos y estaciones con las despedidas y bienvenidas... Sigue regalándonos historias, Rita. Gracias por esta presentación.
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Elena
Muchas gracias por la entrevista!!!
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marivi
Me ha encantado la entrevista , como cuenta todo entre "risas", y como nos presenta su obra y a sus personajes.Graciassss
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Carmen
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ANA MARIA GARCIA
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mercedes gallego
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Elizabeth Urian
Además, me gusta saber de los detalles que han llevado a crear una historia en concreto. Lo de los aeropuertos nunca lo había pensado.
Solo me queda decir que me ha encantado la presentación del libro y felicitar a Rita.
Muchas gracias.
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Carmen
Gracias por la entrevista y la presentación.
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Mercedes
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Cynthia HJ
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Marisol Villa
Gracias por la entrevista
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Roxana
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Luciago
Me ha encantado la presentación. Gracias
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