Mi vida en ruinas

My life in ruins

Argumento

Georgia es americana de ascendencia griega, así que se muda a Grecia en cuanto tiene ocasión. Allí, las cosas no le van como había pensado y termina trabajando como guía de turismo. Normalmente, siempre le tocan grupos de lo más disparatados y nadie comparte con ella su pasión por la historia y los monumentos de la antigua Grecia. Hasta que, un día, su revoltoso y especial grupo de turistas y, sobre todo, el chófer de autobús que le asignan, le harán ver la vida de otra manera.

Crítica

“Mi vida en ruinas” es una de mis películas favoritas y que, continuamente, vuelvo a ver. No es sólo por la comedia, que me encanta y me hace reír un montón. Es también por la moraleja que hay detrás, por cómo se van desarrollando los personajes, por el bonito romance y, sobre todo, por cada uno de los personajes que intervienen en esta película. Todos, desde el primero hasta el último me gustan. Me parece que son totalmente verdaderos. Y os lo digo yo que, como Georgia, trabajo como guía de turismo y estoy acostumbrada a grupos de lo más variopintos.

El más importante, sin duda, es Irv. Yo tardé en conectar con él porque era un creído. Luego me di cuenta de que así se creaba una fachada con la que engañaba al mundo y me gustó. El pobre echa de menos a su difunta esposa y no lo ha superado. La escena hacia el final, donde la ve, se sale un poco de lo que normalmente esperamos en estas películas, pero creo que es tierna y bonita. Debo decir que en ese momento me temí lo peor, ¡menos mal que no pasó! Y bueno, el protagonista masculino, Poupi, es genial. Se preocupa 0% por su aspecto y eso lo hace más mundano, más natural y cercano. Su célebre frase “siempre hay tiempo para un café” se me quedó desde entonces grabada. Me parece que él y Georgia hacen una pareja muy bonita y pegan un montón.

La música es bonita y está muy bien elegida. Y la historia avanza a buen ritmo. Además, hay escenas que me gustan especialmente y nunca se me olvidan. Especialmente, la escena en la que ella dice que las piedras, que los monumentos, hablan con el viento. Suena raro, pero os digo que es verdad y yo, muchas veces, me dedico a escucharlos cuando hago rutas y cuando voy de viaje.

En fin, si te gustan las comedias románticas de toda la vida donde, además de reírte y enamorarte, también quieres ver lo bonita que es Grecia, ¡no te la puedes perder!

Valoración: 5/5

Curiosidades

Nia Vardalos, después del éxito que obtuvo con la película “Mi gran boda griega”, protagoniza esta cinta que, según la crítica, es apenas mediocre.

Desde el año 1957 no se había grabado ninguna película en la Acrópolis de Atenas.

Para algunas escenas también se rodó en España (concretamente, en la Costa Blanca).

Artículo realizado por Cynthia H.J.

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