Otoño en Nueva York

Valoración: 2/5

Sinceramente, no veo qué tienen estos dos actores o por qué la gente está tan enamorada de esta cinta. Como personaje dulce y con pasión puedo ver a Richard Gere, pero como seductor no lo veo para nada. Ella no me consigue hacer llegar nada, no consigo conectar con ella, por muy mona y maja que sea. Se supone que se está muriendo y que le queda poco, pero no consigue hacerme sentir pena o consideración hacia ella.

No he conseguido sentir esa desesperación por saber que te vas a morir, y cuando ya habías hecho las paces con la vida y piensas irte sin lamentar nada, aparece algo tan poderoso que quieres seguir viviendo.

Es una buena película, se nota que han mimado los detalles, buscado planos de paisajes muy bonitos y que el hecho que ella se vaya a morir no esté siempre en primer plano.

No me gusta saber de antemano cómo va a ser el final, qué les va a pasar a los personajes, y no me gusta para nada ese interés morboso por el camino hacia la muerte de las personas con enfermedades terminales. Me parece una invasión de la intimidad.

Creo que eso, además de que los actores no son mis favoritos, ha hecho que me costara apreciar esta película.

Es demasiado tópica, se han hecho muchas sobre este tema, es empalagosa y sin gran pretensión. Las cosas fluyen como lo hacen en este tipo de películas, no hay grandes sorpresas y el final se ve venir desde lejos.

Lo único bueno que le veo a esta película es que es perfecta para una noche en que te sientes con bajón, en tu sofá en pijama con amigas y compartiendo palomitas y helado, buscando llorar sí o sí.

No te obligará a pensar demasiado, la trama es muy fácil de seguir.