Pijama para dos

Carol Templeton es una publicista de Nueva York, durante bastante tiempo lleva soportando a un duro competidor, Jerry Webster que trabaja para otra agencia publicitaria pero cuyos métodos de captación de clientes no son del todo limpias. Harta de perder una cuenta tras otra, decide denunciar a Webster ante la comisión y para ello cita ante el consejo a la última de las conquistas de Webster, una corista llamada Rebel.

Enterado Jerry de los movimientos de la Tempelton, acude a Rebel para convencerla de que no declare ante la comisión. Ante la resistencia de ésta Jerry no tiene más remedio que mentir diciéndole que será la nueva estrella de una serie de spots publicitarios de la marca Vip que saldrá pronto al mercado.

El día que la comisión se reúne, Rebel miente y responde textualmente a un guion inventado por Jerry que lo convierte prácticamente en un ejemplo de honestidad y santidad. Carol enfadada, acude al dueño de la Agencia de Jerry, el señor Pete Ramsey jr. Hombre inseguro, con múltiples traumas infantiles, Pete Ramsey decide alejar a su mejor empleado de la escena neoyorquina, organizando un viaje de fin de semana para ambos. Mientras Jerry hace las maletas, Ramsey , interrogado por un empleado sobre qué hacer con los videos de la marca VIP, decide que aparezcan en la televisión en una campaña de saturación publicitaria.

Enterado Jerry de lo que su jefe ha hecho, y con el agravante de que tal producto no existe, acude a un químico, un premio nobel antisocial, llamado Tayler, para que invente algo que pueda pasar por ser el producto estrella de la temporada, el VIP. Sin embargo mientras se encuentra en el laboratorio de Tayler aparece Carol Templeton, la cual no ha dejado de investigar las andanzas de Jerry con el fin de quitarle de las manos cualquier posible contraro en ciernes.

Ante la visión de una Carol Templeton que Jerry ni siquiera imaginaba, este se hace pasar por el doctor Tayler, siguiéndole el juego e intentando seducirla en el proceso.

Y así la trama está servida. Una tras otra asistimos a las escenas divertidas de un mujeriego haciéndose pasar por un antisocial y tímido doctor con poco mundo.

Es la segunda película que la pareja protagonista Doris Day y Rock Hudson realizaron juntos. Debido al éxito de la primera Confidencias a medianoche, aceptaron trabajar juntos de nuevo, incluyendo a Tony Randall, actor secundario fuera de serie. Sin embargo la trama no es demasiado original, ya que repite en cierta forma la historia de la anterior película, intentando imagino, conseguir el mismo éxito de público.

En definitiva, una película entretenida, divertida, curiosa ya que tiene sus añitos, con un trío de actores maravillosos, y con ese sabor a los clásicos de los sesenta.

Mi valoración 1/10, un 7