Un, dos, tres... Splash
- Categoría: Películas románticas
- Duración: 111 minutos.
- Género: Comedia romántica, Fantasía y romance
Argumento
Cuando Allen Bauer era un niño, una sirena lo salvó de morir ahogado. Veinte años después, en el mismo lugar, cae de nuevo al mar y es rescatado otra vez por la misma sirena. Muy confuso por lo sucedido, vuelve a Nueva York, pero la sirena está decidida a encontrarlo.
Crítica
Bueno, comienzo mi opinión diciendo que creo que no hay nadie en el mundo que no conozca esta película, ¿verdad? Yo al menos he crecido con ella. Mi pasión por las sirenas (La Sirenita de Disney hizo mella en mí XD) me hizo descubrir esta película a temprana edad y devorarla cada poco tiempo. Realmente creo que me sé las escenas y diálogos de memoria.
No será quizás considerada un clásico entre los clásicos, pero para mí es una película súper bonita, dulce, tierna y divertida, que recuerdo a menudo.
Allan es salvado de ser ahogado siendo un niño, tras caerse de una embarcación. Él creyó ver una sirena, cosa imposible, claro. Algo que achaca al golpe.
Años después una joven preciosa y peculiar aparece en mitad de Nueva York y dice conocerlo. Algo que descoloca a Allan pues no la conoce de nada y se ve en la obligación de hacerse cargo de ella, pensando además, que está mal de la cabeza.
La romántica historia nos va enseñando cómo Allan va descubriendo y enamorándose de una Madison totalmente cuerda y entregada. Pero claro, cuando él descubra la verdad... será bastante impresionante.
Pues como decía al principio, vivo enamorada de esta película y cada vez que puedo y me apetece la veo. Para mí es una película especial y entrañable.
Sinceramente, aparte de encantarme el argumento, me impresiona que para la época en la que está filmada, el efecto de la cola de sirena esté tan bien conseguida.
Para mí, tiene escenas y diálogos memorables de los que vivo enamorada al recordarlos. Así que por mi parte no me queda más que recomendar esta película si aún hay alguien que no la haya visto.
Curiosidades
Se rumoreó que Disney optó por cambiar el color de pelo de su cinta La Sirenita para que no se diera la opción de confundir ambas historias. Ya que la película de Disney se estrenó en 1989. Así que podríamos decir que Madison fue la culpable de que Ariel fuera pelirroja.
Antes de que Tom Hanks fuera elegido para el papel de Allan, fue un personaje rechazado por varios actores importantes.
La película estuvo nominada al Óscar al mejor guión original.