Vacaciones en Roma
- Categoría: Películas románticas
- Duración: 118 minutos
- Género: Clásicos románticos, Comedia romántica
Argumento
La princesa Anna está en visita oficial en Roma. Es muy joven y está cansada de sus obligaciones, de que la vigilen y de atenerse a un estricto horario, por lo que decide escaparse durante la noche y vivir la vida de cualquier mortal. Conoce a un periodista norteamericano que la lleva a su apartamento. Joe Bradley, al darse cuenta de que es la princesa extranjera, se presta a enseñarle la ciudad diciendo que tiene unos días libres en el trabajo. Con ayuda de un amigo fotógrafo, le van tomando fotograf´çias sin que ella lo sepa con el fin de conseguir una exclusiva. La joven está maravillada de poder conocer Roma como si fuera una turista cualquiera, sin percatarse de que la están engañando. Se corta el pelo, compra en un mercado, va a un baile nocturno en un paquebote, monta en una vespa causando un caos... Y hasta se mete en una pelea contra sus propios guardaespaldas cuando les descubren. Pero sabe que debe regresar a su mundo, así que se despide de Joe, del que se ha enamorado, y del fotógrafo, agradeciéndoles esas horas de dicha.
Cuando Anna ofrece una recepción especial a la prensa, ve a ambos entre los periodistas. Ellos le entregan entonces un sobre en el que están todas las fotografías que le han tomado como muestra de amistad, prometiendo sin palabras guardarle el secreto. La sonrisa llena de amor de Anna hacia Joe, lo dice todo.
Crítica
Se puede decir que esta película fue la que lanzó al estrellato a Audrey, porque hasta entonces sus papeles en el cine no habían revestido mucha importancia.
Casi podría ser un cuento. La princesa solitaria, agobiada por las responsabilidades, siempre vigilada, continuamente debiendo seguir un horario estricto y agotador. Pasa por las ciudades sin poder disfrutar de ellas. Y está harta de tanto protocolo. Por eso decide escaparse yvivir, aunque solo sea una noche, como una muchacha normal.
Los exteriores son preciosos, aunque no podíanser de otro modo estando en Roma. Para los que conozcan esa ciudad, representa un regreso a ella, poder volver a ver sus calles, sus mercados, sus fuentes. El director, Wyler, desechó rodar con decorados porque quería mostrar la verdadera Ciudad Eterna.
Se trata de una comedia divertida donde Audrey brilló con luz propia durante el rodaje. Tanto es así, que se dice que la productora deseaba que Gregory Peck, actor ya consagrado, encabecera en solitario los carteles de crédito y él se negó, argumentando que aquella muchacha delgada, con cara de ángel, iba a llegar a ser un boom. No se equivocaba.
¿Qué acaba como no deseamos? No podía ser de otro modo porque no se trata de un cuento. El periodista no acaba casándose con la princesa, pero es una película sumamente divertida, llena de ternura, que te hace desear viajar a Roma si no has estado o volver a emprender viaje para perderte en sus calles y entre sus gentes.
Una comedia romántica maravillosa por la que no pasa el tiempo.
Valoración: Muy buena.
Curiosidades
Peck preparó una broma a Hepburn en la escena de La boca de la verdad. La leyenda sobre este monumento, que se explica en la película, cuenta que quien miente pierde la mano al introducirla en la boca. Peck, sin previo aviso a la actriz, mete la mano y la esconde por debajo de su manga. Esto provoca el susto real de Hepburn y el director, viendo la reacción de la actriz, incluyó la escena aunque no está pensada así.
Wyler corrió el riesgo de contratar como guionista a Dalton Trumbo, un hombre marcado por la Comisión de Actividades Antiamericanas del senador McCarthy.
Las hijas de Wyler tienen un pequeño papel en la película. En la escena en la que Gregory Peck quiere tomar prestada la cámara de fotos de una niña, esa niña y la que avisa a la maestra, son las hijas del director.
Realizado por M.
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Olalla
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