Aimee Carson - Cómo romper un corazón

Crítica realizada por LadyZarek

Hunter Philips, el rompecorazones de Miami, puso en marcha el olfato periodístico de Carly Wolfe. ¿Qué clase de individuo sin corazón era capaz de inventar algo como El Desintegrador, una aplicación para romper relaciones? Pero, cuando lo retó a un duelo en televisión, no supuso que el azul helado de su mirada y su carisma arrebatador acelerarían de aquella forma su corazón... Después de que un escándalo profesional le hiciera perder su trabajo, Carly se había olvidado del amor. Una relación con Hunter podía llevarle a romper su regla de oro de no implicarse emocionalmente, pero ¿no eran, al fin y al cabo, gajes del oficio?

OPINIÓN:

No sé qué decir de este libro. Empezó gustándome, pero se ha ido desinflando poco a poco, debido a su protagonista masculino, Hunter, que parecía sufrir de un trastorno de personalidad múltiple, o era bipolar, a saber. Lo mismo odiaba y desconfiaba de Carly, que la besaba. No se decide en todo el libro. Pero el argumento me gustaba, y el libro es medio entretenido. Aún así, no aprueba mi examen como lectora.

Carly Wolfe está en un programa, vilipendiando una creación tecnológica de Hunter Philips, El Desintegrador. Pero la periodista no está preparada para la aparición del sexy empresario, quien termina ganando su particular batalla verbal, y ambos se retan a una segunda partida en el mismo programa.

Cary y Hunter empeizan a ver cosas en el otro que no querían, y que les hace plantearse su relación de enemistad. El deseo va surgiendo, desbancando al rencor de la periodista y la ira del empresario. Hunter intenta alejarse de la irresistible tentación que supone Carly, hija de un magnate de los medios de comunicación. Y no quiere repetir un gravísimo error del pasado, que le costó su intachable reputación en el FBI, que finalmente abandonó ante la falta de apoyo de sus compañeros.

Bueno, poco más voy a añadir en cuanto a mi comentario de la trama de esta novela. No pintaba mal, y al principìo me gustó, pero como dije antes, Hunter me dio la tabarra con su comportamiento y me arruinó la segunda mitad de su lectura. Yo ya no sabía cómo catalogar a ese hombre. A veces se cabreaba con Carly y se cerraba a ella, y a veces se la comía a besos. A veces era frío, y a veces sentía "pasión". No me lo creo. Vaya cabeza tiene Hunter Philips.

De Carly no tengo quejas, porque aguanta los desplantes de Hunter con dignidad, y se enfada cuando la insulta. Tiene problemas con su padre, y ha sufrido en el pasado por un escándalo. Pero es fuerte y rehace su vida y su carrera no tiene nada que ver con la de su padre, no es una niña mimada.

Bueno, quitando que él me ha parecido absurdo, y que hay cosas que me sobraban, la novela es regular, poco más. Pero sirve para disfrutarla, si a la lectora no se le atraviesa Hunter. Su pasado no es justificación para la forma en la que trata a Carly.

Y nada más tengo que añadir a este corto Harlequín, de apenas 156 páginas. Regular y sin pasión, pero no se le puede pedir peras al olmo, y sabía que no iba a encontrarme con una joya.

Nota: 2/5.