Alexandra Martin Fynn - Pintar en las sombras

Crítica realizada por Dougless

Joanna McLeod está en Londres para encontrar marido. Su padre está enfermo y la ha enviado a casa de su tía la Condesa Lobelia Hart para que la ayude en esa ardua tarea. En realidad Joanna no desea casarse, su mayor pasión en pintar y su mayor anhelo es poder hacerlo cuando quiera y poder viajar por el mundo. Pero también tiene la necesidad de no ser una carga para su padre y sabiendo que el deseo de él es verla casada no le queda más remedio que pasar una temporada en Londres.

Su tía es una interesada que no ve más que problemas en ella y que no la deja pintar porque opina que no es adecuado para una dama por lo que Joanna tiene que pintar de noche. Lo único que le hace más llevadero la estancia en Londres es la compañía de su primo Steven. El cual, en un arrebato decide coger una pintura de su prima y ver si la puede vender a sus amigos. Cuál será su sorpresa cuando quien la compra es el Duque de Cunningstone.

Lord Benson Douglas Duque de Cunningstone es un gran aficionado al arte, mujeriego, excéntrico y bastante solitario está aburrido y al descubrir esas pinturas surge en él la necesidad de adquirir más. Él cree que el autor es un hombre...

La historia es preciosa, Joanna con su dulzura es el contrapunto perfecto para el hastío de Ben. Ambientada en mayoritariamente en Londres y el los bailes y fiestas dela aristocracia nos transporta a otra época, donde la mujer tiene poco que opinar y su única meta es el matrimonio.

Me encanta esta época, sus bailes, la vestimenta y el sentido del honor (a veces equivocado) que muestran los protagonistas.

En este caso me han gustado los dos protagonistas, tanto Joanna por su entereza y entrega a su pasión y familia como Ben, que es el sueño de cualquier mujer. Un poco cabezota respecto al matrimonio como cualquier mujeriego pero ya sabemos todas que luego son los mejores maridos.

Los secundarios también tienen su importancia, así como a Steven le coges enseguida cariño a Lobelia te dan ganas de desterrarla.

La trama es sencilla y ágil, no decae en ningún momento y la autora nos va expresando casi en cada momento lo que piensa cada uno de los personajes.

La lectura es fácil y casi sin darte cuenta ya has acabado el libro.

Y aunque es el segundo libro de una serie hay pocas de similitudes. Me imagino que esta autora seguirá con la serie, ya estoy pensando quién podría ser el siguiente.

Os lo recomiendo.