Amanda Stevens - La restauradora

Crítica realizada por Atrancasybarrancas

Me llamó mucho la atención el argumento de este libro, así que cuando salió fui directa a por el.

Mi primera sorpresa fue leer que era una serie, y mi segunda sorpresa ha sido encontrar un libro totalmente distinto a lo que me esperaba.

Creí que al tratarse de fantasmas sería parecido a la serie de Darynda Jones, craso error, el primer libro de esta serie no tiene trazas de humor por ningún lado.

Se trata de una niña que a los 9 años descubre que puede ver y sentir físicamente a los fantasmas, al igual que su padre, y este le da una serie de normas a seguir, entre ellas, que bajo ningún concepto ellos puedan darse cuenta de que ella los ve o siente, ya que en este caso su vida cambiará para siempre, y no para bien.

Amelia es adoptada, lo que no me ha quedado claro es si su padre es el biológico y solo es adoptada por parte de madre, o si es adoptada por parte de los dos.

Así que nuestra protagonista se ha convertido en una persona solitaria capaz de no demostrar la más mínima expresión en su rostro cada vez que ve fantasmas, que es continuamente en el momento en que el atardecer da paso a la noche.

Otra norma dictada por su padre es alejarse de los acechados. Los acechados son humanos que están ligados por algún motivo a fantasmas que no los dejan en paz. Estos fantasmas se nutren de la energía de los humanos, de sus sentimientos y emociones, con lo cual es muy, muy difícil conseguir deshacerse de un fantasma en el momento en que contacta con un humano.

Su padre, que es guarda de cementerios, le indica que puede encontrar lugares sagrados donde los fantasmas no podrán entrar, y así ella encuentra una casa donde vive y se siente segura.

Hasta que empiezan los problemas.

Amelia se ha convertido en una restauradora de cementerios de gran renombre, a la que le apasiona su trabajo, también tiene un blog dedicado a ello con muchos seguidores.

Mientras está restaurando un cementerio aparece el cuerpo de una mujer asesinada, y aquí empiezan sus problemas, ya que por primera vez se siente atraída por un hombre, que es el detective encargado del caso, que a su vez está acechado por el fantasma de una mujer y de una niña.

Al mismo tiempo a Amelia le empiezan a suceder cosas extrañas con las que no se había encontrado hasta ahora, y ante las cuales no sabe como reaccionar. No puede hablar del tema con su madre, este tema es tabú en su casa (su madre no debe saber que ve fantasmas, aunque parece saber alguna cosa) y su padre, bueno, su padre tampoco quiere hablar del tema, con lo cual no le ha contado nada a Amelia, excepto las normas. A Amelia le falta mucha información y esta información la tiene su padre...así que ya os podéis imaginar que Amelia se salta alguna que otra norma y sin ni siquiera darse cuenta.
El caso de asesinato se resuelve en este libro, por este lado el tema queda zanjado, pero quedan bastantes cosas en el tintero: el misterio del padre y de las cosas que no le cuenta, qué es lo que sabe su madre, el protagonista acechado por los fantasmas, que pasará ahora que Amelia se ha saltado las normas.

A mí el libro me ha enganchado desde el principio. No hay humor por ningún lado, al contrario, yo creo que la autora al principio quiere meternos miedo en el cuerpo. No hay mucho romanticismo en este primer libro, por no decir que hay bien poco, supongo que esta parte irá creciendo en los siguientes libros. Me ha dejado intrigada en varios aspectos y no tengo ninguna duda de que voy a comprar el siguiente libro, de hecho el libro con lo grueso que es, se me ha quedado corto, necesitaba seguir leyendo, sobre todo para ver como se arregla la relación entre los protagonistas ya que va a ser un poco complicada...no olvidemos que esta achechado por fantasmas que Amelia puede ver y sentir...y otra cosilla que complica la situación y que no os he contado.

En definitiva, a mi particularmente me ha gustado mucho.
Le doy un 8 sobre 10