Ann Bannon - Soy una mujer

Valoración:

Crítica realizada por rosamoni

Laura ya no puede soportar más la tiranía de su padre, desde que abandonó la Universidad la situación es cada vez mas claustrofóbica, y huye a Nueva York, allí empezará una nueva vida, un nuevo trabajo, unos nuevos amigos, un nuevo amor pero ¿podrá dejar atrás su pasado?¿Asumirá por fin su sexualidad o seguirá escondiéndose tras esa máscara de frialdad?

Partiendo de que cuando leo una novela romántica lo que busco es una maravillosa historia de amor, independientemente del sexo de sus protagonistas, lo que quiero es que me hagan soñar, disfrutar, reir, llorar y sentir. Pero esta novela desde luego que no me ha hecho disfrutar de ninguna manera, quizás haya sido porque la protagonista me ha caído como un elefante en el dedo gordo.

Siempre teniendo en cuenta que es un clásico de la literatura lésbica de 1950, escrito como folletín, que se compraba en los kioskos y así tenían más libertad en cuanto al contenido, sabía que nada podía ser tan explícito o tan normal como puede ser en esta época, pero me he encontrado una novela que me hacía viajar a la época de la ley seca, como si fuera en blanco y negro, con unos personajes de callejón oscuro, donde no hay alegría ninguna, todo son problemas, todo angustia, traumas, sentimientos escondidos, y cuando hay alguna relación es como si fuera algo sucio, algo que debe esconderse.

Según he podido descubrir esta es la continuación de Soy un bicho raro, en ella Laura descubría el amor con Beth, su compañera de cuarto, que acaba como el rosario de la aurora, y Laura lo abandona todo para cobijarse en su casa, donde tiene un padre maltratador, egoista, manipulador y cruel, que hace que tenga que huir a la ciudad de los rascacielos, donde conocerá a Marcie su nueva compañera de piso y a Jack, que la introducirá en los locales de ambiente del Village.

No sé por qué la titula Crónicas de Beebo Brinker, porque sale tres veces, y es sexo por instinto, sin hablar, sin conocerse, que todo eso estaría muy bien si no fuera porque cada vez que están juntas Laura lo único que hace es saciar sus instintos sexuales y atacarla, insultándola, siendo cruel innecesariamente, y con un final entre ellas rápido y precipitado.

Laura no me ha gustado, me ha parecido una protagonista cruel, egoista que solo piensa en ella misma y en sus problemas, a la que todo el mundo intenta ayudar pero a ella el resto como que le trae sin cuidado. Obsesionada con ella, con su sexualidad y la enfermiza relación con su padre. Que no sabe disfrutar de la vida ni de un solo momento de felicidad. Cuando la leia me venía a la cabeza el dicho de “Hazme más que más me merezco” .

Los secundarios no me han hecho empatizar con ellos en ningún momento, a la magnífica Beebo, aquella que según las criticas del momento, enfatizaron seria la persona que todo el mundo querría encontrar no llega a gustarme, a mi es que los felpudos no me llaman la atención. Es como una película de Almodóvar donde los personajes y sus situaciones son llevadas a casos extremos rozando la caricatura.

Quizás en su momento fue una novela que causó sensación y muchas personas homosexuales se vieron reflejadas pero a día de hoy me da la sensación que encaran el tema de una forma oscura y sucia, quizás sea porque si no tienes esa tendencia sexual no lo entiendes, yo desde luego no lo he entendido

Es como una novela negra pero yo desde luego de romántica no la catalogaría.

Valoracion: Del 1 al 10 le doy un 4

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