Bonnie K. Winn - Búsqueda peligrosa

Crítica realizada por Lilian

"Laura Kelly iba a necesitar toda su fuerza de voluntad. Su hijo necesitaba un trasplante de médula pero ella no podía donársela por no tener afinidad genética. Cuando descubrió que tampoco la tenía ninguno de sus familiares, la sospecha empezó a cobrar forma: era adoptada.

El detective privado Mitch Tucker tenía la reputación de ser el mejor de la ciudad, pero hasta él mismo reconocía que la búsqueda de los padres biológicos de Laura no sería fácil, especialmente cuando descubrió que la adopción de Laura fue ilegal. Además, parecía haber muchas personas interesadas en que el asunto permaneciera en el olvido.

Los riesgos eran grandes, pero también lo era la recompensa..."

Con el fin de encontrar un donante compatible que pueda curar la leucemia de su hijo, Laura emprende una lucha a contrarreloj. Alex sólo tiene 18 meses. Es un bebé que apenas ha comenzado a vivir y ya debe librar una dura batalla contra la enfermedad. Necesita desesperadamente un transplante de médula. Durante las pruebas a los diferentes familiares Kelly, Laura descubre una horrible verdad. Las médulas no son geneticamente compatibles con la de Alex, porque no hay realmente un parentesco biológico entre ellos. Su ex marido, es poco menos que un recuerdo y Laura debe empezar a rastrear sus orígenes si quiere que el bebé tenga una oportunidad.

Mitch Tucker, intenta sacar adelante su negocio. Es un buen investigador privado pero ha estado un tiempo fuera de la circulación. Debe pagar unas cuantas facturas y necesita urgentemente un cliente. Laura Kelly se deja caer por su oficina y aunque Mitch no está muy convencido, al final accede a ayudarla.

Alex es un niño encantador y Mitch pronto convierte el caso en algo personal. Con Laura pegada a sus talones empieza la cuenta atrás...

¡Marchando una de suspense romántico!. Con una trama de adopciones ilegales de fondo, Bonnie K. Winn, construye una historia sin pretensiones pero muy amena. Me ha gustado mucho, como poco a poco, la investigación va avanzando y los orígenes de Laura ven la luz. El argumento transcurre sin prisa pero sin pausa y te da tiempo a saborearlo. La relación entre Mitch y Laura nace como algo natural entre dos personas que tienen un objetivo común. De la simple camaradería acercan posturas, sin que apenas se den cuenta. Es fácil imaginarlos en la intimidad de su hogar como una pequeña familia. Notas la angustia de una madre y su desesperación, cuando las pistas les conducen a un callejón sin salida y el tiempo se agota.

En cuanto a los personajes secundarios, son de los que pasas una página y ya ni te acuerdas de sus nombres. La familia de Laura sólo ocupa un par de líneas de la novela y la niñera de Alex es tan cargante, que hubiera preferido que su papel se limitara a un hola y a un adiós.

Pues eso, una novelita más que se deja leer. Mi puntuación es 3/5