Carolyn Davidson - Quédate para siempre

Crítica realizada por Lilian

Libro 1 de la serie Benning, Texas

"De repente... ¡era padre! O al menos era muy parecido a serlo. El rico Nicholas Garvey se quedó estupefacto cuando se enteró de que tenía que hacerse cargo de una sobrina que ni siquiera sabía que tenía. Pero la mayor sorpresa se la dio Carlinda Donnelly, la cautivadora niñera de la pequeña, una mujer que iba a darle a conocer los placeres del amor... y del hogar.
Él la llamaba Lin, un diminutivo dulce e incluso inocente, pero Carlinda sabía que Nicholas era todo menos inocente. Estaba claro lo que quería de ella. Aquel hombre tan complicado y con tantos planes de futuro hacía que el corazón se le acelerara... y que sus pasiones se desataran"

Opinión:

Carlinda Donnelly, lleva de la mano a una niñita de cinco años que acaba de perder a sus padres. Linnie debe cumplir con la última voluntad de Irene, la madre de Amanda, y llevar a la niña a vivir con su tío. Nicholas ni siquiera sospecha que tiene más familia, aparte de un padre que siempre ha estado ausente. Y tras el asombro inicial, acoge en su casa a niñera y sobrina con los brazos abiertos. Las huéspedes traen una agradable rutina a la vida de Nicholas pero no dura mucho la tranquilidad. Es entonces cuando empieza la trama a tener algo de emoción porque hay alguien que está empeñado en secuestrar a Amanda...

Llevaba mucho tiempo sin degustar una novelita de Carolyn Davidson y quizá le he puesto demasiadas ganas. A priori, cuando empiezo a leer un harlequin de esta autora doy por hecho que voy a encontrarme con unos personajes especiales y una ambientación, de las que me gustan a mí, al más puro estilo del Oeste. Y la verdad es que no he encontrado descripciones rancheras o cabalgadas a la luz de la luna y, de hecho, me ha descolocado que el protagonista sea el propietario del único banco del lugar. No ha sido fácil imaginarme a Nicholas Garvey, con su traje de estirado banquero, haciendo carrera en un pueblecito de Texas ni llevando una vida apacible y sosegada. Reconozco que el problema lo tengo yo que soy un animal de costumbres y cuando leo un romance de la señora Davidson, espero encontrar ciertas similitudes en sus personajes. Quiero que haya entre ellos: pasión, tensión sexual, malentendidos por aclarar... en definitiva, algo que te haga sentir su fuerza y que te mantenga pegada al sofá. Y aunque a medida que se acerca el final parece que se anima un poco la cosa, la historia no ha logrado engancharme por el desencanto que arrastraba.

Poco más puedo añadir que mi valoración, que no va a pasar del Regular.