Catherine Anderson - Always In My Heart

Crítica realizada por Melisma

(Sin traducir)

Ellie y Tucker llevan vidas separadas. Es lo que creían mejor por el bien de sus hijos.

Sin embargo, los niños, Zach y Kody, siguen convencidos de que sus padres están destinados a estar juntos y organizan un plan para volver a juntarlos. El plan consiste en fugarse de casa a los bosques y esperar a que ambos se pongan de acuerdo para ir a buscarlos y rescatarlos.

Esta novela me ha parecido emocionante porque es un espejo de las relaciones familiares y el modo en que se debe seguir adelante.

La pareja se ha conocido desde que eran pequeños, han mantenido un noviazgo en la adolescencia y se han casado jóvenes. Su amor les da tres hijos estupendos a los que adoran. Pero la desgracia se ceba en la familia cuando el hijo mayor, Sammy, muere en un accidente de moto.

Lógicamente, la familia queda devastada, porque la muerte de un hijo es la peor tragedia que puede suceder. Y no solamente afecta a los padres, sino a sus dos hermanos pequeños, Zach y Kody.

No es la primera vez que vemos que un caso así rompe una familia. Ellie y Tucker se culpan de lo sucedido, empiezan a distanciarse y acaban divorciándose por el bien de sus dos hijos.

Pasa el tiempo y ambos parecen haber rehecho su vida, aunque en realidad no es así. Truck sigue viviendo en Oregón, y ha empezado a salir con una muchacha. Por su parte, Ellie se ha marchado con los niños, ha buscado un nuevo trabajo y cree ser feliz en la distancia. También ha encontrado un amigo, Marvin, que no es mala persona. Los niños no se llevan muy bien con él, para ellos es solamente un personaje que se entromete en su vida.

Saber que su padre está flirteando con otra mujer y que su madre empieza a sentirse cómoda con otro hombre, preocupa a los niños. Ellos están convencidos de que sus padres deben estar juntos, que han nacido para envejecer uno al lado del otro. No quieren una madrastra ni un padrastro.

Aquí en donde los niños entran en acción y me han recordado la película de Tú a Boston y yo a California, donde dos hermanas gemelas y separadas por el divorcio de sus padres, se cambian para intentar unirlos de nuevo.

Zach y Kody deciden escaparse al desierto. Es el único modo que encuentran para que sus padres se junten y vayan a rescatarlos. Están convencidos de que no será complicado dar con ellos puesto que su padre conoce el terreno perfectamente. Por otra parte, ellos han aprendido de Truck muchos trucos para mantenerse a salvo en el desierto hasta que les encuentren.

La novela tiene un poco de todo. A veces es divertida, a veces triste, se pasa de la tensión a la sonrisa mientras seguimos las peripecias de los dos muchachos y vemos que sus padres no han dejado de amarse.

Me ha entusiasmado el valor de los dos niños, he reído con sus travesuras y me ha emocionado su tesón para conseguir su objetivo.

El romance entre los padres es precioso.

En fin, que me lo he pasado divinamente con esta historia y la recomiendo convencida de que os va a gustar.