Catherine Coulter - La herencia del amor

Crítica realizada por LILIAN

Libro 1º de la serie "El legado"

"Cuando muere el conde de Chase, su impetuoso sobrino Marcus espera recibir toda la herencia pero, para su sorpresa, descubre que su tío ha legado la mayor parte de su patrimonio a su hija bastarda Josefina, fruto de sus amoríos con una cortesana holandesa.
Sin embargo, éste no es el mayor problema de Marcus, sino otro muy distinto: si él y Josefina no se casan antes de cierta fecha, la herencia entera pasará a manos de unos lejanos y codiciosos parientes norteamericanos"

Indicar que originalmente la sinopsis, del libro de la editorial Cisne, alude al duque de Chase cuando en realidad es el conde de Chase. Hay otros matices que no son exactos, pero que no me atrevo a cambiar para no destripar el libro.

Josefina Cochrane, conocida desde los nueve años como la duquesa (gentileza de su primo Marcus), vive feliz en una casita con su madre. Allí acude, de vez en cuando, el "tío" James. Durante sus visitas, su madre resplandece de felicidad. Todo lo contrario, que siente la duquesa cuando debe acudir anualmente a Chase Park para pasar unos días con sus "primos".

Marcus Wyndham, no es más que el sobrino del conde de Chase. Su vida está libre de responsabilidades, pero una terrible desgracia le convierte en el único varón disponible para heredar el título.

Años atrás cuando no eran más que unos niños la relación entre Marcus y la duquesa, no podía ser más distante. Ahora Marcus, se ha convertido en el nuevo conde de Chase y su deber es cuidar de sus primas y de la duquesa. Marcus, que no había vuelto a ver a la duquesa desde que ésta tenía 13 años, acude en su busca. Cuando la encuentra ve a una joven que sigue siendo muy guapa pero muy contenida. Cuando se abre el testamento del "tío" James, hay más de una sorpresa. La duquesa, ahora hija legítima de James Wyndham, no sólo es la heredera de gran parte del dinero, sino, de muchas de las propiedades del conde. Hay un pero... se debe celebrar el matrimonio entre Marcus y la duquesa o Marcus será un conde pobre. La duquesa, sin embargo, recibirá una sustanciosa asignación anual. Su lealtad a Marcus la lleva a aceptar la boda. Una vez casados (por cierto, ¡qué boda tan original!), Marcus no se cansa de humillar a la duquesa. Quiere hacerle pagar todos los feos que en su día, le hizo su padre.

Entre tanta falta de amor, la historia avanza insípidamente hasta que la aparición de un tesoro llena de desastres Chase Park...

Yo que llevo un tiempo lanzando las campanas al vuelo con Catherine Coulter, he tenido que tropezar con La herencia del amor y ponerle una muesca en su expediente. He leído ya unos cuantos libros suyos y adoro esos argumentos tan novedosos, esos diálogos tan divertidos, esos personajes tan bien construidos, esa ambientación tan conseguida... La herencia del amor, no parece escrito por la misma persona. Es un libro que a mí me ha resultado decepcionante en todos los sentidos. Un argumento al que le sobran páginas, una ausencia prácticamente de diálogos, unos personajes como Marcus el castigador y su apática duquesa que no dan para más o una ambientación sin ambientar, hacen de este libro un libro completamente olvidable. Ahora me alegro mucho de haber empezado a leer la trilogía de El legado por el final, porque si empiezo de la forma correcta no hubiera continuado con esta escritora y hubiera dejado de leer dos buenos libros. Afortunadamente, la serie no es necesario seguirla en orden.

La historia de amor entre Marcus y la duquesa, no tiene espíritu ninguno y transcurre a trompicones. Yo lo resumiría así: te obligo a consumar el matrimonio (la duquesa a Marcus), a continuación, (Marcus a la duquesa), voy a usarte hasta que instale a una querida por los alrededores y por último (Marcus a la duquesa y la duquesa a Marcus), vienen los malos y daría mi vida por ti... Vamos, que no se sostiene la historia ni con alfileres y la sufrida lectora de turno no para de bostezar.

La parte del libro que trata sobre la búsqueda del tesoro (una constante en la trilogía) está de más. Es cansina y no lleva a ningún sitio. Catherine Coulter, parece que tiene una fijación con este tema. Hubiera sido más lógico que la trilogía se llamara "El tesoro", porque es el único tema que comparten los tres libros. Bueno, ésto y la aparición estelar de los condes de Chase en la segunda y tercera parte de la serie.

Mi puntuación es 1,5/5