Crítica realizada por Linnea
Solo hay un vampiro con el que Sookie Stackhouse se relaciona: Bill. Pero desde hace algún tiempo está algo distante: tanto como que se ha ido a otro estado. Eric, su siniestro y atractivo jefe, cree saber dónde encontrarle. Sin pararse a pensarlo, Sookie pone rumbo a la ciudad de Jackson, Mississipi. Allí encontrará el Club de los Muertos, un lugar peligroso en el que la sociedad vampírica suele acudir para beber sangre. Sookie encuentra a Bill en una situación que la sorprende, porque la está traicionando.
Puede tener spoilers.
Esta novela me ha gustado algo más que otras que he leído de esta autora y de esta saga. Por lo pronto, cuando la protagonista descubre a Bill ya no está convencida de querer salvarle o de matarle definitivamente, lo que da un poco de emoción al argumento.
La novela tiene de todo un poco: seres fantásticos que chupan sangre, algo de romance y hasta un poco de humor, haciéndose entretenida.
Bill se nos aparece como un ser que se dedica demasiado al trabajo y no hace mucho caso a la protagonista. Y ella piensa que su relación va en declive. Pero no sabe cómo arreglarlo. Pero su novio está llevando a cabo un asunto muy importante para la reina, un asunto que les pone en peligro a los dos, por lo que le pide que se vaya de la ciudad y que si algo le sucede a él, guarde su ordenador y toda la información que tiene. Casi la pone en el camino hacia Eric, aunque ella está enamorada de Bill y no piensa, o no quiere pensar en dejarlo.
Alguien intenta matar a Sookie. Y es un hombre lobo perteneciente a una banda. Salvada por los pelos, recibe una noticia que la deja traumatizada: su Bill ha muerto. Él ha tenido contacto con una mujer vampiro y Sookie viaja a Jackson para averiguar qué es lo que ha sucedido, porque no acaba de creer que su novio esté muerto.
La autora nos saca aquí a un hombre guapo, inteligente y seductor, todo lo que una mujer puede desear. Hay una pega: que es también un hombre lobo. De todas formas, la atracción entre este nuevo personaje y la protagonista nos lleva a un idilio.
El Club de los muertos es un bar extraño, con gente extraña (lo llevan vampiros). Un sitio donde los hechizos están a la orden del día (o de la noche) Un reducto en el que solamente se puede entrar si vas acompañado de un ser fantástico. El macizo de turno ayuda a Sookie a introducirse en ese lugar y nuestra heroína salva incluso a una mujer vampiro, lo que le sirve para poder llegar hasta la casa del que tiene prisionero a Bill y rescatarle.
Sigue pareciéndome soso el romance entre los protagonistas. Sigue pareciéndome que hay demasiados hombre lobo y vampiros detrás de Sookie.
La historia entre Sookie y Bill no se finaliza en esta novela.
Entretenida. Y escrita con talento.
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