Cindy Gerard - To the edge

Crítica realizada por Mariam

Novela sin traducir

   Ser hija de uno de los hombres de negocios más importantes y acaudalados de Florida, no ha supuesto para Jillian Kincaid tantas ventajas como cabría esperar en su posición, sino que le ha acarreado vivir siempre bajo la sombra de guardaespaldas y fuertes medidas de seguridad. Por ello la simple mención de contratar uno, le provoca un escalofrío y casi… urticaria.
   Sin embargo algo cambia cuando empieza  recibir peligrosas amenazas de muerte. Este hecho provoca que Darian Kincaid, su padre, contrate a un guardaespaldas para protegerla. Pero Jillian no está dispuesta a renunciar a su trabajo como periodista y presentadora de informativos de televisión, ni  modificar el ritmo de su vida. Su adolescencia se convirtió en un infierno por la presencia constante de guardaespaldas que no respetaron ni fiestas, amigas o citas. La situación fue traumática para ella y no desea volver a pasar tan mal trago.
   Pero Kincaid está dispuesto a cualquier precio con tal de meter el miedo en el cuerpo a su hija para que acepte tal servicio. Incluso contratar a Nolan Garrett y pedirle que la convenza, así tenga que provocarle un susto de muerte. Algo que el hombre hay a la perfección en el primer encuentro de la pareja.

   Nolan fue sargento de los Rangers de las Fuerzas Especiales. En su historial aparecen destinos y misiones en las zonas bélicas y conflictivas más peligrosas como Afganistán o Iracq. Pero tres meses atrás renunció a su cargo y abandonó el servicio de las Fuerzas Especiales y desde entonces, aguijoneado por la culpa y los remordimientos suscitados por las muertes de varios de los hombres a su cargo, ha buscado consuelo y compañía en el alcohol.
   Su familia, compuesta por antiguos soldados, ex-boinas verdes y miembros del Servicio secreto -incluso su hermana gemela Eve- dirige un negocio de seguridad, E.D.E.N. Inc, que fundó Wes Garrett, su padre, pero que tras su retiro lo dirige Ethan, el mayor de los hermanos.
   Cuando Kincaid contrata a esta firma, sus hermanos prácticamente arrastran y obligan a Nolan a aceptar el caso, en un intento desesperado por arrancarlo de la vida sórdida y autodestructiva en que va hundiéndose cada vez más. Pero aunque acepta a regañadientes, Nolan se toma muy en serio su misión y está decidido a mantener con vida a Jillian aun a riesgo de la propia.

   Pese a que desde el principio es palpable la animadversión del uno hacia el otro, las chispas no tardan en estallar entre ellos. Jillian no desea volver a pasar por el suplicio de ir a todas partes con un guardaespaldas que parezca casi su sombra, perder su intimidad y  sentirse desprotegida o asustada.
   Nolan quiere convencerse de que Jillian no es más que una niña rica y caprichosa, una mimada estrella de televisión con demasiadas ínfulas de grandeza para evitar sentirse tentado por su belleza y carácter, y ver en ella a la mujer y no sólo a su cliente. Pero la realidad es que tanto uno como otro no quieren reconocer que una atracción muy fuerte ha nacido entre ellos.
   
   Nolan no desea mezclar el trabajo con su vida personal ni desea entablar ninguna clase de relación íntima con Jillian, una joven rica que se sitáa muy lejos de su posición social, pero se promete proteger la vida de Jillian, mientras ésta se jura a sí misma que lo arrancará del pozo de depresión y autodestrucción en que se hunde, además de obligarle a enfrentar la intensidad de los sentimientos nacidos entre ambos.

   To the edge es el primer libro de la serie Bodyguards de Cindy Gerard. Uno de los rasgos que más destacan de la autora es la manera detallada y precisa con que logra describir y desarrollar la personalidad  de los diferentes personajes, tanto los protagonistas principales como los secundarios, incluso aquellos que tienen una aparición muy breve. Es una narradora excelente de la psicología de los personajes.
   La trama de suspense que crea en esta primera novela es trepidante y está muy bien engranada, sigue una secuencia lógica y clara. El desarrollo de los personajes, sus apariciones y características hace difícil que puedas llegar a sospechar quién es el que trata de asesinar a Jillian. De hecho la resolución de ese misterio está muy bien lograda y abordada de un modo que transmite emociones e intensidad a cada capítulo.
   
   El personaje de Nolan Garrett pese a que no nos ofrece un perfil nuevo dentro de la novela de SEALS y soldados, porque es un hombre de acción, rudo  y con un pasado tortuoso y atormentado, es muy interesante y atractivo porque logra atrapar con facilidad al lector. Por un lado, es gracias a su carisma, su fuerte personalidad y los diálogos agudos e insidiosos que protagoniza; por otro, porque nos encontramos con un hombre que se tambalea peligrosamente hacia el alcoholismo. Es un hombre con defectos, miedos y dudas, con fantasmas en su conciencia que le aguijoneaban e impiden vivir tranquilo. Lejos está de ser un super hombre, como se podría esperar de un protagonista así.
   Éste es un rasgo que parece predominar en todos los hermanos Garrett: su lado humano no se ve destruido por el hecho de ser soldados, al contrario, se ve potenciado. La miseria, destrucción y horror del que han sido testigos no deja a sus conciencias descansar.
   
   El personaje de Jillian sin ser tampoco un prototipo fuera de lo normal -es una presentadora de informativos de televisión de Florida- posee un carácter tenaz, decidido y muchas agallas. Algo que provoca interesantes confrontaciones y peleas con Nolan.
Además su mayor temor o fobia es tener un guardaespaldas, así que el que se enamore de éste no deja de ser divertido e irónico. La tensión sensual y sexual se palpa con facilidad en cada una de las escenas de la pareja, pese que las escenas de sexo no son numerosas, al contrario. Pero la autora logra transmitir esa seducción y enamoramiento de la pareja a través de gestos, palabras o miradas.
   
   La relación entre Jillian y Nolan es muy intensa. La escritora plasma muy bien las diferentes fases por las que van pasando los protagonistas: recelo, dudas, desconfianza, atracción, necesidad de la compañía del otro, deseo sexual, amor…
   
   Los personajes secundarios, tanto el resto de hermanos Garrett, como los sospechosos y culpables están perfilados de tal modo que es difícil sospechar quién es el verdadero culpable. Una habilidad muy buena por parte de Cindy Gerard, ya que de ser evidente habría deslucido mucho la novela y, por el contrario, aumenta su atractivo.
   La trama es intensa tanto en su contenido romántico y sensual, como por el suspense y misterio que rodean al acosador de Jillian, así cómo las causas del odio desmedido que siente hacia la protagonista.
 
   To the edge es una novela que presenta a unos personajes humanos, complejos y con defectos y virtudes que los hacen seres próximos y comprensibles. Sin dejar de lado ese rasgo romántico que a veces otras autoras eclipsan bajo una trama de suspense, pero sin perder ni un ápice de éste, Gerard presenta un libros con emociones intensas y excitantes.

Valoración: 4/5

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Crítica realizada por Isabel A.

Esta novela no sólo es la primera de una serie, Los Guardaespaldas, si no que representa el salto de Gerard de los harlequines (un campo en el que personalmente me gusta mucho, y que la ha hecho merecedora de varios premios) a las novelas grandes; en este caso, en el género del suspense romántico. Cuando leí los argumentos de los libros que componen esta serie, me llamaron mucho la atención; me encanta una buena novela romántica mezclada con suspense y sí encima tiene algo que ver con miembros de operaciones especiales, como es el caso, más todavía. Como además Gerard es una de mis favoritas de harlequin, pensé que su compra era un acierto seguro y efectivamente así fue.

Jillian Kincaid es la estrella de un noticiario de Florida. Pese a pertenecer a la elite de la zona, es un joven bastante sencilla que pone auténtica dedicación en su trabajo y se preocupa por la gente que le rodea; Aparentemente, cualquiera pensaría que una mujer así sería del agrado de todo el mundo. Sin embargo, hay alguien que la odia profundamente, alguien que la llama y le envía notas amenazadoras, y que parece dispuesto a no detenerse hasta verla muerta. Jillian intenta no tomarse demasiado enserio las amenazas, pero su padre no opina igual, y ya que ella se niega a volver al hogar familiar hasta que el asunto este solucionado, le impone un guardaespaldas.

Nolan Garrett es un antiguo Ranger. En su área de trabajo, uno ve toda la miseria, toda la maldad... y en el fondo, todo se reduce a asesinar antes que ser asesinado, en defender la libertad a cualquier precio... es un trabajo que quema y que puede llegar a comerle a uno por dentro, pero Nolan siempre ha seguido adelante con ello; hasta que uno de los hombres de su equipo pierde el rumbo e intenta asesinar a su esposa antes de suicidarse. Culpándose a sí mismo, abandonó el ejercito para refugiarse en el licor. Pero sus hermanos no van a permitirle regodearse en su miseria, y le ponen a cargo de uno de los trabajos de su firma de seguridad, E.D.E.N, Inc. (fundada por su padre tiempo atrás, y cuyo nombre se debe a Ethan, Dallas, Eve y Nolan), proteger a Jillian.

Jillian no quiere un guardaespaldas, ya tuvo que aguantar a bastantes durante su infancia y su adolescencia, y Nolan no desea tener que hacer de niñera de una niña rica. Pero tras los roces iniciales, y cuando se hace claro que las amenazas contra su vida van en serio, Jillian comienza a agradecer la presencia y el apoyo de Nolan. Ahora, no sólo tienen que preocuparse del acosador sino de la atracción que surge entre ellos, y que si se les va de las manos, distrayéndoles, puede tener fatales consecuencias...

Aunque los primeros capítulos son un poco lentos, pronto la acción comienza a tomar verdadera forma, convirtiéndose en una historia intensa y emocionante.

Ambos protagonistas están bien descritos y me han gustado pero, francamente, ninguno de ellos se ha sumado a mi lista de héroes favoritos.
De ellos dos, para mi destaca Nolan, un personaje con una gran profundidad; debido a sus años como Ranger tiene un bagaje personal muy pesado, pero es un hombre generoso, siempre dispuesto a ayudar a su familia y a sus antiguos compañeros, que son como otra familia para él. Aunque intenta comportarse con profesionalidad, manteniendo las distancias, etc. la verdad es que, sobre todo al principio, no hace muy bien su trabajo; la primera noche se lleva a Jillian a un antro de mala muerte cuando Plowboy, uno de sus compañeros de equipo, le llama para pedirle ayuda, ¿a quién se le ocurre?

El resto de los hermanos Garrett, llaman mucho la atención, así que no es de extrañar que vayan a ser los siguientes protagonistas de esta serie. ¡Y también Plowboy! Esta escritora desarrolla muy bien a todos sus personajes, principales y secundarios.

Para mi, lo mejor de esta novela es la forma en que Gerard ha sabido llevar toda la parte de suspense, donde lo que parece obvio no es lo tanto, consiguiendo darnos unas cuantas sorpresas.

Sin embargo, tengo que reprochar le que no se haya informado un poco mejor. Nolan tiene amigos latinos, y cuando lleva a Jillian a su bar, un lugar llamado La Casa de la Mamá (hay que joderse con el nombrecito), intercambian algunas frases en español, pero no hay ni una sola bien redactada. Para que os hagáis una idea: "Quizá usted tuve mejores cosas para hacer que vienen y nos ven". ¡Por favor! Me ha dado mucha rabia, la verdad.

Fuera de esto, me ha gustado mucho esta novela donde se combinan el romance, la sensualidad, los misterios y el peligro.