Cristina Prada - Todas las canciones de amor que suenan en la radio

Crítica realizada por Rocío DC

Leí esta serie por una recomendación que me hicieron en cuanto salió publicada. Sinceramente, no me llamaba mucho la atención porque con el boom de la romántica-erótica y de esa serie tan conocida todo me sabía igual y todo lo veía poco más que una "copia".

Esta novela, en realidad, se puede decir que también tiene ciertos parecidos por el género que es y por semejanzas en la historia, a mí al menos me la ha recordado en varios puntos, sin embargo la autora ha sabido darle su toque personal y diferente.

La historia comienza cuando Maddie, una joven que sueña con ser editora y acaba de terminar su carrera, llega tarde a una entrevista de trabajo en una importante empresa y sintiéndose frustrada porque todo le sale mal, conoce a alguien que le va a cambiar la vida totalmente...

Ryan Riler es un multimillonario empresario, frío, arrogante e implacable, que ve truncado sus sueños muy joven al tener que dirigir la empresa familiar. Esto le ha hecho ser así de inalcanzable. Pero cuando ve a Maddie por primera vez, algo se mueve en su ser... algo que la hace irresistible a sus ojos y a la vez intenta resistirse.

La sinopsis de la novela me llamó la atención, y aun así confieso que la empecé a leer con un poco de miedo.

Y aunque me gusto bastante, hay dos en esta novela (en la trilogía en sí) que me hacen tener sentimientos encontrados con ella.

Por una parte pienso que es una novela llena de esos clichés de los que tanto huyo. Chica joven, inocente y dulce conoce a chico súper atractivo millonario, trabaja para él, se entrega totalmente él, y él la maneja a su antojo (a partir de Grey esto no es muy original). También le sumo la cantidad de escenas eróticas que tiene, que entiendo que es una novela erótica, pero que para mi gusto en algunos momentos sobran o están injustificadas. Soy consciente de lo que leo, pero las escenas de sexo porque sí... no lo entiendo. En mi defensa agrego que mi subgénero favorito no es el erótico precisamente, lo leo en contadas ocasiones, como en esta.

Pero por otro lado me quedo con la parte positiva, que es bastante, y es que la autora me ganó con su forma de escribir llana, directa y sencilla. Demostrando que ha sabido llevarse a su terreno una trama ya bastante utilizada, y darle su toque original. Pero sobre todo me quedo con todo lo que me ha hecho sentir. Porque al fin y al cabo, es lo que busco cuando leo y con los que me quedo, con las sensaciones que me produce la historia en sí, que me entretenga y que lo que lea me remueva ese pellizco en el estómago, por las emociones y sentimientos que describen. Y sin duda la autora consigue que, a pesar de mi reticencia, me enganche y no pueda dejar de leer y quiera saber más de Ryan y Maddie.

Esta, sin duda, es una novela intensa y contada desde el alma por la autora. Aunque los personajes me hayan hecho odiarlos y amarlos; aunque me hayan enfadado y hecho reír, me hayan dado de dejar de leer y a la vez no poder soltarlo... es una novela que para bien o para mal, no se olvida y sobre todo, hace sentir.

La autora tiene un punto buenísimo y sabe cómo enganchar, y sin duda leeré más de ella.

Para finalizar es una novela que recomendaría a toda lectora de romántica-erótica que le guste dejarse llevar por las emociones intensas.