Crítica realizada por paciencia68
Gemma Dante ansiosa por conseguir el éxito en su vida amorosa, lanza un hechizo para encontrar al hombre perfecto. Pero las fuerzas cósmicas se rebelan y no aparece uno, sino dos. Uno es demasiado excéntrico, incluso para Gemma; el otro es un simple bombero que no es exactamente su tipo.Pero...
cuanto más conoce al bombero Sean Kennealy, más atraída se siente por él.
Tercera entrega de la serie de Deirdre Martin, donde Gemma Dante, la prima de Michael(Juego Limpio) es la protagonista .
A Gemma la conocimos en el libro anterior y ya sabíamos que era un "poco" excéntrica. Toda su extensa familia, incluida su madre, la tratan como a una apestada, ya que la actividad principal a la que se dedica no es muy popular entre sus parientes. Para todos es una "bruja", dedicada a sus conjuros y hechizos. Aunque no es totalmente así como Gemma vive su vida, es cierto que le atrae el esoterismo, la relajación con velas y el tarot. Todas estas cosas no tendrían nada de malo sino perteneciese a una católica familia italiana.
Desde hace algún tiempo se siente sola y ha comenzado a pensar en tener una relación estable, para ello se lanza a realizar un hechizo, más para complacer a su amiga que por necesidad; pero también es una forma de "matar el tiempo". Una vez que el conjuro está listo no puede evitar fijarse en cada hombre que pasa a su lado por si fuese el "elegido".
Sean acude como bombero a un edificio en el que existe una emergencia y es así como conoce a Gemma. El primer contacto entre ellos está cargado de tensión pero la atracción está acechando para hacerse oír.
La segunda vez que Sean y Gemma coinciden queda patente que la atracción que notaron en su primer encuentro está lista para actuar, y así comienza una relación entre ellos que oscilará como un péndulo entre momentos buenos y malos.
No entiendo por qué han traducido este libro como "Desenfreno", ¿será por el primer contacto entre ellos? Pues mal vamos, porque me ha dejado fría. ¿Será por el amor que les acecha y no les deja vivir? Ufff..., mejor no querer amores así. El libro tendría que titularse : "Desencuentro", "Distancia", "Decepción", cualquiera de estos calificativos le van mejor que desenfreno.
La relación de pareja no sólo está mal asentada, sino que durante todo el libro hace aguas por todas partes. No se entienden, no son capaces de conectar, no saben diferenciar lo que les gusta o les atrae del contrario, pero a la vez no pueden evitar querer estar juntos.
Después de los libros anteriores éste ha sido una decepción. La relación de Gemma-Sean es fría, y si alguien espera un bombero con lanzallamas, que se olvide y piense mejor en una manguera corta. Desconozco el sex-appeal que pueden tener los bomberos, pero si son como Sean, apañaditos están. Por otra parte no creo que les haga un retrato halagüeño, porque parece que nos habla de un clan cerrado donde nadie que no tenga sus aficiones y gustos puede encajar, francamente si los bomberos leyesen el libro dudo que se sintiesen identificados, parecen un conjunto de machistas con sólo aire entre las orejas.
Y si a todo lo anterior le añadimos el desencuentro entre ambos, la relación de Gemma con su familia, el grave problema que tiene la abuela de ella, y lo poco que están juntos estos protagonistas, el resultado es un tostón de cinco pares, una pérdida de dinero y tiempo y un cabreo monumental, puesto que ahora a cualquier cosa se le llama romance.
Ah, sí, tiene final feliz, ¡¡of course!!. La escritora no será maravillosa pero puede hacer libros mejores que éste, no serán inolvidables ni joyas de romance, pero al menos que nos libre de semejante bodrio. No sé si atreverme con los siguientes, porque éste ha tenido la capacidad de un somnífero. En resumen: Para lanzar a la hoguera de San Juan, si quiere que venga Sean a apagar las llamas.
Puntuación : 1. Malo tirando a pésimo, y eso porque estoy generosa y no quiero ponerle -1.
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