Denise Lynn - Mentiras del pasado

Crítica realizada por Wanda

PUEDE CONTENER SPOILERS

Libro 4 de la serie "Falcon"

El rey había encomendado una misión a Darius de Faucon: combatir a los contrabandistas de la zona y proteger a la viuda de Thornson Keep hasta que se le pudiera encontrar un esposo. Una tarea aparentemente sencilla para un caballero tan noble... hasta que se encontró con Marguerite, su amor de la infancia... y señora de Thornson.

Aunque Marguerite se vio forzada a casarse con otro, nunca superó la pasión que sintió un día por Darius... ni olvidó el regalo que le hizo él sin saberlo. Ahora tenía que conseguir alejar a Darius antes de que descubriera la verdad...

¿La verdad? Pues que la novela no me ha gustado demasiado.

La historia se ubica en Inglaterra, en el año 1142.

Darío es enviado por el rey Esteban para hacerse cargo de un castillo cuyo dueño ha muerto y acabar con una banda de contrabandistas. Allí se encuentra con que la viuda de ese hombre es la mujer de la que estuvo enamorado en la juventud, Marguerite. Ambos se habían casado, pero nunca se reconoció esa unión y ella fue obligada a casarse con otro hombre.

Existen secretos en el castillo, muchos parece ser, y la dama está decidida a mantenerlos ocultos a pesar de que Dario es el nuevo dueño y ella nunca le ha olvidado. O tal vez por eso mantiene una actitud distante hacia él.

Me ha gustado de la novela la época y el lugar porque he tenido la suerte de haber estado en Normandía y conocer la historia de la reina Matilda, pero ahí se acabó lo bueno, para mí, siempre para mí que quede claro, de este libro.

Lo que no me ha gustado y hasta ha conseguido aburrirme es la obsesión que parece tener la protagonista con su difunto marido, sacándolo a la palestra cada dos por tres. Vamos, que parece que estaba chiflada por el caballero no se le va de la cabeza. A ver,que nombrarlo alguna vez si de verdad se portó bien, es soportable, pero tanto aburre.

Hay contrabandistas, y eso activa un poco la narrativa pero no demasiado.

El secreto de Marguerite, pues que es una traidora, al parecer, y una contrabandista. Ahora bien, Darius recuerda con pasión su boda con ella, la luna de miel, el modo en que fue arrancado de su lado. Por eso, en lugar de hacer lo que es su deber, intenta ayudar a la dama. Un caballero de pies a cabeza.

El personaje de Darius está bien, pero el de Marguerite se hace pesado, pesado. Por otro lado, no quiere confesar al protagonista que el hijo que tiene es suyo y no de su esposo. ¿Por qué, si ha sido el amor de su vida? No lo entendí, de verdad.

Lo secundarios, ni mentarlos. William, un hombre poderoso, es lo más insulto que he encontrado.

No está mal escrita pero ni los personajes ni la historia han conseguido engancharme y la he leído sin pena ni gloria.