Diana Palmer - El ojo del tigre

Crítica realizada por Aysha

Eleanor había estado profundamente enamorada de Keegan Taber, un hombre que la había utilizado para vengarse de la mujer que realmente amaba. Cuatro años después, Keegan estaba dispuesto a hacer cualquier cosa para que Eleanor volviera a amarle. Pero ella parecía estar interesada en otro hombre. Aun así, Keegan decidió que iba a hacer todo lo posible por recuperarla antes de que fuera demasiado tarde.

Eleanor es una chica de familia humilde. Trabaja en el hospital de su pueblo y cuidar de su padre. Su padre es carpintero, es huérfana de madre y viven juntos en una casa alquilada por los jefes de éste. Cuatro años atrás se enamoró perdidamente de Keegan Taber. Éste estaba prometido a una bella mujer, pero una noche discutieron e invitó a Eleanor a salir. Ella, ilusionada aceptó sin saber que el lo hacía para darle celos a su prometida. Esa misma noche envueltos por la pasión, hicieron el amor deseperadamente. Ellie se entera de lo sucedido y decide irse lejos a estudiar para olvidarlo.

Termina de estudiar y le ofrecen el puesto de enfermera en su pueblo. Aún no puede olvidar el terrible dolor de la traición de Keegan y su fatídica noche juntos. Sus recuerdos son dolorosos y quiere pasar página. En el hospital conoce a un hombre, llamado Wade y que es el terror de las muchachas, todo un Don Juan. Iniciarán una bonita amistad, pero n ole agradará mucho a Keegan...

Ellie, es sencilla, divertida y con una lengua afilada. Me hace muchísima gracia las contestaciones que le hace tanto a Keegan como a su padre. Me gusta, al principio me parecía un poco llorona, pero me encanta su personalidad. También me resultó algo cansino que estuviese recordando en todo momento la "maldita noche" . Sufrió en su primera vez, y aunque es importante, ella se lo toma demasiado a pecho.

Keegan es de clase social más alta que Eleanor. Es inmensamente rico, pero le importa poco tanto a él como a su familia. Me gusta ver la relación que tiene con sus inquilinos, pues él es jefe del padre de Ellie y también propietario de la casa en la que viven ellos.

Es un hombre divertido, gruñón, algo bruto, muy mandón pero muy cariñoso, aunque no se lo pueda demostrar a Ellie. Siempre están discutiendo.

Me encantan los diálogos entre los protagonistas y los secundarios. De hecho destacaría la relación que tiene Ellie y Wade es divertidísima. Wade un personaje secundario, muy importante para mí, es la alegría y despreocupación en persona. Ellie y él hacen una pareja de amigos preciosa. Él sabe escuchar, la ayuda y la incita. Lo adoro. Es de la misma clase social que Keegan y se conocen, aunque no a fondo.

Las discusiones constantes entre los protagonistas son divertidas, pero llega a cierto punto que me resulta algo pesado. Los dos son muy cabezotas y Ellie se hace de rogar. Está bien que el la persiga, que quiera su perdón, pero no estar todo el libro en constantes discusiones, pues se recriminan todo el tiempo las mismas cosas y nunca terminan de explicar ni zanjar nada.

Lo que menos me ha gustado del libro, es que están recalcando en todo momento las distintas clases sociales. A veces Ellie, no se aprecia demasiado, pues piensa que no podría encajar. Evidentemente, viven en mundos distintos, pero no es un impedimento para estar con alguien.

Que decir...pues es un libro divertido, con sus líos, mentiras, y te hace pasar un buen rato.

No hay más que decir. Los tiene mejores y éste no entra en esa categoría. Pasas una buena tarde, unos ratos divertidos pero no esperéis un novelón. Si os gustan las novelas sencillas y rápidas de leer ésta es la vuestra.

Mi valoración del 0 al 5 es de un 2´5.