Diana Palmer - Un negocio arriesgado

Crítica realizada por Aysha

Amelia Glenn se presentó en la sala de reuniones de Worth Carson ataviada tan sólo con un impermeable y un traje de bailarina. Como consecuencia. Worth  hizo que la despidieran de su trabajo. ¡Lo último que ella esperaba era que él le ofreciera un empleo como acompañante de su abuela, con él único propósito de conquistarla!

Cuando Amelia Glenn se presentó en la sala de reuniones de Worth Carson, no supo lo que ello le iba a perjudicar. Ella, por petición de un amigo suyo, se presentó semidesnuda bajo un impremeable para hacerle una broma al ex jefe de su amigo. Worth decidido a vengarse, la obligó a ir a un restaurante con esa misma vestimenta. Amy, se equivocó de lugar, arrestándola la policía por escándalo público y siendo despedida de su trabajo. Entonces ella decide ir a ver a Worth a reprocharle por ello. Él la obligará a que sea acompañante de su abuela si no quiere que esas fotos salgan a la luz.

Ya de por sí el argumento da ganas de llorar. ¿Que persona le obliga a otra a trabajar para él si no verá las consecuencias? Increíble ¿no?

Amy, nuestra protagonista, una mujer de veintiocho años, virgen, con vitalidad y mucho amor. Se ve “obligada” a trabajar para Worth, por su culpa se ha quedado sin su antiguo trabajo y ahora ella le pertenece.
Amy, para la edad que  tiene y el tiempo en el que están (y por muy de pueblo que sea) me parece más ignorante que inocente. No puedo con estas protagonistas. Un día son la Virgen María y al rato siguiente diosas del sexo....

Worth, un hombre atractivo, que lo ha pasado mal con “una” mujer. Por ella no confía más en ellas y no quiere dejar a su abuela sola. Decide vivir como un monje, a no ser para satisfacerse.
Este hombre es rarito. No tengo manera de describirlo mejor. Sus cambios de humor y pensamiento muy normales no son.

Jeannette, la abuela de nuestro protagonistas, es una anciana con mucha vitalidad. Ha tenido algún ataque al corazón y vive como le gusta. Quiere que su nieto se case, pero no tiene manera de que lo haga. ¿será la casamentera?
La que más me gusta del libro. Es graciosa y aprecia a Amy. Aunque para ser tan inteligente, es un poco lerda.

De nuevo, Diana Palmer....¡no, no y no! Otra vez un libro de los malos. Es un libro cortito pero deja muchísimas cosas atrás. Va todo muy rápido y me parece absurda esta historia. Tanto Amy como Worth se aman de un día para otro y todos son felices para siempre. Es que ya no hay mucho más que comentar... Porque si digo más es la historia al completo. Desde luego no se ha esforzado mucho en hacer un buen libro.

Mi valoración.... Malo. No te pierdes nada, desde luego.