Elizabeth Gilbert - Comprometida

Crítica realizada por Malory

Al final de su aclamado best seller "Come, reza, ama", Elizabeth cuenta cómo se enamora de Felipe, un hombre brasileño pero de nacionalidad australiana que vivía en Indonesia cuando se conocieron. Al regresar a Estados Unidos, se prometen fidelidad eterna, aunque también juran que nunca, jamás, bajo ninguna circunstancia, se casarán. Sin embargo, la providencia en forma de Gobierno americano, el cual -tras detener a Felipe en el aeropuerto- le da a la pareja una única opción: o se casan o Felipe no podrá volver a Estados Unidos.

Con este sentencia, Liz decide acabar con sus miedos al matrimonio e involucrarse en este tema estudiando sus pormenores. En los diez meses que siguieron, mientras ella y Felipe recorrían el sudeste asiático en espera de que el Gobierno norteamericano les permitiera regresar para casarse, Elizabeth sólo hablaba, leía y pensaba acerca del complejo tema del matrimonio.

Después de leer "Comprometida", se me plantea una regunta ¿De verdad alguien puede llegar a sentir tanto "pánico" o "rechazo" ante el matrimonio?

Parece ser que Elizabeth sí.

Se pasará los meses vagando por el mundo, a al espera de una decisión gubernamental. Tratando de desvelar los secretos que encierra el matrimonio, en todo tipo de culturas y diferentes estratos sociales. Intentando averiguar el secreto del exito de esta institución "sagrada", pasando por el tema de los hijos y como no del divorcio (tema que les preocupa enormemente a ella y a Felipa).

Termina haciendo un libro, en el que, supuestamente, nos narra la continuación de su historia con el hombre que ha conseguido hacerla feliz. Con el que ha conseguido encontrar el equilibrio y con el que se ve obligada a casarse, si quiere continuar junto a él.

Pero para mí, lo que ha hecho es un ensayo sobre el matrimonio.

Donde además de exponer sus miedos y dudas, nos narra cantidad de historias, anecdotas y vivencias de la gente que se ha ido encontrando a lo largo de su viaje y de las personas más cercanas a ella.

Tiene una forma de escribir estupenda, ingeniosa, con toques de humor e ironía que me encantan, pero he de reconocer que en este caso no me ha gustado el resultado.

Es evidente que ha pensado y hablado largo y tendido sobre el tema, pero considero que le ha quedado un poco "espeso", o eso me ha parecido a mí.

Hay historias bonitas, entretenidas y conmovedoras, pero en general se pierde en las reflexiones que cada historia le sugiere, que creo es lo que consigue que el libro resulte un tanto aburrido.