Erika Fiorucci - Un libro para Cash

Crítica realizada por Arianne

Georgia es estudiante de medicina. Es una mujer responsable, inteligente y ordenada. Sufre la presión de sus propias expectativas y la de su familia. Una dura experiencia familiar le obligó a ser precavida, no deja nada a la improvisación. Pero cuando Cash se cruza en su camino, sus convicciones pasan a segundo plano. Cash es músico de rock duro, y posee tanto talento como atractivo. Es sexy, provocativo, caliente como el infierno…

Un libro para Cash es la última novela de Erika Fiorucci. Tengo que empezar reconociendo que me encanta el estilo de Erika y que es una de mis autoras favoritas de romántica actual. Su forma de escribir tiene algo burbujeante, una chispa, un color que da personalidad y brillo y cada línea. Sus personajes hacen a veces cosas locas o equivocadas, porque así somos los humanos, pero se ganan siempre mi cariño y mi respeto. Siento que se comportan como podría hacerlo yo, o alguien cercano a mí, en las mismas circunstancias. Me rio mucho con ella y siempre llega un punto en el que consigue conmoverme. En Un libro para Cash lo ha vuelto a conseguir.

Es esta nueva historia (dedicada a uno de los personajes secundarios de Una sonata para ti, pero que se puede leer de forma independiente) me ha hecho envidiar a Georgia y querer estar en su lugar, y no precisamente por sus notas brillantes. Cash es el chico que sabes que no te conviene, pero al que de ninguna manera puedes resistir. Recita a Neruda, tiene una larga fila de admiradoras después de cada actuación, bebe Jack Daniels de la botella y tiene una escalera de Jacob en… En dónde y lo que es una escalera de Jacob es otra de las cosas que he aprendido (siempre aprendo algo nuevo con Erika). El problema es que cuando Cash conoce a Georgia es prácticamente un angelito comparado con los años salvajes que vivió en el pasado. Y el pasado tiene la mala costumbre de regresar cuando menos lo esperas.

Es una novela que he devorado, por la frescura y la agilidad de la forma de contar, porque las ocurrencias de Cash y Georgia son muy divertidas, por la temperatura que subía y mucho cada vez que estaban cerca el uno del otro, porque se respiraba la química, porque a todas nos gustan los chicos salvajes, pero todavía me gustan más los hombres que saben lo que quieren y hacen lo que sea preciso para conseguirlo. Cash es de esos y su reflexión final sobre lo que significa amar es de las que vale la pena recordar.

Está contada en primera persona de forma alternativa, a veces habla Cash, a veces habla Georgia. Me quedo con los dos, pero sobre todo con la pareja que forman. Es una historia adictiva, potente y apasionada para dos personas, que aunque no lo tendrán fácil, encuentran su camino. Yo he disfrutado muchísimo recorriéndolo junto a ellos.