Crítica realizada por Kmyla92
Nike, diosa griega de la victoria ahora se encuentra presa en el Tártaro. Su carcelero no es más que Atlas, al que retuvo e hizo que tatuaran su nombre en su estómago. Ahora que no era más que la prisionera, estaba siendo sometida a lo mismo que ella había hecho.
Entre ambos crecía un odio visceral, pero además del odio, también crecía algo más fuerte: Amor. Ambos tendrán que superar sus diferencias y personarse muchas cosas para poder salir adelante, y poder construir una vida sobre las bases del amor. Es asombroso ver cómo ambos trabajar para darle una oportunidad al amor, cómo desafían todas las ataduras que amenazan con destruir el fuerte vínculo que existe entre ellos. Son personajes un poco complejo, pero no menos fascinantes por eso.
Crítica realizada por Kkekka
Atlas y Niké son dos personajes completamente iguales. Dioses de dos pueblos distintos que representan la misma fuerza y que se desean y detestan de igual manera. Ambos son capaces de demostrar que el otro le es indiferente de cualquier modo posible.
Durante muchos años Niké había tenido preso a Atlas. Este había sido su juguete, incluso había llegado a tatuarle su nombre en el pecho para que no se olvidara de a quien pertenecía. Pero él también la había utilizado y traicionado. Había usado su enorme poder de seducción, su belleza y atractivo para hacerla creer que la amaba. Niké jamás se perdonaría el haber caído como una tonta en semejante trampa.
Ahora era ella la presa. Era ella la que estaba a la merced de un hombre vengativo al que secretamente seguía deseando y del que no sabía que podía esperar. Atlas quería jugar con ella del mismo modo. Lo primero que hizo fue tatuarle su nombre. Ahora ella era la que tenía un dueño.
Pero Atlas sentía más por ella de lo que estaba dispuesto a admitir, hasta tal punto que si era necesario se enfrentaría a sus propios jefes para protegerla. Y quizá de ese modo Niké se daría cuenta de que la amaba.
Esta historia corta está contenida dentro del volumen "En la oscuridad" y es, de los tres, el mas parecido a las otras historias de la autora. Los personajes son fuertes, decididos, peleones, luchan contra sus sentimientos, sensuales...
Es una historia llena de pasión, con un poco de acción, y cierta ternura. Niké y Atlas son personajes llamativos en si mismos. No tienen puntos negativos, no chirrían en sus reacciones. Son dos luchadores acostumbrados a ganar que no quieren dejarse atrapar por el amor, pero que lo sienten con una gran intensidad.
Sin embargo, pese a gustarme la historia, no me ha llegado tanto como han podido hacerlo las otras dos, donde he encontrado un poco más de corazón y sentimiento.
Una historia más de Gena Showalter, que como todas las suyas merece la pena leer.
Mi valoración es Buena