Janet Chapman - La boda del guerrero

Crítica realizada por Mailo

Libro 3 de la Serie Highlanders in Maine

Libby Hart es una cirujana de éxito, pero las circunstancias la obligan a escapar para salvar su vida. Durante la huida pierde el control de su coche y cae en un estanque. Michael MacBain es un guerrero medieval atrapado en la época actual por un hechizo.
Michael fue rechazado por una mujer moderna y juró no volver a relacionarse con ninguna, pero la pasión que Libby despierta en él es demasiado fuerte. El orgulloso guerrero deberá hacer frente no sólo a sus instintos, sino al secreto que guarda Libby, un secreto que amenaza con cambiar sus vidas para siempre.

Desde que leí El beso del Highlander y El highlander oscuro, este tipo de novelas me atraparon. Leo otras cosas, Regencia, actual, de aventuras, pero por alguna causa los guerreros escoceses me fascinan. Supongo que no tengo que explicar por qué leí La boda del guerrero. 

Libby tiene un don muy especial aunque es reacia a creer en temas fantásticos. Reacia hasta que sufre en primera persona un hecho sorprendente: se encuentra con un guerrero medieval atrapado en el tiempo por un hechizo. 

Nada más saber de qué iba a novela empecé a devorarla. Me recordaba esa otra, El beso del highlander, aunque en ese caso él no está atrapado en el tiempo actual, pero despierta en él.

El caso es que la protagonista empieza a replantearse todo lo que a temas mágicos se refiere, y no es para menos cuando te das de narices con alguien como el protagonista masculino de la novela. ¡Guau! ¡Qué hombre! 

Michael MacBain es un guerrero de la época medieval. Por las malas artes de un brujo está atrapado en el mismo siglo que nuestra protagonista junto a otros cuantos guerreros como él. El héroe se ha aclimatado ya a nuestros tiempos, ha tenido una experiencia nefasta con una mujer de esta época, no quiere volver a saber nada de las mujeres actuales y tiene un hijo pequeño, con el que vive. Poco a poco se ha ido aclimatando a los tiempos moderos y organizado su vida. 

Para Libby sólo pensar que Michael puede ser realmente un ser de otro tiempo la levanta dolor de cabeza, pero no puede hacer otra cosa que asimilarlo al comprobar que es totalmente cierto. 

Hay recelos, dudas, algo de intriga, secretos de ambos que ninguno quiere desvelar. Claro que vence el amor, de otro modo no sería una novela romántica de esas que te hacen soñar y te mantienen despiertas, preguntándose dónde diablos puede haber un héroe así y deseando encontrarlo alguna vez. 

Me ha gustado el libro, lo he leído en un pis-pas, sin enterarme. No voy a decir que me encandiló tanto como El beso del highlander, pero sí que lo he pasado muy bien entre sus páginas. Me ha mantenido en ascuas, me ha hecho sonreír y preocuparme, desear que avanzase la historia y al mismo tiempo que se alargara un poquito más. Eso es lo que me vuelve loca de este tipo de novelas, que no puedo dejarlas hasta acabarlas. 

Todos los personajes son estupendos, están bien desarrollados y se hacen importantes, cada uno en su medida.

Una historia de amor preciosa, tierna, que ya sabes como va a terminar desde que empiezas a leerla, pero que te gusta ir conociendo. Con una protagonista honesta, valiente, decidida y orgullosa de su trabajo que es salvar vidas. Con un héroe de los que hacen que se te caiga la baba al conocerlo.

Recomiendo su lectura, ya que yo, al menos, lo he pasado de película con esta novela.