Jayne Ann Krentz - Un amor distinto

Crítica realizada por Katon

La vida le había enseñado a Abby Lyndon el valor de la independencia, y el precio que había tenido que pagar por aprender aquello había sido alto. El repentino y terrible fracaso de su última relación la había vuelto más precavida: estaba decidida a mantener su vida bajo control.

Pero Torr Latimer estaba igualmente decidido a conquistarla, a toda costa...

La insistencia de Torr tenía a Abby muy confundida, porque ella también notaba la increíble atracción que existía entre los dos. Justo entonces resurgió una pesadilla del pasado y se vio obligada a aceptar la ayuda de Torr. Escondida en la cabaña que éste poseía en un remoto bosque, tenía que decidir si lo que él se proponía era protegerla o, simplemente, conquistarla. O quizá tuviera en mente algo muy distinto... ¿Amor?

Abby es una mujer impulsiva, vivaz, un poco alocada, sincera pero también recelosa con los hombres, una mala experiencia dos años atrás la han retraído bastante, aunque ahora vive de lleno para su empresa de venta de complejos vitamínicos a domicilio, vitaminas que ella toma constantemente. Pero consciente de que su vida no tiene mucho orden ni control decide matricularse en un curso de arte floral japonés.

Allí observa como los centros florales de su compañero de mesa son siempre perfectos, mientras que los suyos son caóticos, así es como conoce a Torr Latimer, un hombre serio, observador y que se queda con todos los elogios de la profesora Yamamoto. Es así como, intercambiando una flor, Torr la convence para llevarla a casa. La atracción entre ellos es casi palpable, después de un beso casi mágico para Abby accede a cenar con él al día siguiente.

Torr es un hombre dominante, acostumbrado a que la gente haga lo que él quiere, pero Abby le desconcierta, es impulsiva, fresca, pasional, tierna, algo que le atrae desde el primer día que la vio en clase. Torr siempre consigue lo que se propone, y él quiere a Abby. Después de la cena ella sin pensar le invita a una copa, pero al llegar a su piso hay un sobre debajo de la puerta. Una foto, una simple foto, algo inocente que a ella la arrastra dos meses atrás. La velada ha terminado bien, y el beso de despedida aún mejor y qué mejor manera que pasear un domingo por la arboleda.

Pero el día siguiente cambiará cuando reciba otra carta, otra foto. Huir, es lo único que puede hacer, desaparecer unos días hasta que pueda pensar. Torr llega unos minutos antes que Abby se marcha, le sonsaca casi todo, las cartas, las fotos, el chantaje que aún no ha llegado pero que sabe llegará, su plan de desaparecer unos días. Torr decide ayudarla y juntos se marchan a una cabaña que tiene él en la montaña. La atracción entre ellos cada vez es mayor, pero Torr sabe que Abby necesita tiempo, le deja cierto espacio y durante la semana que pasan en la cabaña llegan a convivir como una pareja más, conociéndose, sabiendo lo que le gusta al otro, al final Abby le confiesa quién fue el responsable que sea tan recelosa con los hombres, quién fue el hombre que le hizo daño y la hizo ser tan retraída e indecisa, algo que es totalmente ajeno a su personalidad, pero además el personaje misterioso no permitirá que se olviden de él.

Pero este hombre es más listo de lo que creen, no solo sabe el secreto de Abby que intenta ocultar por todos los medios sino que también conoce el punto débil y el secreto del pasado de Torr. ¿podrán los dos juntos adelantarse a este personaje y salir victoriosos de esta lucha?

El personaje de Abby me ha gustado en gran parte, es un poco loca, te descoloca, con sus eternas vitaminas pero hay algo que no me ha terminado de llegar y es su actitud frente a Torr, siempre es ella la que cede, la que se doblega a su voluntad y eso no me gusta. El personaje de Torr, debo reconocer que no me gusta. No me van los personajes posesivos, los que saben que siempre tienen razón, que se creen magnánimos porque te dejan de vez en cuando creer que llevas las riendas de la relación. Hay momentos en los que los sentimientos y pensamientos de él son opacos, no sabemos con seguridad qué es lo que piensa. A favor está que todo lo hace para protegerla a ella, que será paciente hasta que ella esté preparada, o  a lo mejor necesita un empujoncito. Para mí la actitud de Torr ha sido la pega a este libro, si no hubiera sido por él le habría dado un bueno, así solo puedo dejarlo en un regular.