Jina Bacarr - Placer oriental

Crítica realizada por Sara

Primavera de 1873

Yo, Katie O´Roarke, llegue a Japón en la primavera de 1873 , con mi virginidad intacta, mi corazón cargado de nostalgia y mi alma ansiosa por encontrar los placeres que me negaba mi marido, lord Carlton, un hombre frio y egoista, poseído por una crueldad sin limites.

El país oriental contrastaba en todos los aspectos con la tediosa vida que llevaba en Londres y me permitía olvidar mi horrible matrimonio. Pero cuando mi marido me atacó en un estado de embriaguez y locura no pude seguir soportándolo y hui a las montañas. Allí encontré a Akira, un joven samurái que me llevó hasta Shintaro, el jefe del poderoso clan guerrero.

Al principio recelaba de mi presencia, pero Shintaro empezó a visitarme a diario hasta que el sonido de sus pisadas bastaba para que se me desbocase el corazón. Me enseñó el camino del guerrero, el valor del honor, la lealtad y la dignidad, y también un mundo de infinitas posibilidades eróticas en el que yo iba a descubrir una fuerza insospechada. Juntos prenderíamos la pasión prohibida, traspasaríamos las barreras del placer y evocaríamos el peligro en su forma más sensual.

Pero mi marido estaba empeñado en encontrarme y hacerme pagar por la humillación sufrida. Y yo no podía seguir ocultándome entre los naranjos del valle cuando una oscura amenaza se cernía sobre mi destino…

Katie O´Roarke pertenece a una familia de irlandeses pobres, emigrados a EEUU, y que con esfuerzo y mucho trabajo en los ferrocarriles su padre logra hacerse millonario, aunque por ser nouveau-riche, no son acogidos en la alta sociedad de Nueva York. Por lo que tienen que buscar en Inglaterra un marido aristocrata para su hija Katie y así acceder a los titulos nobiliarios que les abriran las puertas de la sociedad.

Es la unica oportunidad que tienen, puesto que su otra hija , se quedó embarazada a los 17 años y tuvo que casarse con un simple empleado.
En Inglaterra Katie, con la pasión de los irlandeses que corre por su sangre y una lengua mordaz, despues de varios pretendientes logra atraer a Lord Carlton, conde y atractivo y gracias al dinero de su padre pactan la boda.
La primera noche, ansiosa por  recibir a su marido y al ver que no iba a su alcoba decide buscarlo por la mansión y cual no sería su sorpresa cuando lo descubre en una habitación con dos prostituas y en practicas sado-masoquistas. Es tal su impresión que en vez de asustarse decide esconderse en un armario y presenciar hasta donde llegan los vicios de su marido. Ante tanta vejación decide que su marido no la tocará nunca y para ello lo amenaza con decirselo a su padre y que deje de darle dinero.
Por indicación de su padre acompaña a su marido en el viaje a Japón, con el fin de vigilar los fondos que este trasfiere a lord Carlton para la empresa de ferrocarriles. Durante la travesia y las escalas, empieza a ver el verdadero caracter de su esposo, mujeriego, vicioso, jugador, estafador, y que podría llegar a asesino, cuando se da cuenta una noche que podría llegar a matarla con su maltrato
Una vez en Japón y a las puertas del palacio de la emperatriz, cae de bruces cuando tropieza con Shintaro, un samurai, cuya sola presencia cambia el curso de su vida.
Se hace amiga de la emperatriz, y la ayuda en todo lo que le pide, aunque no logra olvidarse de Shintaro, y el deseo sexual que ha despertado en ella. Una noche vestida de chico logra entrar en un burdel donde lo encuentra a punto de estar con una prostituta, pero al verla la deja y se dedica a desnudarla y entonces se da cuenta quien es.
Despues de varios dias Shintaro no vuelve a buscarla, por lo que decide investigar donde podria encontarlo y va a las montañas en su busca. Herida y medio inconsciente por una tormenta , la encuentra Akira, un bello samurai a las ordenes de Shintaro, al verlo, piensa que bien podría enamorarse de él si su corazón no estuviera ocupado por Shintaro.
Al llegar al poblado con Akira, Shintaro no la recibe de muy buen agrado, pero la deja al cuidado de Nami, una bella japonesa, que la cuida y la mima, hasta que se repone, y entonces la anima a que seduzca a Shintaro, cuando ve cuales son sus sentimientos hacia el samurari.
Shintaro siente lo mismo por ella, y la introduce en los placeres sexuales, cuya existencia no podia ni imaginar. Akira enamorado de Shintaro y tambien de ella, acompaña muchas veces a la pareja en los momentos de amor que pasan juntos.
Despues de los muchos problemas que le provoca su marido y quedar embarazada de Shintaro, decide dejar a su hija con Nami y Shintaro para que viva la niña con su padre, y  regresar a Inglaterra con Lord Carlton, para que este no difunda calumnias y acabe con la reputación de su familia.
               

Por supuesto la historia no termina aquí , pero es mejor que la leáis, si quereis conocer una bella historia oriental.
 
Siendo un harlequin, no se podía desarrollar mucho mas esta historia, pero pienso que podría haber dado mas de sí . El inconveniente de este libro para mí ha sido la manera de escribirlo -en forma de diario, narrado por la protagonista Katie - . Al principio me lié , pues narra de manera que pasa de una escena a otra de atrás a delante y viceversa.
Riñe y desafia a la lectora casi en cada pagina, con la idea de despertar el deseo y apartar las mogigaterias que en aquella época reinaban en las altas esferas.
Como soy una apasionada de los samurais, de las artes marciales, de todo lo oriental no puedo ser muy imparcial, pero me ha cautivado el libro. Mucho más cuando de una persona no muy agraciada y educada para ser esposa de un lord, por las lecciones de Akira y de Shintaro llega a ser toda una samurai en el manejo de la espada.

Hay muchos más personajes secundarios que también son importantes, y otras sorpresas en el libro que no puedo desvelar, pero espero que no os quedéis con las ganas, y podáis conocerlas.