JoAnn Ross - Vidas quebradas

Crítica realizada por Bona Caballero

"No regrets", traducida al español como "Vidas quebradas" es una novela que JoAnn Ross publicó en 1997. Se ambienta en la época contemporánea. Yo la incluiría en el subgénero de la Women's Fiction, porque se centra más en la evolución personal de la heroína que en su relación amorosa.

¿Por qué he leído esta novela? La apunté en mi lista hace años, después de ver que le daban la máxima puntuación en una página web. Así que, cuando la encontré publicada en digital a un precio baratísimo, no me lo pensé. Además, nunca había leído nada de JoAnn Ross. Una oportunidad de descubrir una autora nueva para mí.

Me cogió en un momento en que estaba leyendo literatura seria y bastante deprimente. Y creí que cogiendo un harlequin me distraería un poco. Suelen ser novelas breves, sencillitas, con aire positivo. ¡Vaya error el mío! Me hundió aún más en la miseria. No es una novela "genérica" y breve de las que se salen cada quince días. No, esta novela procede de su sello "Mira", que publica novelas largas independientes. Así que me encontré con un novelón de más de trescientas páginas sobre las múltiples desgracias que padecen las tres hermanas.

Para que os hagáis una idea, sólo para empezar.

Prólogo: toma de rehenes y un homicidio-suicidio.

Capítulo 1: bebé prematuro. Si pesa menos de 500 gramos, no es viable. Pesa 4,200 gramos.

Capítulo 2: una violación.

Antes de que acabe el libro veremos, entre otras cosas, un personaje que pierde sus piernas, otro que muere, otro que cae en el infierno de las drogas y la prostitución,...

Tardas un poco en saber quién es la heroína y el héroe, pues es una historia bastante coral. El personaje central es Molly McBride, una monja que trabaja en un hospital con el marido de su hermana Lena. La historia de la tercera hermana, Tessa, se va narrando en paralelo porque no se conocen.

El tono general es bastante tristón. En esta familia y su entorno no dejan de acumularse desgracias. Y algunos aguantan y otros se hunden. En cuanto al sexo, no es una novela blanca. Pero las escenas más explícitas son de tono rarito o francamente desagradable.

Después de leerla, me quedo con la duda de por qué la calificaron tan bien en aquella página web. Esta novela debe tener algo que yo no he captado. ¿Espiritualidad, amor familiar? ¿Una historia de superación personal, de entereza ante la adversidad? Si el lector es capaz de conectar con tanta angustia y tanto "dramón" puede, me imagino, conmoverse hasta las lágrimas. Y quizá sienta una gran liberación y paz interior al llegar a la última página.

Sin embargo, no fue este mi caso. La propia acumulación de desgracias, página tras página, acaba quitándole credibilidad a la historia. Y al terminar el libro dije, ¡por fin! Ahora me voy corriendo a buscar una novela romántica ligerita y divertida que me quite el resacón de tanto dolor y angustia.

Me costó llegar al final. No me interesó gran cosa, salvo para saber si al final Molly lograba algo que fuera más o menos un final feliz.

Valoración personal: 3/10.