Josie Litton - La isla de los sueños

Crítica realizada por Carmela

Lady Joanna Hawkforte pasó su infancia leyendo acerca de las maravillas del reino de Akora. Pero hace ya nueve meses que su hermano partió en busca del mítico reino, y no ha regresado. Desesperada, pide ayuda a lord Alex Darcourt, hijo de un lord inglés y una princesa de Akora. Cuando éste rechaza la petición de Joanna, la joven no ve otra salida que embarcarse en su nave como polizón.

Es otra de las novelas de la trilogía de Ákora, un país imaginario basado en la Atlántida, donde la autora nos traslada a un mundo distinto.

Joanna sueña con Ákora, su mayor ilusión es visitar ese país que ella ve como maravilloso. Envidia a su hermano por haber ido a él, porfiando los peligros con el fin de conseguir su aventura mientras ella se queda a la espera de su regreso. Sin embargo, pasan los meses y no tienen noticias de él. Por eso busca la ayuda del héroe de la historia, Alex, medio inglés y medio akorano.

Alex ha terminado su estadía en Inglaterra donde le ha llevado una misión, y está dispuesto a emprender viaje a Ákora. Todo en Europa está patas arribas, hay demasiados problemas que pueden afectar al país de su madre y él debe ponerles sobre aviso. Embarca y pone rumbo a su destino. Lo que no imagina es que lleva un polizón a bordo y ese polisón es Joanna.

El personaje de la protagonista gusta. Ella es bonita, pelirroja, cabezota como pocas, leal y arriesgada. No le importa meterse en el barco de Alex con tal de ir en busca de su hermano. Me ha gustado el modo en que se enfrenta a las dificultades.

Alex me ha gustado también bastante porque, a pesar de parecer frío, como debe ser un hombre acostumbrado a misiones secretas, tiene un punto tierno que lo hace encantador. Te divierte ver el modo en que la muchacha le persigue para que la lleve a Ákora, y la manera en que cae a una atracción sin igual cuando la descubre en el barco.

El interés en la historia no decae, muy contrariamente va en aumento, se hace interesante a cada paso que se da.

Cierto que al principio la autora lo que intenta es ponernos en marcha, situarnos en el entorno, y lo hace concienzudamente. Puede que a alguna lectora no le guste demasiado el inicio porque se le haga muy lento y por tener datos que pueden resultar innecesarios, pero a mí no me lo ha parecido. Yo prefiero entrar lentamente en la historia en lugar de tirarme de cabeza a la aventura porque después, es complicado seguir al mismo ritmo la narración. Las descripciones son bastante exactas, siempre sabiendo que es un país imaginario por supuesto, y ayudan a conocer muy bien ese mundo novelesco.

Los diálogos son entretenidos y se aprende con las conversaciones que mantienen los protagonistas. Nada que objetar a este punto.

En relación a éstos hay que señalar que no hay demasiada originalidad. El protagonista masculino sigue básicamente los patrones habituales del género: hombre fuerte, valeroso y justo que se cree en la obligación de sacarle las castañas del fuego a lady Joanna a pesar de saber que es una mujer valiente. No hay nada que le haga destacar de otros héroes de novela romántica y por tanto engrosa la larga lista de personajes a olvidar.

Lo que menos me ha gustado de todo es que Joanna tiene poderes para localizar las cosas y eso ya se me sale un poco de los cánones normales. Pero su forma de atajar los problemas se te hace olvidar ese detalle.

En la novela, aparte del romance que es el centro de todo, tenemos la dosis suficiente de intriga y misterio como para hacerle entretenida.

A pesar de no poder catalogarla como una novela de esas que dejan huella, creo que se le debe dar una oportunidad, aunque solamente sea por viajar a un mundo de fantasía muy bien descrito.