Josie Lloyd y Emlyn Rees - El chico de al lado

Crítica realizada por Sandrayruth

Han pasado quince años y el encuentro casual, nada menos que en una juguetería, los deja un tanto descolocados. Fred es ahora ejecutivo de marketing en una moderna empresa de Internet y está a punto de casarse. Por su parte, Mickey ha abierto una floristería, empeñada en empezar una nueva vida en la ciudad, y se ha instalado con su hijo de nueve años en un modesto apartamento. El reencuentro les trae, inevitablemente, recuerdos de su infancia y juventud, aquellos maravillosos años en el pueblo cuando, además de vivir en casas vecinas, eran amigos. Claro que todo eso es cosa del pasado, y el pasado es historia, ¿verdad? Pues sí, siempre hay que mirar al futuro.

Y sin embargo, ¿por qué Mickey se pregunta si Fred conservará algo de aquel chico maravilloso, y por qué Fred empieza a plantearse ideas raras sobre su inminente proyecto de vida? Dicen que donde hubo fuego, rescoldos quedan, aunque también es cierto que las cosas nunca son tan sencillas como nos gustaría. Dicen que el primer amor nunca se olvida...

Este libro lo he comprado en la sección Chick-lit, pero tengo que decir que para nada me ha parecido un libro que tenga que ir en esa sección, sino en la sección de Sentimental. Porque eso es lo que me he encontrado en este libros, sentimientos. Sentimientos puros y verdaderos, sentimientos hacia otra persona sin pedir nada a cambio.

Este libro, es también un libro de reencuentros. Un libro en el que los autores han sabido plasmar a las mil maravillas la vida de dos personas desde que se conocen de pequeños con siete años, su separación y su reencuentro posterior.

Cada capítulo está narrado en primera persona, y en cada capítulo vemos lo que piensa cada uno de ellos. El primer capítulo está narrado por Fred y el segundo por Mickey, y así sucesivamente, y la verdad es que me ha gustado mucho, pues normalmente cuando un libro está narrado en primera persona, solamente leemos sobre los sentimientos del que lo narra, pero al estar así vemos lo que piensan ella y él.

Como ya he dicho antes, me ha encantado. Creo que la relación que mantienen Fred y Mickey de pequeños es una amistad de niños, pero con una confianza que se va agrandando con el tiempo. Cuando los dos se hacen adolescentes, vemos como ese amor va a más. Ver lo que los dos han sufrido para llegar hasta donde están hoy, y ver que luchan en contra de lo que sienten, hasta que no pueden negarlo, ha sido maravilloso y muy bonito.

Los personajes secundarios tienen también mucho peso, pues todo lo que ellos hacen, es lo que hace que Fred y Mickey pasen todo lo que pasan en el libro. Me ha gustado mucho el hijo de Mickey, Joe, pues un niño alegre, divertido y muy gracioso. Los demás secundarios también son muy importantes en toda la historia.

La ambientación está muy bien descrita, sobre todo con los acontecimientos del pasado y del presente. Cosa que está muy bien descrita también, y no hay problema en los diferentes saltos que hacen los autores en el tiempo. Los diálogos son maravillosos, no te puedes saltar ni uno, pues todo lo que se cuenta en ellos es importante.

Un libro que recomiendo a quien quiera leer una historia llena de sentimientos maravillosos, pero que eso sí, no contiene (excepto una o dos, y no completas) escenas de sexo. Un libro de segundas oportunidades, y una historia del encuentro del primer amor preciosa...

Mi puntuación es de 5/5...

Hace muchos años leí Finalmente juntos, de estos mismo autores, un libro que me gustó bastante y que en aquel momento me pareció original y diferente, pero no me animaba a leer nada más de estos autores pese a que tenía El chico de al lado bien guardado hasta que una preciosa crítica sobre él me hizo querer leerlo deprisa y corriendo y en cuanto pude, es lo que hice con muy buenos resultados.

Nuestros protagonistas son Mickey y Fred, dos personas que se conocen casi desde el momento en que nacen y se hacen inseparables desde entonces, vecinos y compañeros de juegos, aventuras y desventuras, se meten en líos , descubren la vida de la mano y cuando crecen, también el amor pero a los quince años sucede algo que desbarata la vida de ambos , Fred se va y no vuelven a encontrarse hasta quince años más tarde en Londres. Un encuentro fortuito e inesperado que cambiará el mundo de ambos otra vez.

Fred se casa en un mes con su novia Rebecca, por su parte Mickey es madre soltera y tiene su propia floristería desde hace poco que intenta sacar adelante. El encuentro entre Fred y Mickey los coge a ambos por sorpresa y desata en los dos un torrente de recuerdos, anhelos y sueños que nunca llegaron. Si niñez y adolescencia siempre estuvo unida, en el pequeño pueblo donde crecieron lo normal y lógico era verlos siempre juntos o uno en casa del otro, Mickey era la intrépida y rebelde que siempre tenía nuevas ocurrencias o retos pero siempre ayudada por la fuerza que le daba Fred, su compañía y el tenerlo siempre al lado.

Fred tiene un padre siempre ausente, Miles, que tiene su propio club en Londres y que apenas va a verlos a su madre y a él al pueblo, cuando aparece tampoco le hace mucho caso a Fred y este crece primero adorando y luego odiando a su padre, Miles será para bien o para mal, el que siempre cambie la vida de Fred.

Parece que nada separará a esta pareja que con la adolescencia se enamora y hace planes de futuro, sueños que piensan realizar, siempre juntos, es casi imposible imaginar el futuro de ambos sino es juntos y ni los diferentes colegios o el internado de Fred, hacen que sus sentimientos disminuyan, hasta que sucede lo impensable y la madre de Fred se traslada con éste a Escocia cortando todo contacto entre Fred y Mickey o la vida que hayan podido tener en el pequeño pueblo donde crecieron.

Para los dos en un duro batacazo que deja a Mickey un poco a la deriva convirtiéndola en una joven que comete muchos errores pero que también le da a Joe, su hijo , el centro de su vida, con los años consigue un poco de estabilidad y se instala en su adorada Londres montando su propio negocio aunque con las preocupaciones que esto acarrea y lidiando con el carácter complicado de un niño de nueve años.

Fred sufrió mucho, no volver a ver a Mickey fue otro duro golpe en un momento desastroso de su vida, con los años la relación con su madre se vuelve casi inexistente pero él consigue labrarse un futuro con éxito, una buena carrera y una vida estable con una novia atractiva que lo quiere, pero sin embargo cuando se para a pensarlo no todo encaja como debería en esa aparente buena vida , encontrarse de nuevo con Mickey hará que en cierta manera se reencuentre a si mismo y al chico que fue una vez.

El reencuentro es para ambos un cúmulo de sentimientos, felicidad y dolor, en algunos aspectos los dos se conocen mejor que nadie, pero en otros son personas desconocidas que han tenido quince años para cambiar, para equivocarse, para tomar decisiones que los llevan a encontrarse en Londres a solo un mes de que Fred se casa. Los dos tendrán que enfrentarse a decisiones complicadas y a los sentimientos que nunca murieron ni se olvidaron entre dos personas que parecían destinadas a estar siempre juntas pero que por caprichos de la vida fueron separados bruscamente.

Un libro estupendo que me ha sorprendido mucho, de esos que empiezas y no sueltas hasta que lo terminas deseando saber que pasa en la siguiente página, narrado en primera persona tanto por Fred un capítulo como por Mickey otro alternativamente , ambos nos van narrando su presente y su pasado, los echos que marcaron su vida, su infancia y la relación de ambos, como de la amistad de la infancia pasan al amor absorbente y visceral de la adolescencia, como sus sueños se rompen mangoneados por factores externos a ellos y como la vida les da una segunda oportunidad al reencontrarse quince años después. Con una narración fluida, una historia llena de sentimientos con la que puedes reír y emocionarte y una historia bastante original pero sencilla es sin duda un libro a tener en cuenta que te hará pasar un rato estupendo.

Muy bueno.