Kathryn Smith - Amor inmortal

Crítica realizada por Mariam

En Rumania, en la región de las montañas Fagaras todos conocen a Marika Korzha, la cazavampiros que juró encontrar y matar al vampiro que acabó con la vida de su madre. Ese vampiro es Saint, uno de los miembros de la Hermandad de la sangre. Para dar con él Marika planea atrapar a uno de sus compañeros de la Hermandad y torturarle sin piedad, si es necesario, para que le confiese el paradero de Saint.
Casualmente Bishop se encuentra en la región investigando la desaparición de algunos vampiros. Cree que Marika es la responsable de estas desapariciones, ya que son cientos las muertes de miembros de su especie  que pueden contarse a manos de esta cazavampiros. Es letal y no perdona la vida a ninguno.

Bishop, como el resto de miembros de La Hermandad de la sangre, es un vampiro de más de seiscientos años. Pese a ello cae sin demasiados problemas en la trampa que Marika le tiende y, en consecuencia, es hecho prisionero por la bella cazavampiros.
Marika es la primera mujer que, después de siglos, ha logrado despertar en él sentimientos que creía enterrados. Claro que también es la misma mujer que planea acabar con Saint y para ello valerse del mismo Bishop, al que ha acordado entregar a una antigua orden que anda tras él y los de su especie, una vez ya no le sea útil.
Lo que en principio Marika  no sabe es que  la antigua Orden de la Palma de Plata es tan enemiga suya como de Bishop, pero eso es algo que no tardará en descubrir.

Los planes de Marika para encontrar a Saint no siguen el curso que había ideado, ya que no sólo Bishop no le da la información que le exige y necesita, sino que éste resulta ser mucho más peligroso de lo que pensaba en principio. Después de un cruce de miradas y un rato a solas en el sótano en que lo tiene prisionero, Bishop descubre el secreto más celosamente guardado de Marika: es una damphyr.
Una damphyr es una mestiza, mitad humana mitad vampiro.
El vampiro que mató a su madre trató de convertirla en una de su especie, sin lograrlo dada la extrema gravedad en que ésta se encontraba, pero el intercambio de sangre sí afectó al bebé que llevaba en su vientre, Marika, lo que la transformó.  Con el paso de los años, Marika ha ido adquiriendo poderes y habilidades que comparte con los vampiros y que, en su fuero interno, cree son las que llevaron a su padre a repudiarla.
El mayor temor de Marika es convertirse en una de ellos.

Cuando Marika se percata que su naturaleza la hace tan vulnerable como a Bishop ante la Orden de La Palma de plata y cuando, llegado el momento, se niega a entregarles al atractivo vampiro que, poco a poco, ha ido seduciéndola, encuentra en Bishop a su aliado más fiel y al único en quien verdaderamente puede confiar.

Amor inmortal es la segunda de las novelas que componen la saga paranormal de Kathryn Smith, La Hermandad de la sangre.
Ambientada en la legendaria Rumania, tierra de mitos y creencias en torno a los vampiros,  es el  marco perfecto para una novela de vampiros.
Si de Mía para siempre me atrapó la dulzura de la historia de amor entre Chapel y Prudence, en Amor inmortal creo que es la sensualidad que emana la novela, desde la primera a la última página, la característica predominante.
Estamos ante una novela con un carácter erótico más marcado, donde las escenas de sexo se suceden más y donde el tipo de relación entre sus protagonistas es mucho más sensual.

La relación entre Bishop y Marika parte del odio jurado entre dos seres destinados a ser enemigos.
Marika odia profundamente a los vampiros, a pesar que ella es en parte una de éstos. Los odia porque culpabiliza a uno de ellos de la muerte de su madre, quien falleció poco después de dar a luz.
Bishop por su parte también odia a los humanos, especialmente a aquellos que en su ignorancia hacia lo desconocido actúan movidos por impulsos violentos y criminales. En el pasado un grupo de humanos destruyó su casa para darle caza y en el proceso asesinaron y torturaron a la mujer que amaba.
Tanto Bishop como Marika deberían estar predestinados para odiarse, pero el deseo estalla entre ambos, olvidando guerras entre sus razas y dejando que sean sus instintos los que guíen sus vidas y dé paso al deseo y al amor...

Aunque me gustó más Mía para siempre -me cautivó la ternura de esa novela- creo que Amor inmortal también es una fantástica novela paranormal de vampiros, ágil, llena de intriga y con grandes dosis de sensualidad.
A la vez que la relación entre la pareja protagonista va pasando por diferentes fases -odio, deseo, compañerismo, amor-  van conociendo el entorno que los rodea, las dobleces y maquinaciones de La Orden de la Palma de Plata, el poder que ostentan. Se perfilan nuevas intrigas que enlazan las diferentes novelas que componen esta saga y que no dejan  a ninguno de los vampiros de la Hermandad libres del odio de esta Orden.

Secretos familiares, odios del pasado, amor, sexo y confianza son algunos de los puntales alrededor de los que gira esta novela.
La reaparición de personajes como el padre Molineaux y Marcus Grey actúan como vínculos entre las vidas de los protagonistas de la novela anterior.  Y Bishop que, como Chapel, fue uno de los mercenarios que bajo las órdenes del rey Felipe buscaba el Santo Grial y encontró en su lugar el Grial maldito, del que al beber se convirtió en vampiro.

Los secretos en torno al Grial maldito, la sangre de Lilith, la primera mujer vampiro, los planes de la Orden de la Palma de Plata siguen sin resolverse y abren nuevos interrogantes porque esta antiquísima Orden parece estar tras la Hermandad de la sangre con un fin que desconocemos y que no se desvela en Amor inmortal, lo que nos obliga a continuar leyendo esta saga para descubrir tales interrogantes.

Amor inmortal, con una trama de carácter más sensual, con una historia de amor más pasional nos adentra un poco más en el cautivador mundo de La Hermandad de la sangre, cuyos vampiros, antiguos caballeros medievales, mantienen reminiscencias de esa época histórica que unidas a las de la apasionante Regencia garantiza un marco mágico y atractivo. Pero en definitiva todo es un marco donde nace y se desarrolla la sensual historia de amor entre Bishop y Marika haciendo que ya no sea tan claro quién es el cazador de los dos.

Valoración: Buena