Crítica realizada por Mariam
Seis siglos atrás Severian De Foncé, junto a un grupo de mercenarios franceses a la orden del rey Felipe, entró en el santuario de los caballeros de la orden del Temple para arrebatarles el Santo Grial. En su lugar, encontró el Grial Maldito y, confundiéndolos, y bebió del cáliz. La ingesta de la sangre que contenía en su interior lo transformó en un vampiro y desde entonces, y aún seis siglos después, es Chapel, un ser nocturno que vive alejado de la humanidad y de la luz del sol, un vampiro solitario que evita el contacto con los humanos para que su terrible secreto vea la luz.
Cuando llegan noticias de que en unas excavaciones realizadas en Inglaterra podría hallarse el Santo Grial, la iglesia envía a Chapel, quien es ahora uno de sus servidores, con el temor que la reliquia que desentierren sea el Grial Maldito, en lugar del Santo Grial, y dé lugar a que más vampiros se extiendan por la tierra.
Para Chapel ser vampiro es un maldición, un ser que no tiene cabida entre los hombres mortales, alguien dejado de la mano de Dios.
A su llegada a Inglaterra, Chapel descubre que la excavación está dirigida por Marcus Grey, un historiador, y una mujer, Prudence Ryland quien está empecinada en dar con el Santo Grial. Tras siglos viviendo solo, lejos de todos, evitando incluso el contacto humano para alimentarse, Chapel siente que una emoción nueva nace en su interior en el momento que conoce a Pru. Temiendo su reacción, le oculta su secreto, consciente que ella también oculta uno tan doloroso que no quiere compartir con él, pero aún así no se aleja de su lado y sigue, paso a paso, los avances de la excavación para que, en caso que sea el Grial Maldito la reliquia hallada, hacerse con ella antes que nadie.
Prudence sabe que la vida se le acaba y que sólo un milagro puede salvarla. Cree que ese milagro puede encontrarlo en el Santo Grial. Enferma de cáncer y más debilitada cada día, está dispuesta a agarrarse a un clavo ardiendo y eso supone seguir viviendo.
No obstante, lejos de mostrarse destrozada o abatida, trata de mostrar un espíritu más alegre ante sus hermanas y padre. Vive al momento, arañando y buscando experiencias que bien sabe pueden ser las últimas para ella.
La aparición de Chapel pone en peligro lo que sería un último milagro de escapar a la muerte, pero, en el proceso, se percata que el mayor milagro lo encuentra en el amor que descubre junto a Chapel, a pesar de no saber si es correspondida.
Para Chapel, que fue criado como católico y cree en los preceptos de Dios, su naturaleza vampiro es una maldición, algo que lo hace indigno de Pru hasta tal punto que ni siquiera cuando descubre cuál es ese terrible secreto, cree que transformarla sea la salvación pues, dentro de él, cree que la condenaría a un destino peor que la muerte.
Con Mía para siempre da inicio la saga de la Hermandad de la sangre de Kathryn Smith. Hasta ahora sólo había leído las novelas históricas de esta autora -novelas que me han dejado muy buena opinión- pero aún no me había animado a leer esta saga. La razón principal es que, aunque me gustan las novelas paranormales, hacía tiempo que no me atraía ninguna nueva ni conseguía engancharme a ninguna del mismo modo que las que llevo leyendo hace algunos años. Pero en Mía para siempre he encontrado una novela preciosa.
En comparación con otras sagas de vampiros u otros seres condenados a una vida en la oscuridad, la Hermandad de la sangre me parece muy diferente. No sólo por la manera de narrar y desarrollar las historias de Kathryn Smith, sino porque reina una atmósfera más clara, más transparente, menos oscura y tenebrosa.
Por un lado me ha encantado que las novelas no transcurran en la época actual, sino que en la Regencia, ya que creo eso supone un cambio refrescante y da cabida a otros escenarios y otros lugares. Los pilares sobre los que se sustenta Mía para siempre, en mi opinión son dos: la enfermedad incurable de Pru y las excavaciones en las ruinas, próximas a las tierras de los Ryland, en búsqueda del Santo Grial.
Mía para siempre es una novela que me parece muy ágil de leer, con una narración muy fluida pero no por ello menos cargada de sentimientos, dando pie a una historia muy bonita, tierna y sobrecogedora en ocasiones. Como inicio de la saga me ha parecido una novela muy buena, ya que nos adentra en el mundo de la orden de los caballeros del Temple, las órdenes secretas en búsqueda del Santo Grial y el origen de la maldición de los vampiros, así como un esbozo del resto de mercenarios franceses, en el presente vampiros, que acompañaron a Chapel, entonces Severian De Foncé, su misión en nombre del rey Felipe.
Me gusta cómo se aborda la figura épica de los caballeros templarios, eso entrelazado con una novela de vampiros, creo que hacen de ésta una historia bastante original.
A estas alturas creo que en cuanto a novelas paranormales todos los estereotipos, temas y subtramas nos son ya archiconocidos porque hay figuras, perfiles o temas que suelen repetirse pero creo que dependiendo de la autora logra que resulte nuevo, original y sobre todo, romántico.
Esto es lo que me ha sucedido con Mía para siempre.
La historia de un amor condenado entre Pru y Chapel puede que no sea original -he leído otras- y puede que hasta cierto punto resulte previsible, pero me ha parecido tan bonita y emotiva que no puedo encontrarle una sola tara.
Me parece preciosa la manera en que se desarrolla, cómo un vampiro de más de seiscientos años, que se siente incapaz de amar, no merecedor de alguien como Pru, ve cómo las murallas que alza entre ambos van desmoronándose. Su historia pasada con Marie, la que fuera su prometida, una aristócrata francesa con la que pensaba casarse, le marcó tanto o más que la maldición en sí, y cómo va dejando eso atrás.
Y cómo Pru, una mujer que siente que la vida se le escapa, se agarra con las dos manos a ese amor en la que es la experiencia más hermosa se su vida, pero que lamentablemente sin un milagro de por medio, puede ser la última.
Algo que me ha emocionado mucho es cómo la autora describe la visión de Pru hacia la vida y su relación con Chapel en los que pueden ser sus últimos días de vida. Hay escenas tan emotivas que se me ha escapado alguna lagrimilla.
Me gustaría resaltar también la relación de Pru con sus tres hermanas y su padre, como afrontan todas su enfermedad y cómo, a su modo, luchan y están al lado de la joven.
En grandes líneas Mía para siempre me parece una novela que aúna elementos novedosos con otros más típicos de las novelas paranormales, pero el resultado creo que es una historia de amor muy bonita, cargada de sentimientos, tierna y delicada.
Y creo también que es una novelas que, sin dejar de lado la naturaleza oscura de su protagonista, te adentra en una gran historia de amor, sin que ésta quede relegada a un segundo término.
Valoración: Muy Buena
------------------------------
Crítica realizada por Carolina Márquez Rojas
Estamos ante una novela fundamentalmente romántica, la primera de la saga "La Hermandad de la Sangre" enmarcada en los subgéneros histórico-vampírico-paranormal...otra novela más sobre temas muy trabajados, muy desarrollados, muy predecibles...y, sin embargo, es un relato que consigue dar una nueva vuelta de tuerca sobre el apetecible mundo sobrenatural sin sobrecargarnos a pesar de incidir sobre mundos ya manipulados hasta el límite.
Me gusta esta novela, mucho, a pesar de que podía haber caído en un pozo de sensiblería, no ha sido así, al contrario, es un relato con fuerza, la fuerza del amor y de las creencias personales, la fe en uno mismo que puede tambalearse cuando lo que realmente importa es el ser amado...me ha conmovido y me ha hecho reflexionar, y eso es mucho para mí.
Tintagel, Cornualles, 1899. Prudence es una mujer inteligente, avispada, irónica, bella y encantadora. Pero un cáncer fulminante la está devorando, y su único objetivo es encontrar el Santo Grial para beber de él, el cáliz que presidió la última cena y que cree que está enterrado en Tintagel, terreno propiedad de su familia desde que convenció a su padre para comprarlo. El cáliz sagrado podrá curarla, al menos es eso lo que ella y Marcus, su mejor amigo, creen fervientemente.
Chapel es un servidor de la Iglesia enviado, junto al padre Molineaux, a Tintagel para recuperar el Santo Grial. Lo que pocos saben es que Chapel es un antiguo soldado templario, que hace más de 600 años fue enviado por el rey Felipe en busca del cáliz sagrado. Pero Severian de Foncé (Chapel) y sus compañeros cayeron víctimas de una trampa mortal. Sintiendo el miedo de la muerte en sus venas, Chapel y sus amigos bebieron la vida del vaso sagrado sin saber que éste era la versión maligna del mismo...el cáliz maldito, elaborado con la esencia de Lilith, la primera mujer de Adán que se esposó con Sammaleth, el ángel caído. La maldición llegó en un instante, convirtiéndolos en bestias, vampiros condenados a vagar eternamente sin ver la luz del sol...
Este relato me ha inspirado ternura, mucho amor y mucha reflexión. Cuestiones éticas y religiosas se plantean a lo largo de la novela: ¿es lícito salvar la vida de una persona y al mismo tiempo condenar su alma?. Pero esa condenación puede significar la felicidad eterna. Y cómo abandonar a tu familia, verla morir pero al mismo tiempo desear y poder cuidarla por toda la eternidad...el amor tiene la respuesta. Me gusta la actitud de todos los personajes, me parecen tan sinceros, tan reales. La resignación de Prudence cuando la muerte la acorrala hasta el límite, y su deseo de que Chapel sea feliz, aún sin ella, me arrinconó el alma, pero me hizo desearle un buen viaje. Acurrucada junto al cuerpo de su amado, esas lágrimas me llegaron muy hondo (las de él, más que ninguna). El cariño con que Chapel la busca, la desnuda, la baña, la viste, la peina (conteniendo Prudence la vergüenza de que vea su cuerpo consumido por la enfermedad), sin importarle su físico sino la mujer que lo hace feliz, la mujer a la que ama.
Todo ello hará que Chapel, el antiguo caballero templario que se convirtió a su pesar en vampiro, reflexione sobre su verdadera esencia como persona y deje de verse como un monstruo, lo que la Iglesia le hizo creer que era. A través de los ojos de Prudence volverá a verse como un hombre lleno de sentimientos capaz de enfrentarse a sus propias convicciones y creencias y destruírlas...dejando paso al amor y a la eternidad, viviendo un amor para nada normal pero auténtico.
Un relato magnífico, romántico, vampírico e histórico que invita a pensar, algo nada corriente hoy en día. Espero poder leer las siguientes novelas de la saga con impaciencia.
El Amor y La Eternidad en unas páginas...
------------------------------
Crítica realizada por Kkekka
En el siglo XIV, seis caballeros fueron enviados a expoliar los tesoros de los templarios y cayeron en una trampa que los convirtió en vampiros. 600 años después, uno de ellos acude a Inglaterra con el cometido de proteger el Grial. Allí conocerá a Prudence, una mujer que logra hacerle sentir de nuevo como un hombre. Pero él es un vampiro y ella una mortal, que además está enferma...
I libro de la “Hermandad de la Sangre”
Leí este libro hace poco ya que buscaba algo diferente dentro de la temática de vampiros y me gustó lo que contaban en la comunidad del Rincón.
Aquí no hay vampiros fuertotes vestidos de cuero que montan en moto o en coches espectaculares, con cuerpos de escándalo y habilidades sexuales de Guines. Tampoco es un clásico del mito vampírico, esta entre la novela fin de siglo y lo paranormal.
La historia comienza contando como el protagonista, en un acto de compañerismo y caballerosidad hacia un hermano de armas, se convierte en vampiro por culpa de una maldición. Luego nos volvemos a encontrar con ese mismo hombre 300 años después convertido ya en lo que él mismo considera una bestia.
En muchos libros se han dado todo tipo de explicaciones sobre la existencia de los vampiros y sobre cual es u origen. Aquí son ángeles caídos hijos de la que fue primera mujer de Adán expulsada de los cielos, y en otras culturas culpada de muchos males o mostrada como símbolo del mal trato de la Iglesia hacia la mujer.
Bien, como parte de la maldición, existen dos cálices: uno santo, con poder para sanar y este es el que ansía la protagonista femenina; y otro maldito, y este es el convirtió en bestia al protagonista masculino.
Prudente, la protagonista, mujer hermosa e inteligente, sufre una enfermedad mortal y busca en unos terrenos cercanos a su casa el cáliz que podría salvarla la vida. En ese momento llega un extraño experto por el que se siente increíblemente atraída y que la intriga sobremanera.
Chapel, teme que encuentre el cáliz maldito y a la vez siente una atracción que no sentía en siglos, algo que le asusta y que cree peligroso. No quiere que ella se convierta en un monstruo como él. Pero eso es algo que no esta del todo en sus manos.
Aquí dejo el argumento por no seguir destripando la historia.
Me he encontrado con unos personajes complejos, bien estructurados, llenos de matices y de sentimientos reales.
Chapel es un hombre mas que una bestia aunque es él mismo con sus palabra y no con sus acciones el que no deja que olvides quien es. La autora ha construido un personaje tremendamente romántico en su manera de actuar con ella y con los demás que le rodean. Su pasión, a veces incontenible, esta muy bien reflejada y la sientes como tuya.
En cuanto a Prudente, su agonía es tan palpable, sus ganas de vivir tan grandes que no entiendes por que Chapel se niega a darle lo que ella le pide y hay momentos en los que casi le pegarías.
Me ha gustado mucho el libro, ya tengo el siguiente esperando. Se que llego tarde a su lectura, pero me alegro de haberme animado a hacerlo.
Mi puntuación es un 4,2 sobre 5. Muy recomendable.
Copyright © 2002 - 2022 rnovelaromantica.com y elrinconromantico.com
| Aviso legal | Política de privacidad | Política de Cookies |