Crítica realizada por LILIAN
"Michelle Cabot acababa de heredar un rancho y un montón de deudas. Pero lo peor de todo era que la mayoría de esas deudas eran con el propietario del rancho vecino, John Rafferty.
Nada podría haberlo sorprendido más que descubrir que aquella niña rica y mimada se había propuesto dirigir el rancho de su padre. John estaba realmente encantado con la nueva Michelle, y por eso decidió que tenía que conseguir que se conviertiera en su mujer. Lo que no sabía era que, debajo de su apariencia tranquila y estable, aquella mujer escondía un corazón roto y la firme determinación de no volver a pertenecer a nadie más que a sí misma. Pero Rafferty no estaba dispuesto a aceptar un no por respuesta"
Michelle Cabot, criada entre mimos y algodones por un padre devoto, no sabe lo que es la necesidad económica. A su muerte descubre la realidad de su herencia. Un rancho sin caballos y unas cuantas cabezas de ganado que no podrá vender hasta la primavera, y saldar unas cuantas deudas. La más grande, la ha contraído su padre con su vecino, John Rafferty. Michelle, siempre ha reprimido la profunda atracción que siente hacia John con miradas de helado desdén. No está dispuesta a ser la siguiente conquista de John y lucha con uñas y dientes consigo misma. De hecho, esta lucha la llevó a casarse con la primera cara bonita que se le cruzó en el camino, el ricachón Roger Beckman. Dos años duró la agonía de un matrimonio lleno de palizas. Si abandonaba a Roger, su padre sufriría las consecuencias. Ahora ya nada importa, su padre ha muerto, ella tiene el divorcio y una enorme deuda que pagar a John.
John Rafferty, es un hombre hecho a sí mismo. Su rancho linda con el de los Cabot. Durante diez largos años, ha visto crecer a Michelle y ha sufrido sus desplantes. No quiere saber nada de esa niña consentida y se lanza a los brazos de todas las mujeres de los alrededores. Siente un profundo desprecio por esa cabeza hueca, que disfruta más esquiando en Saint Tropez que en el rancho. En el fondo, pero muy en el fondo, suspira por ese pelo rubio y esos ojos verdes como la hierba.
Michelle y John, son dos personas testarudas acostumbradas a hacer su santa voluntad pero alguien tiene que ceder. John, es el primero en tender la mano. Sus diferencias empiezan a acortar distancias y a saldar las cuentas que tienen pendientes. La pasión abrasadora que les envuelve no tiene fin, pero otros peligros les acechan...
¡Me ha encantado esta novela!. Es un Harlequín que te quita el aliento. Tiene sensualidad, ternura y pasión a raudales. La relación entre John y Michelle, fluye a mil por hora. Un loco te odio pero te quiero, discuto pero te beso, te desprecio pero no puedo vivir sin ti...
A Linda Howard le ha salido un libro, a lo Diana Palmer, donde el protagonista es un ranchero rudo y arrogante pero que siempre está dispuesto a a derrochar dulzura con su muñequita, de largos cabellos rubios como el sol. Michelle es testaruda y no se deja ayudar pero la es carne débil y ¿por qué no voy a darme un caprichito para el cuerpo?. A John, le apodan en el pueblo "el semental" y aunque trabaja más de doce horas diarias en unas condiciones durísimas, después llega la ducha y el reposo del guerrero. ¡Venga, a cumplir se ha dicho!. Hay frases del tipo y cito "nena, si te tumbas cada vez que me entren ganas, te pasarás un año en posición horizontal". En fin, que es una novela que o te gusta o te entran ganas de gritar.
Hago un llamamiento a las seguidoras Palmerianas: Leed Corazón roto, que no os va a defraudar. Incluso podéis quitarle el bigote a John como he hecho yo y a soñar...
Mi puntuación es 4/5
Crítica realizada por dougless
Michelle Cabot ha heredado el rancho de su padre, está en un estado ruinoso y poco a poco se va dando cuenta de que está endeudada y no sabe si llegará a poder mantenerlo. Siempre ha sido una niña bien, viviendo a lo grande y de fiesta y viajes continuamente. Divorciada desde hace dos años y sin padre que la mantenga se da cuenta de que ya es hora que haga algo por sí misma, sino se verá en la calle. Está dispuesta a sacar adelante el rancho pero está sola, no tiene dinero para pagar a hombres que la ayuden y para desgracia suya descubre que le debe mucho dinero a su vecino, el “semental” John Rafferty.
John lleva toda la vida trabajando duramente para sacar su rancho adelante, tiene una vida acomodada y un montón de mujeres a sus espaldas. Es un hombre arrogante, prepotente, chulo y machista. Con Michelle guarda una relación amor odio, la ve altiva y señoritinga y no entiende cómo su padre se arruinó para darle todos los lujos. Pero todo cambia cuando ve cómo Michelle intenta sacar adelante el rancho ella sola, poco a poco se van acercando y enseguida saltan chipas entre ellos.
Me ha llamado la atención los protagonistas, Michelle porque intenta cambiar y hacer algo con su vida y John porque es arrogante y mandón a más no poder. La relación entre ellos es un tira y afloja constante, John le echa en cara que no sepa hacer nada con su vida pero en cuanto ve que se hace daño trabajando en el rancho la saca corriendo en brazos y no quiere que trabaje más, ella quiere a John desde siempre pero tiene miedo de ser una conquista más por eso siempre le trata con helada cortesía.
La trama está bien, es un libro corto pero da para accidentes, tiros, hospital, etc.
Trata el tema de los malos tratos de una manera sencilla y real, esa parte me ha gustado bastante. Hasta John me ha acabado gustando y eso que cuando empezó creía que no lo iba a poder soportar pero poco a poco se va volviendo mas dulce y te conquista, eso sí, yo le quitaría el bigote.
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