Lisa-Maria Seydlitz - Hijas del verano

Crítica realizada por Teresa

A través de una carta anónima, Juno descubre que su padre le ha dejado en herencia una casa en la Bretaña cuya existencia ella desconocía. Contrariamente a lo esperado, Juno no es la única interesada en la casa: en esta vive ahora Julie, una camarera francesa que recibe a menudo la visita de su vecino, Jan, un arquitecto alemán.
Juno viajará a la Bretaña, donde deberá mirar atrás para comprender la verdad sobre su familia y su pasado, sobre la historia oculta que se escondió durante demasiado tiempo bajo una aparente infancia feliz. Juno rescatará aquel momento en que todo cambió, aquel secreto que alteró, sin ella saberlo, su vida para siempre. Empieza el verano, empieza una nueva vida.

Aunque este libro no se puede incluir en las novelas de romántica, me permito hacer una reseña para la que esté interesada en leerlo. Merece la pena, de verdad.
Es un libro corto, en primera persona. Se podría decir que es algo así como un diario, pero repleto de frases estupendas donde la autora nos describe sentimientos familiares, lugares y circunstancias de un modo que atrapa.

Si algo he encontrado en este libro ha sido emotividad. El modo de narrar la historia es bueno, fácil de leer, con frases no demasiado largas, donde a veces debes imaginarte lo que sucede. No cuesta trabajo hacerlo, muy al contrario. Es un estilo fresco donde nos narran lo que piensa la persona que lo cuenta (ya digo que es en primera persona), en flashes de recuerdos. Nos lleva a imaginar lo que le ha pasado y te sorprendes cuando sabes lo que pasó realmente. Yo diría que juega un poco con la imaginación de lector.

En el libro encontramos momentos dolorosos, pero también el modo de luchar contra ellos y superarse. Me ha sorprendido gratamente que en tan pocas páginas pueda haber un contenido tan denso y se pueda conocer la personalidad del padre de Juno, la de su madre, entregada a su profesión y dejando un poco de lado a la familia.

A pesar de lo que digo, me hubiera gustado que la historia fuera un poco más larga, se me ha hecho corta.

Por otro lado, no es una de esas novelas en las que te sumerges en la historia, como puede pasar con una de aventuras o romántica pura, sino que ves la historia desde fuera. No por eso deja de gustar, desde luego, porque te envuelve la sensibilidad de la autora y su especial estilo de escritura.

Emotiva, sensible, concisa y rápida, esta novela es una de esas obras que, cuando la terminas, siempre piensas que has leído un buen libro, de los que se recuerdan en el tiempo. Al menos yo lo haré con total seguridad.