Lorena Concepción - Cuando te salve

Crítica realizada por Sandra M

Cuando te salve es el libro finalista del primer premio Chic de la editorial Principal de los libros. Cuando vi que se publicaba la verdad es que me llamó bastante la atención, tanto la sinopsis como la portada y decidí animarme y darle una oportunidad y si bien ha tenido alguna cosilla que no me ha convencido, en general es un libro que se lee rápido y que está entretenido.

Colette acaba de perder a su padre. Su familia nunca ha estado demasiado unida, siempre han sido algo distantes y fríos y es por ese motivo que decide pasar una temporada con su madre (bueno, y que además acaba de perder su empleo) para recuperar el tiempo y tener una verdadera relación de familia. Las dos se marchan a la casa del campo para desconectar de la ciudad y pasar más tiempo juntas.

El problema es que alguien empieza a acechar a Colette y a seguirla por donde ella va; incluso logrará agredirla en una ocasión. Todo ello unido a que la relación con su madre no va como ella esperaba y que además conoce a un hombre con el que que su primer encuentro se podría definir como surrealista, hace que Colette se plantee si ha tomado las decisiones correctas.

Lachlan no está pasando por su mejor momento, ya que las resoluciones que ha tomado en los últimos años le han llevado a una vida con la que no está cómodo y sabe que antes de retomar la normalidad tiene que superar todos sus problemas. Por eso, cuando conoce a Colette y se siente atraído hacia ella desde el primer instante sabe que no puede ir más allá, que antes tiene que cambiar, aunque no puede evitar querer protegerla de la persona que la está acosando.

Como os comentaba antes, es un libro que se lee rápido ya que es bastante fino y que engancha desde la primera página. Los dos protagonistas congenian desde el principio, aunque tengo que reconocer que no he empatizado demasiado con ninguno de los dos hasta prácticamente el final del libro. Colette me ha parecido una chica frágil e insegura, que en todo momento busca la aprobación y la seguridad de los demás y no es hasta bien avanzada la historia que demuestra el valor que guarda dentro.

Lachlan por su parte, me ha gustado algo más; quizás le da demasiadas vueltas a sus problemas, pero tiene el valor de hacerles frente y decidir que ninguno de los dos va a estar bien si antes no lo está él. Cuando los dos deciden juntos lo que es mejor para ellos, avanzan en la dirección correcta y es cuando les entiendes y les comprendes.

Otra cosa que no me ha terminado de convencer es el tema del suspense que introduce la autora. Creo que se podría haber jugado mucho más con ello y la forma en la que se soluciona todo ha sido demasiado rápida y me ha dejado con una sensación rara. El tema de la madre de Colette es lo que peor he llevado durante prácticamente todo el libro. Se supone que es una mujer que quiere pasar más tiempo con su hija y recuperar el tiempo perdido, pero me daba la impresión de que solamente pensaba en ella misma y en el qué pensarían las personas de su entorno de todo lo que hace su hija, y la verdad es que ni siquiera al final me ha terminado por convencer, ha sido un personaje que no me ha gustado nada de nada.

Aun así como digo, es un libro corto que se lee en un suspiro y que me ha mantenido enganchada a sus páginas a pesar de esos detalles que no me han dejado disfrutar al cien por cien de la historia y no será lo último que lea de la autora.