Lori Foster - La vida secreta de Bryan

Crítica realizada por Isabel Arconada

Bryan Kelly, un cazarecompensas a quien conocimos en ¿Cómo Resistirse a Joe?, se encuentra ayudando a su hermano gemelo, Bruce. Alguien le ha dado una paliza y para protegerle y descubrir quién ha sido el causante, Bryan decide hacerse pasar por su hermano. ¿El problema? Bruce es cura, pero no un cura cualquiera, uno que dirige una casa de acogida para mujeres que desean dejar la prostitución. Bryan no entiende como su hermanito es capaz de soportar las bromas y los toqueteos de las mujeres, ya que hasta un tío curtido como él le cuesta tolerarlo impasible. Otra cosa que Bryan no aguanta son las ricachonas que fingen ayudar a las clases bajas con el único fin de presumir de su generosidad.

Shay Sommers es una joven rica que participa activamente y mantiene varias organizaciones de caridad, pese a haber sido considerada por los medios de comunicación como una esnob malcriada y apodada la Princesa Coronada tras el fracaso de una de sus organizaciones. Su nuevo proyecto es abrir un nuevo hogar para prostitutas, por eso, cuando el reverendo Kelly la encuentra en la calle confundiéndola con una ramera y la lleva a su refugio, Shay aprovecha la oportunidad para hacerse pasar por una de ellas y averiguar todo lo necesario para montar su propia centro.

Desde el principio, las chispas saltan entre ambos, pero teniendo en cuenta que ambos están mintiendo descaradamente... ¿podrá llegar a buen puerto su relación o se odiaran mutuamente cuando todos los engaños salgan a la luz?

Quienes habéis leído la crítica que hice de ¿Cómo Resistirse a Joe? sabéis que no me hizo ninguna gracia, así que a lo mejor os sorprende que me decidiera a leer este. Pero creo que cualquier escritora (salvo unas pocas "Diosas de las novela romántica") puede tener un mal libro, así que quise darle otra oportunidad, especialmente teniendo en cuenta que tiene algunos harlequines que sí me gustaron.

¿Ha merecido la pena? Sí y no. Desde luego me ha gustado más que el de Joe y me he reído mucho, pero me quedo con la misma sensación. Foster coge un argumento interesante que en un harlequin podría resultar un buen libro y en una novela completa y bien desarrollada podría ser magnífico y ¿qué hace? lo escribe como si realmente fuera un harlequin y en lugar de aprovechar las páginas de más se dedica a meter relleno, con lo que a mí como lectora me toca las narices; porque, vamos a ver, un harlequín es la mitad de tiempo de lectura y la tercera parte del precio, aunque al menos este lo han publicado directamente en ZETA y el precio es más razonable.

¿Merece la pena? Eso lo dejo a decisión de cada una. Si os gustó el anterior, entonces este debe ser compra segura, ya que además de ser mejor (en mi opinión, claro), nos volvemos a encontrar con Joe, Luna y los niños. Si buscáis unas risas y un entretenimiento simple , os puede valer también.

Desde luego yo si me he reído con Bryan intentando hacerse pasar por su hermano pero soltando tantos tacos que un cura de verdad le hubiera excomulgado y poniéndose nervioso con las prostitutas pese a la experiencia que él tiene en temas sexuales.

Pero aparte del cabreo ya mencionado, ha habido otras cosas que me han mosqueado; no me ha gustado NADA que Bryan intentara sonsacar a Shay por medio de la seducción y menos cuando seguía en su papel de cura. Y... ¿qué tipo de obsesión tiene está mujer que todos sus protagonistas masculinos se pasan más de medio libro empalmados? Que alguien me lo explique por favor.

¿Sabéis lo peor de todo? Que yo debo ser masoca porque estoy deseando leer las historias de Bruce y de Jamie, que espero que Ediciones B traduzca pronto.