Crítica realizada por Mc2
Lady Maude Templeton había rechazado muchas proposiciones de matrimonio. Pretendía casarse por amor... y su corazón pertenecía desde hace tiempo a un hombre. El señor Eden Hurst, propietario de teatros, era atractivo, inteligente, sagaz en los negocios... ¡y el menos indicado para ella! No creía absolutamente en el amor. Parecía una empresa imposible, pero Maude estaba dispuesta a hacer que Eden se diera cuenta de que necesitaba amar... y que la necesitaba a ella precisamente. La sociedad estaba a punto de comprobar que, cuando se lo proponía, Maude podía llegar a ser tan atrevida como sus amigos los Ravenhurst.
Quinto libro de la serie Ravenhurst. En esta ocasión los protagonistas son Lady Maude Templeton y Eden Hurst.
Lady Maude Templeton se había sentido atraída por el señor Hurst desde el momento en que ambos se encontraron accidentalmente en la perfumería del señor Todmorton, algo que Eden no recordaba. Estaba decidida a casarse con él; lo difícil sería convencer a su padre de que se trataba de un buen partido. Tendría que engañar de algún modo a su padre y a su amigas y visitar al sr. Hurst en su despacho.
Eden Hurst estaba harto de todas las jovencitas que le perseguían. Sobre todo de las hijas de ese comerciante, que quería invertir en su negocio y sobre todo conseguir un esposo a alguna de sus hijas. Confundiendo a la joven Maude, entre las sombras de los pasillos del teatro, con una de las hijas de Corwin, decide darle un escarmiento que nunca olvidará.
Pero Maude está muy lejos de amilanarse. Siempre ha sabido lo que quería. Sólo necesita convencer a Hurst de que desea invertir en su negocio. Tal vez, la cercanía le haga replantearse sus verdaderos sentimientos, y aceptarla por esposa.
Entre bambalinas me ha resultado una novela entretenida aunque la relación entre ambos parecía por momentos alargarse en exceso. Un hombre demasiado reticente para el amor, y una mujer consentida que siempre ha conseguido lo que ha querido, parecía un motivo atrayente para leer la novela, pero gira una y otra vez alrededor de lo mismo, viendo entre bambalinas una relación casi sin altibajos. Tiene que producirse un desgraciado accidente con las lámparas de gas para darle un empujoncito a esta relación. Lo mejor, descubrir la verdadera identidad de Eden Hurst como descendiente de los Ravenhurst.
En cuanto a los protagonistas, Eden es el hijo bastardo de un príncipe italiano y la escandalosa hija menor de un noble. Despreciado por un padre que nunca le reconoció, y por una madre despreocupada que sólo lo utilizó, no creía en el amor y mucho menos en el matrimonio. Hastiado de su vida, nunca compartía cama más de una vez con la misma mujer y, sobre todo, nunca seducía a vírgenes solteras. Dedicaba todo su tiempo a gestionar sus teatros, en concreto El Unicornio, un teatro avanzado a su tiempo, con lámparas de gas como medio de iluminación. Lady Maude, pese a su belleza, se ha convertido casi en una solterona, pues sigue soltera a sus veinticinco años. Es la consentida hija del conde de Pangbourne. Desde la primera vez que vio a Eden fue para ella su "Ángel oscuro", el hombre con el que lograría casarse al final. A su lado se encuentra segura, comprendida y libre. Hay que destacar como secundario al comprensivo padre de Maude, que ni por asomo se parece al que se lo hizo pasar fatal a Gareth en el tercer libro de la serie.
En conclusión, la valoro como buena.
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