Crítica realizada por Merche
Mia se considera una mujer hecha y derecha, emocionalmente estable, que ha encontrado en Pete al hombre de su vida. Sin embargo, cuando sin querer lee en el móvil de su novio un mensaje de texto que parece evidenciar que él la engaña, revelará una astuta capacidad para el engaño que ni ella misma hubiera sospechado, y es que en el amor y en la guerra, todo está permitido.Una de las sorpresas más agradables del último año en el Reino Unido, Para siempre jamás es la evolución natural de un género cuyas lectoras han madurado.
Chick-lit entretenido que nos cuenta en primera persona la historia de una mujer que va descubriendo con asombro las infidelidades de su esposo.
Mia es un personaje agradable, real, una mujer adulta con ideas propias, con una vida relativamente tranquila salvo por su hermana que no acaba de centrarse. Está viviendo con su novio, Pete, un arquitecto con el que se lleva bien y ha encontrado la estabilidad que necesita. Todo parece perfecto, tranquilo y sosegado... Hasta que descubre un mensaje que da con todo al traste.
¿Por qué fisgar en el teléfono de tu pareja? ¿Qué intentas encontrar? Eso es lo que se pregunta Mia tras descubrir un mensaje en el móvil. Primero piensa que tiene que ser algo casual, tal vez un error, no puede tener nada que ver con Pete. ¿Quién es Lizzie?
Poco a poco la luz se abre paso entre las tinieblas y Mia se da cuenta de que esa mujer, esa tal Lizzie, tiene algo con su pareja. Por descontado que toma cartas en el asunto, no va a consentir perder al hombre que quiere sin hacer nada, tiene que luchar por su felicidad.
Como prácticamente en todo chick-lit, el argumento está sacado de la vida cotidiana, el problema de Mia puede ser el problema de cualquier mujer que, creyéndose protegida y amada, se da cuenta de que su felicidad es una falsedad, de que la están engañando. Un asunto delicado que es difícil tratar saliendo airosa. Pero la autora nos va relatando paso a paso lo sentimientos de la protagonista, lo que piensa, lo que decide hacer para salvar su amor. Y lo hace bien, de tal manera que casi formamos parte del argumento y apoyamos o denostamos los pasos dados por la protagonista.
A pesar de lo complicado de la situación, la novela tiene el humor necesario para que meternos en un problema lacrimógeno. Es realista y chistosa casi a partes iguales.
Al ser en primera persona, los secundarios son simplemente un complemento, no se centra demasiado en ellos.
Una novela que entretiene, sin grandes pretensiones, bien escrita y de lectura fácil.
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Crítica realizada por Teresa
Esta novela no tiene nada que ver con la del mismo título escrita por Jude Deveraux. Pero es lo que pasa cuando hay tantas novelas, que los títulos se repiten a veces. Por eso miro bien antes de comprar, noes la primera vez que me vengo sin una novela pensando que ya la tengo.
Bueno, es un chick-lit, pero no como los habituales en los que prima el humor mezclado con los problemas cotidianos de la protagonista. Esta novela trata un tema más candente.
Por supuesto, fiel a su género, es la experiencia de una mujer actual. Está escrita en primer persona, que ahora se lleva mucho, y eso hace que podamos ver los problemas de la protagonista desde un prisma más cercano, como si te los estuviese contando una amiga. Algo así como una charla delante de un café porque no solamente nos relata lo que sucede sino lo que piensa. Ahora bien, al contarnos la historia únicamente desde el punto de vista de la protagonista, creo que se pierden otros valores. Si la cuenta en tercera persona puede dar más papel a los secundarios, describirlos de otro modo, más desde fuera. Aquí no porque solamente los vemos de acuerdo al criterio de quien narra el libro.
A pesar de tratarse de un problema serio, el libro no deja de tener momentos graciosos y situaciones que te arrancan una sonrisa.
Algunas lectoras estarán al lado de Mia y otras no tanto, porque en esto de la infidelidad cada cual actúa de un modo distinto. Lo que para unos es que le pongan la osamenta, para otros puede tratarse simplemente de un escarceo,de algo pasajero que nada tiene que ver con el amor de verdad.
Tenemos un personaje principal, Mia, y varios secundarios, incluída la amante de su pareja. Ninguno está, como digo, demasiado definido, o a mí me ha parecido así.
No me extiendo mucho. Historia bien llevada, con una mujer que ve sus sueños destrozados, que su vida toma un rumbo que no le gusta, que presiento que está siendo engañada y decide saber si, realmente, su novio le está siendo infiel con una amante. Podría seruna supoisción de ella, pero no, cuando más intenta saber más cuenta se da de que no estaba equivocada.
El final es curioso, nos dejan como árbitros para que nos imaginemos lo que más nos plaza cuando acaba.Me ha parecido curioso.
Entretenida.
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