Margaret Moore - La novia del guerrero

Crítica realizada por Mc2

Serie King John, libro 4º

Lady Roslynn no sabía que podía esperar de su futuro marido, el célebre Oso de Brecon. El rey había decretado su boda con el poderoso señor galés, y Roslynn temía lo peor. Como viuda de un noble al que habían ejecutado por  traidor, no tenía derecho a aspirar a una unión por amor, pero en el fondo de su corazón, la dama soñaba con un hogar y una familia…

Con una sola mirada, lord Madoc de Llanpowell conseguía que a Roslynn le hirviera la sangre. El curtido guerrero resultó ser un amante apasionado y un marido atento, pero los secretos del pasado de Madoc amenazaban con apartarlo de su esposa. Por eso, Roslynn estaba decidida a sacar a la luz toda la verdad que se escondía bajo la armadura de su guerrero.

Novela ambientada en Gales a comienzos del siglo XIII. Es la cuarta novela de la serie King John.

Lady Roslynn de Werre no estaba muy ilusionada de llegar a su destino. Para ella suponía más bien un castigo impuesto por el rey John de Inglaterra. Su esposo había sido detenido y ajusticiado por traidor a la corona y, aunque ella había tenido que ver mucho en su detención, no guardaba grandes deseos de unirse a otro hombre que podría ser tan violento como Wimarr de Werre. Su anfitrión, a la llegada al castillo, le hace suponer que su esposo va a ser un anciano rechoncho, barbudo, canoso y aficionado a la bebida. Poco tarda en darse cuenta de lo erróneo de su suposición. El señor de Llanpowell es en realidad un guerrero vil y arrogante que parece juzgarla con cada una de sus miradas.

Madoc de Llanpowell tampoco está muy feliz con su “premio”. Ya ha estado casado y tiene un hijo que perpetúe su sangre, por lo que no desea desposarse con otra esposa reticente. Pero a Madoc le gustan las mujeres que dicen lo que piensan y tienen agallas, y Roslynn parece ser un objeto único. Enseguida deseará que la joven se convierta en su esposa por propia voluntad. Sólo tiene un problema. Él no posee un carácter pacífico por naturaleza  y él primer esposo de Roslynn fue un hombre violento que no solo la golpeaba sino que la forzaba, y su carácter y proximidad la llevan a enfrentarse a él, cuchillo en mano, para evitar que él haga algo en contra de su voluntad.

Lloyd, tío de Madoc, ve en la joven la mujer perfecta para que Madoc vuelva a ser el joven que vio como sus ideales y creencias se rompían el mismo día que se iba a casar su hermano, y que le llevó a contraer un matrimonio no deseado con una mujer que nunca le amó. Por eso no evitará recurrir al engaño para unirlos a ambos.

Madoc y Roslynn desean lo mismo: casarse, tener hijos y una persona a su lado que les comprenda y les ame. Pero a ambos les asaltan continuamente las dudas. Sobre todo a Roslynn que tanto se equivocó la primera vez, atraída por una belleza exterior que nada tenía que ver con el monstruo que era en realidad Wimarr. Por eso establece sus condiciones: no ser golpeada ni insultada en público. Al mismo tiempo, Madoc desea una esposa que acuda gustosa a su lecho. Está por verse si ambos confiarán en el otro para conseguirlo.

La novia del guerrero es una novela sobre secretos nunca revelados,  traiciones encubiertas, celos y, sobre todo, sobre la capacidad de perdonar, de reparar agravios y como no de esperanzas. Es un libro cortito que prácticamente se lee de un tirón. El grueso de la trama lo ocupan los protagonistas Madoc y Roslynn. Prácticamente todo tiene que ver con su relación y los secretos ocultados. Y de fondo, para darle interés a la trama, nos encontramos un problema de rencillas familiares y robo de ganado, todo amañado por un traidor que nunca ha olvidado su odio por los normandos. En conclusión, una novela con la que he pasado un buen rato.

En cuanto a los protagonistas, Madoc  es atractivo, fuerte, poderoso, un arquero de reconocido prestigio y guarda un terrible secreto que nunca ha confiado a nadie en relación a su hijo Owain. Un pequeño que misteriosamente no se cría en Llanpowell. Pero no es tan arrogante como ella cree que es. Es tierno, soñador y, para conquistarla, no duda en  cantar, mientras toca el arpa, una canción sobre un muchacho que soñaba con el amor perfecto. Atrás quedaron los tiempos en donde su tartamudez le llevaba a ser ridiculizado por otros. Roslynn es una mujer muy bella pero con una gran inseguridad. No puede olvidar los errores de su matrimonio con Wimarr y, cada palabra o acción de Madoc, es malinterpretada hasta el punto de querer abandonarle.

También hay secundarios que merecen destacarse. El jovial Lloyd siempre dispuesto a incurrir en cualquier estratagema para unir a ambos jóvenes, el administrador Ivor, personaje misterioso que tiene un papel importante en la trama, y el amargado hermano del protagonista que no puede olvidar que su hermano pequeño le robó la única mujer que había amado y las tierras que por nacimiento deberían haber sido suyas.

La puntúo con un 4/5.