Maya Rodale - El ángel y el canalla

Crítica realizada por Linda

2º Libro de la serie Los hermanos Kensington.

Han pasado seis años desde que Angela Sullivan posara los ojos en un hombre. Seis años desde que el hombre que amaba la arruinó y sus padres la desterraron a la abadía de Stanbrook, donde ahora se prepara para tomar los votos de pobreza, obediencia y castidad. Pero cuando la abadía acoge a un atractivo y descarado bribón herido, Angela necesitará de intervención divina para acallar sus pecaminosos pensamientos...

Si Lord Phillips no se hallara tan dolorido tras su accidente a caballo, se podría considerar afortunado de permanecer en un edificio lleno de mujeres. Pero su nefasta reputación le precede. Es cierto que Phillip puede que no sea como su angelical hermano gemelo, pero mientras los días se convierten en semanas, sus pensamientos hacia Angela se vuelven más nobles, mientras los de Ángela menos castos...

La novela está bien ambientada, en una abadía, y con unos personajes que me han gustado mucho. Pierde un poco a mitad de la historia, pero resulta entretenida.

Phillip ha tenido un percance al ser perseguido por unos acreedores y acaba, herido, en una abadía. Allí es atendido por Angela.

La protagonista, Angela, lleva seis años viviendo en es abadía, desterrada por su familia y a punto de tomar los votos. Allí debe enfrentarse con la pobreza, la castidad, la obediencia. Nada de esto le gusta demasiado, pero es una paria para la sociedad después de haberse enamorado de un hombre y dejarse seducir. Después de lo que ha pasado, Angela no quiere ni oír hablar de libertinos y canallas y sin duda alguna Phillip lo es, un verdadero sinvergüenza, pero con el atractivo suficiente como para hacerla dudar sobre lo de quedarse para siempre en la abadía. Por mucho que trata de olvidar su relación con otro canalla, la presencia de ese sujeto terriblemente sensual la pone en un brete. No tiene otro remedio que atenderle porque así se lo mandan, pero el desdén y el resentimiento son su pan y su agua.

Phillip, ni que decir que se siente atraído por la joven, presiente que guarda un secreto y quiere descubrirlo. Las escenas entre los dos resultan ingeniosas y graciosas. A veces hasta conmueven, porque él quiere convertirse en un hombre mejor de lo que es.

Angela paga con Phillip sus propios miedos, su rencor, al mismo tiempo que se siente totalmente atraída por él. Las constantes muestras de afecto del protagonista hacia ella, le resbalan. Algunas veces, querrías hasta matarla, por borrica. Es vengativa y eso es lo que menos me ha gustado de la historia porque al pobre Phillip lo trata demasiado mal.

Phillip, un descarado de tomo y lomo, se va transformando poco a poco a lo largo de la novela, haciéndose encantador, pendiente de Angela, intentando conquistarla cuando ella, que sigue con su resentimiento, se las hace pasar canutas.

Otra cosa que no me ha terminado de llenar, es que la historia no se centra del todo en los protagonistas, sino en personajes secundarios que, aunque aportan lo suyo a la novela, no deberían tener tanto predicamento.

La historia da una muestra de humildad a Phillip, le hace ver que su modo de vida no es el adecuado, que debe cambiar, ser menos arrogante, menos mujeriego y más sumiso.

En general me ha divertido, la he leído bastante deprisa y lo he pasado bien con muchas escenas. El desafío entre la pareja está muy bien plasmado y a veces te arranca una carcajada. Primero, porque Phil es un protagonista encantador y luego porque Angela, a pesar de haber decidido vivir en la obediencia, tiene poco de obediente, se le hace cuesta arriba eso de dejar sus opiniones a un lado para hacer lo que se la ordena. Se cabrea cuando se siente atraída por Phil, no quiere cuidarle, pero como es la única que no ha tomado los votos, le encargan la misión y claro, desemboca en un toma y daca divertido.

La historia no está mal, tiene personajes agradables y hasta chistosos y diálogos que divierten.