Crítica realizada por Rosamoni
Libro 5 de la serie PSI / Cambiantes
Vamos a conocer la historia de Ashaya y Dorian, ya en el libro de Clay se conocieron y ahora vamos a ver en qué deriva.
Ashaya es una científica Psi que trabaja para el Consejo en un laboratorio, lleva a cabo un importante experimento sobre un implante neurológico pero se ha dado cuenta de que están jugando con vidas humanas y en especial con niños, tras salvar la vida de dos de ellos, ahora es el momento de salvar la vida de la persona mas importante para ella, su hijo Keenan.
Tras ayudar a escapar a dos niños pupilos de Talin la pareja del cambiante Clay, el clan se comprometió a pagar su deuda y para ello deben secuestrar a su hijo, al que el consejero Ming mantiene secuestrado para obligarla a seguir trabajando en un experimento que esclavizaría a los Psi a manos del Consejo, y eso es lo que han hecho ahora Keenan está a salvo y ella debe intentarlo.
Con la ayuda de la fracción rebelde escapa del laboratorio yendo a parar a los brazos de Dorian, que nunca olvido sus ojos desde aquella noche en que la tuvo frente al visor de su arma y eso es muy importante para el mejor francotirador del clan.
Dorian es un leopardo latente, nunca ha sido como el resto, ya que su leopardo no puede salir, por lo que para contrarrestar lo que él ve como una carencia siempre ha luchado para ser el mejor en todo, pero además tiene otro problema y es que un Psicópata Psi mató a su hermana pequeña, y él no pudo salvarla, muriendo en sus brazos. Ahora odia a todos los Psi, bueno a casi todos y en especial a los miembros del Consejo que lo consintieron y alentaron.
Cuando vio por primera vez a Ashaya vio una persona fría, el típico Psi y además que trabajaba para el consejo, que jugaba con la vida de personas, pero ahora debido a la deuda contraída por la salvación de los niños, debe ayudarla, ¿podrá luchar con su odio o será mas fuerte que su lealtad hacia la palabra dada?
Me ha gustado mucho, sigue la línea de las anteriores mezclando de manera magistral el suspense con la pasión, una pasión animal que cuando surge es para toda la vida, tenia ganas de conocer la historia de Dorian ya que tenia muy buena pinta al ser el hermano de la cambiante asesinada por Santano, por otro lado la científica que parece fría pero desde luego por dentro es puro sentimiento, nos demuestra que a pesar de que los Psi parecen todos muertos por dentro en cuanto a sentimientos no es cierto, nos demuestra que incluso las madres Psi pueden querer de forma incondicional, echando por tierra la idea que teníamos con el ejemplo de Nikita Dunkan.
Ahora la trama se va complicando ya que los cambiantes no solo van a tener que luchar con el Consejo sino que entran nuevos enemigos que no esperaban y son los humanos, y además Dorian debe luchar con un fantasma que acompaña a Ashaya aun mas difícil, su hermana gemela que es una Psicópata a la que ella siempre ha protegido.
Vamos que el pobre lo tiene complicado, pero Ashaya desde un principio te enamora, es dulce, valiente, leal, y con un carácter forjado en hierro debido a todo lo que ha tenido que soportar, pero aun así es una persona frágil con inseguridades y miedos pero que intentara superar por amor a los suyos. Dorian al que conocemos por ser el mas atractivo de todos los cambiantes pero con demasiado equipaje a su espalda, la muerte de su hermana y su leopardo latente, podrán los dos ayudarse con su amor o todo lo que les separa hará que se odien para siempre?
Pues para saberlo ya sabeis a leer el libro. Lo vais a disfrutar desde la primera pagina hasta la ultima porque la historia es de las que enganchan, mucho suspense y una pasión que hace que el libro se te haga corto.
Valoración: del 1 al 10, le doy un 9,5
Crítica realizada por Anasy
Por fin tenemos la historia de Dorian Christensen, que ya desde la primera entrega de la serie es uno de los personajes que más intriga y atractivo genera de toda la saga, seguramente por su peculiaridad como cambiante y por lo traumático de su situación.
Dorian es uno de los felinos pertenecientes a los DarkRiver, uno de los principales centinelas de su Alfa, Lucas y un francotirador sin igual, pero también es un felino latente, aunque en su interior mora el animal que rige al igual que su lado humano todas sus emociones y decisiones, él no es capaz de cambiar y convertirse como el resto de sus compañeros, pero lejos de ser un inconveniente , Dorian es igual de letal que el resto de los centinelas de los DarkRiver y uno de los más temidos. Pero lo que marca la vida de Dorian es el asesinato de su hermana Riley a manos de un sicópata Psi, desde entonces y tras la brutal muerte a la que es sometida, Dorian vive en la oscuridad, manteniéndose cuerdo a veces sólo por los pelos y gracias a su clan, detesta a todos los Psi y su deseo de venganza por lo ocurrido a Riley no se sacia ni con la muerte de su asesino y aunque acepta a las compañeras Psi de los otros centinelas, sigue sintiendo un odio visceral por toda esa raza.
El problema surge cuando dos meses atrás conoce a una de las científicas Psi que está llevando a cabo una importante y oscura investigación para el Consejo de los Psi, ella es Ashaya Aleine que tras salvar a dos niños cambiantes reclama un favor a cambio, que rescaten a su propio hijo que el consejo tiene retenido para garantizar la cooperación de Ashaya en el proyecto, desde ese momento Dorian no deja de pensar en la fría Psi, lo que provoca un conflicto interior que lo mantiene furioso y confundido.
Ashaya no es una Psi normal, se pasa toda la vida fingiendo ser una Psi más , sin emociones, sin sentimientos , pero la realidad de Ashaya es otra muy diferente, ama a su hijo Keenan y hará lo que sea para salvarlo, aunque eso le cueste la vida. Tras un complejo plan que lleva a cabo, el niño es rescatado por el francotirador que conoció meses atrás, pero aunque ella consiga escapar del Consejo Psi los problemas de Ashaya están muy lejos de terminar. Cuando se reencuentra con Dorian es asaltada por infinidad de sentimientos y perturbaciones que no logra controlar pues como Psi no está acostumbrada a toda esa oleada de emociones que ahora siente dentro de ella y eso a pesar de que en un principio Dorian demuestra hacia ella un resentimiento muy profundo tratándola a veces con bastante antipatía porque la juzga como otra Psi fría como un témpano incapaz de una sola emoción.
Ambos tendrán que enfrentarse a lo que sienten, cuando Dorian va descubriendo a la verdadera Ashaya poco a poco, no le cabe duda de que será suya, aunque eso le provoque remordimientos hacia la memoria de su hermana pero tanto Ashaya como Keenan se cuelan en su interior generando un intenso instinto protector hacia ambos, pero no sólo los Psi que van tras Ashaya serán los enemigos de la pareja, algo mucho más complejo y malvado los acecha, algo que Ashaya tiene asumido y por lo que sabe que tiene que mantenerse alejada tanto de su hijo como de Dorian si quiere salvarlos.
Al mismo tiempo descubrimos más tramas conspiratorias tanto de los Psi como de los humanos que ahora entran en juego en la guerra por la supremacía, conocemos algo más de los distintos niveles de Psi que hay y toda la complicada estructura que forma la Mental Net que los mantiene a todos conectados y sin sentimientos... en apariencia.
Me ha gustado toda la historia, al igual que el resto de la serie sabe complementar muy bien una historia de amor bonita e intensa con la trama siempre presente de las guerras soterradas entre cambiantes y Psi. Como pareja tal vez no sea mi favorita pero son dos personajes que encajan bien y que te mantienen pegado al libro absorbiendo toda esa relación que se forma de manera tan complicada y amenazada siempre por el Consejo Psi, nos encontramos con los personajes que ya conocimos en los anteriores libros y que siempre es una delicia volver a saber de ellos. Una historia como las anteriores, muy buena y que deja con ganas de más.
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