Nicole Jordan - Atracción

Crítica realizada por Mencía

2º Libro de la serie Los guardianes de Cyrene.

Ninguna mujer pudo domarle... hasta que encontró a su oponente.
Con su implacable encanto y apariencia peligrosa, el vizconde Thorne es uno de los solteros más esquivos de Inglaterra -y miembro de una liga secreta de protectores conocidos como Los Guardianes. Para frustrar las estrategias casamenteras de su padre, Thorne le pide a una seductora artista que finja ser su prometida.
Desengañada en el pasado, Diana Sheridan reniega del amor. Pero para asegurar la posición en sociedad de su prima, acepta la farsa de Thorne. El escándalo estalla, y Thorne insiste en seguir adelante con los planes de matrimonio. Cuando Diana se niega, cauta ante la ardiente pasión de Thorne, el libertino le asedia con una campaña de seducción.
Mientras el peligro amenaza sus vidas. Pero Thorne se da cuenta que el mayor peligro reside en su corazón. Nunca esperó verse atrapado en la trampa del matrimonio, menos por él mismo, o imaginó que la farsa de un compromiso por amor podría llegar a ser algo tan tentadoramente real.

Tras la primera entrega de esta serie en la que se podía disfrutar de aventura, pasión y amor estaba deseando leer la segunda entrega, confiando en que mantuviera la misma calidad o fuera a más. Sin embargo, esta novela entra dentro de las obras que te dejan en stand by, ya que sin estar mal, tampoco son para recordar.

En cuanto a los protagonistas, nos encontraremos con un libertino que no desea pasar por el altar pese a que su padre, el duque de Recliffe, está dispuesto a todo por verlo casado. Si hay que comprar a la amante o forzar el matrimonio con una oportunista y descarada jovencita que provoca un escándalo, se hace. Bueno, o por lo menos se intenta, porque dada la personalidad del vástago este prefiere salir por patas hacia la isla de Cyrene.

La mujer que ha de rendir sus defensas es Diana Sheridan, prima de su mejor amigo, muerto en extrañas circunstancias. Diana tiene dos buenas razones para acudir en busca de Christopher Thorne. Por un lado, a la muerte de su primo, Thorne se convirtió en el tutor de su prima Amy y la joven, desgraciadamente, se siente atraída por un pretendiente nada adecuado. Y sabiendo por propia experiencia las consecuencias que puede acarrear perder la buena reputación, Diana ha de intentar por todos los medios que Amy no cometa el mismo error. Pero además del apoyo que necesita con Amy, Diana tiene en su poder una carta, que dirigió su primo a Throne pocos días antes de su muerte, en la que manifiesta el miedo a ser asesinado.

Entregar esa carta y pedir su ayuda para esclarecer la muerte de su primo, junto con su apoyo con respecto a Amy, es lo que lleva a Diana a aceptar un compromiso ficticio con el descarado Christopher Thorne…

La personalidad fuerte y vital de los dos protagonistas es sin duda lo más atractivo de la novela, ya que la trama de intriga es relativamente sencilla y no aporta muchas sorpresas. Su resolución resulta demasiado rápida para mi gusto y solo nos deja como plato fuerte, las escenas de seducción cargadas de sensualidad, propias de esta autora.

Atracción es una novela entretenida y calentita, pero, en mi caso al menos, no llega a calar. Le falta emoción e intriga y le sobra escenas subidas de tono. No aporta nada nuevo, pero los protagonistas tienen fuerza y su lectura es sencilla y rápida.

Lo malo: En mi modesta opinión, constituye una de esas obras que según las lees pasan directamente al baúl de los recuerdos donde se confunden con tantas otras.

Lo bueno: A las que gusten de las escenas hot aquí tienen una mina.