Nicole Jordan - Corazón cautivo

Crítica realizada por Mencía

Katrine Campbell decide volver a las Highlands para buscar sus raíces. Pero ni en sus fantasías más salvajes imaginó que acabaría secuestrada por Raith MacLean, un moreno tan peligroso como arrebatador. Lo único que el joven desprecia más que a los traidores de los Campbell es a Katrine, que es inglesa y lleva el apellido de ese clan. Pero cuando Raith permite que su preciosa y rebelde cautiva le robe el corazón, se da cuenta de que el amor le causa muchos más problemas que sus enemigos.

Opinión: 

Últimamente las novelas de esta autora me estaban resultando un tanto anodinas. De hecho lo que me decidió a emprender la lectura de Corazón cautivo fue, ni más ni menos, el cambio de ambientación. Las Highlands, como a muchas otras lectoras, me cautivan, y más aun por el prototipo de héroe que espero encontrar en ellas. Sin embargo, todas sabemos que una buena novela no se hace porque se desarrolle en uno de nuestros escenarios favoritos, con lo que hacía falta saber, si detrás de esa ambientación, existía una trama y unos personajes que supieran dar la talla y cumplieran con la necesidad de entretenimiento y evasión que preciso.

Lo cierto es que, en mi caso al menos, así fue. Corazón cautivo pertenece a ese grupo de novelas que nos mantienen pegadas a sus páginas sin remedio. En ella encontramos un protagonista leal, de carácter fuerte, virilidad indiscutible, y con el punto de inquietante testarudez que hará su caída de lo más satisfactoria. En cuanto a Katrine, la protagonista femenina, se nos presenta como una mujer inteligente y decidida, un verdadero reto para su oponente, llena de recursos que podrán a prueba y llevaran al límite, una y otra vez, la paciencia de nuestro héroe. No faltan los secundarios a los que odiar y ni aquellos que conseguirán enternecernos. Ni los datos históricos que nos aportan saber, ni esas disputas tan estimulantes que nos ofrecen una batalla más de la eterna guerra entre los sexos.

La trama es relativamente sencilla. Para Raith se resume en qué hacer con una irritante mujer tras su secuestro, y en última instancia, cómo resolver los problemas de la gente que depende de él sin perder a la mujer de la que ha acabado enamorado. Katrine por el contrario se encuentra en la disyuntiva de buscar la forma de escapar y al mismo tiempo demostrar, durante el tiempo que dure su cautiverio, que compartir lazos de sangre no tiene por qué hacerla heredera de los pecados de su clan. Ambos poseen una férrea voluntad, algunos de sus enfrentamientos, pese a no desarrollarse la acción en el medievo, pueden resultar un tanto primitivos, y la cabezonería de la pareja campa a sus anchas, todo ello se traduce en una lectura de lo mas entretenida y recomendable.

Corazón cautivo es una sencilla novela que nos procura la evasión que buscamos y contiene los ingredientes necesarios para ser del gusto de un buen número de lectoras. Debo reconocer que en el algún punto la obstinación de la que dan muestras sus protagonistas ha rayado con el límite de mi paciencia. Pero este cerril caballero, y la decida mujer de recursos que le acompaña, me han ofrecido una estupenda tarde de lectura y evasión. Eso es justo lo que buscaba y lo que hallé.

Nicole Jordan es una autora que me gusta. Aunque en la mayor parte de sus libros abundan las escenas de sexo, en "Corazón cautivo" tardan en producirse, y no son tan largas. Katrine Campbell y Raith MacLean son los protagonistas de esta intensa, pero a veces aburrida, historia de amor. Pese a que me ha gustado la historia en general, creo que le sobraban al menos 50 páginas. No daba para casi 400 páginas.

Katrine ha dejado Inglaterra para volver al país donde nació, Escocia. Espera que su tío la acoja en su hogar por un tiempo, pero no se espera encontrarse en el despacho de su tío con un ladrón. Aunque el hombre la deja allí atada, llega otro, y se la lleva. Raith, el primer hombre, decide llevarse a la sobrina de Campbell para pedir un rescate por ella, pero no se imagina la guerra que la joven va a darle para que la deje libre.

Katrine no puede evitar que la lleven al hogar de Raith, y sus esperanzas de escapar se van desvaneciendo a medida que pasa el tiempo, hasta el puento que empieza a querer quedarse allí para siempre... por que se ha enamorado de Raith, y la pequeña protegida de éste la necesita. Raith, por su parte, se niega a enamorarse de una medio inglesa, que además es una Campbell. Pero los sentimientos no entienden de clanes o nacionalidades, y Raith se asusta al darse cuenta de que Katrine significa mucho para él.

Un libro de escoceses entretenido, pero sin llegar a ser muy bueno, porque le sobran parrafadas, y páginas enteras. No ve van las descripciones largas, y por desgracia, abundan en este libro. Aun así, estoy lo bastante satisfecha con el libro como para recomendarlo como lectura ligera. La historia no es nada del otro mundo, nada que no se haya escrito antes, pero se deja leer.

Katrine a veces parece una salvaje sin cerebro. Aunque me gusta que sea natural, da la impresión de que no sabe pensar las cosas antes de hacerlas. La encontré un poco chinchosa, pero también valiente y muy dulce con la niña.

Raith no me ha dejado una impresión mala, pero tampoco se mete en el top 10 de mis protagonistas masculinos preferidos. No sé, tiene carácter, pero le falta algo para que enamore. Eso sí, también sabe ser muy tierno con su protegida... y con Katrine.

Secundarios... los familiares de Raith, la preciosa niña que está traumatizada, y el tío de Katrine. Poco puedo destacar de ellos.

Bueno, barato, y algo bonito, pero no maravilloso. Aun así, se recomienda como lectura ligera y entretenida.

Nota: 3/5