Nora Roberts - En el calor de la noche

Crítica realizada por Mailo

Después de enviudar, Maggie Fitzgerald abandonó California en busca de paz, y creyó encontrarla en la pequeña ciudad a la que se había trasladado. Lo que jamás se le pasó por la cabeza fue encontrar un esqueleto en su patio trasero... o el amor en los brazos del sexy e irresistible Cliff Delaney. Tampoco que jugaría a los detectives con él. ¿Podría Cliff mantener a Maggie a salvo hasta que se resolviera el misterio del esqueleto? Todo era posible en el calor de la noche... en el calor de la pasión.

Maggie Fitzgerald es una mujer que lleva una vida estresada, todo va demasiado rápido, necesita un poco de tranquilidad, un poco de esa paz que todos buscamos y que se nos niega en la vida cotidiana. Además, tiene el corazón hecho añicos y necesita recuperarse en soledad. Se marcha pues de California a una pequeña ciudad donde nadie la conoce, donde todo transcurre más lentamente y no hay sobresaltos.

¿Sobresaltos he dicho? Pues vaya si los hay en esta historia. Maggie se encuentra ni más ni menos que con un esqueleto en el patio de su casa. La tranquilidad que esperaba encontrar en esa perdida ciudad se evapora como por arte de magia y empiezan los problemas. No voy a negar que este tipo de historias me enganchan sin remisión, posiblemente ser detective o policía sea una de mis mayores aficiones o una profesión frustrada, pero es que me encanta ir descubriendo el misterio a la vez que lo hacen los personajes de la novela.

Aunque en realidad el problema mayor es encontrarse con un hombre, Cliff, que resulta ser irresistible, guapo y sensual como pocos.

Nora nos tiene ya acostumbrados a este tipo de argumentos donde todo se complica. Con un muerto de por medio, mucho mas. Sobre todo porque Cliff empieza a investigar y Maggie colabora con él, ¿qué otro remedio le queda? A fin de cuentas el esqueleto estaba en su patio.

Una novela en que se mezcla la intriga, el suspense, la atracción entre los protagonistas, las dudas, el peligro y el romance. Personajes de hoy, de los que podemos encontrarnos en la calle, ella viuda y él jardinero, con sus dudas y sus faltas pero con una decisión inquebrantable por descubrir lo que ha dado la vuelta a sus vidas.

La novela me ha agradado de verdad, se me ha hecho corta, me hubiera gustado que durara un poco más. Claro está que eso me pasa con casi todas las novelas que he tenido la suerte de leer de esta autora. Últimamente le había bajado un poco el listón porque habían caído en mis manos algunas que no terminaron de llenarme, pero con ésta novela he vuelto a subirle donde le corresponde. No todas las novelas pueden ser una joya, lo entiendo.

La personalidad de Maggie me ha gustado bastante, pasa de ser una mujer cansada, agobiada por el ajetreo diario, por su fama, por estar siempre bajo ojo ajeno, a convertirse casi en una detective. Su evolución es estupenda.

En cuanto a Cliff, ¡qué decir de él! Como todos los personajes masculinos de Nora Roberts es de los que atrapan, porque además él tiene más secretos incluso que la pequeña casa donde se encuentran el muerto. Hay que leer la novela para ir descubriéndolos.

Me ha resultado muy entretenida.

Maggie Fitzgerald es una famosa compositora, con varios premios e hija de famosos toda a su vida ha estado espuesta a las cámaras, por es decide dar un cambio a su vida y se va a vivir a un remoto pueblo. Ha comprado una casa con terreno que necesita reparación, de la casa se ocupa ella poco a poco, le aporta tranquilidad y al estar aislada le permite trabajar comodamente. En la parte del terreno contrata a Cliff Delaney, un paisajista del pueblo que adora la tierra.

La pasión entre ellos es instantánea pero Maggie está dispuesta a mantener las distancias ya que ha venido a estar sola , por su parte ,Cliff no cree que un poco de sexo complique las cosas. Y tiene razón porque lo que complica las cosas son la aparición de unos huesos en su terreno recién adquirido. Todo se lia mas cuando identifican los huesos y verifican que fue asesinado hace diez años. Con miedo a quedarse sola pero no dispuesta a demostrarlo , Maggie se da cuenta de que cualquiera al que conoce puede ser el asesino.

Me ha gustado este libro, ha sido un poco corto para mi gusto pero esta bastante bien. Los personajes se complementan y a pesar de ser tan distintos hay química entre ellos. Maggie me parece sensata y decidida a coger las riendas de su nueva vida y Cliff, es todo un hombre, la seduce y cae rendido a sus pies.

Hay bastantes secundarios, Stan, Joyce, Louella , el teniente Reiker, en fin, bastantes porque la historia viene de hace unos años y es una comunidad pequeña.

Le pongo un bueno.