Rebbeca Winters - Corazón de invierno

Crítica realizada por Soraya

En una fría noche de invierno, Zane Broderick encontró un bulto en la nieve... ¡Era un bebé recién nacido! Llevó al niño corriendo al hospital y lo puso en brazos de la enfermera Meg Richins... Meg pensaba que había aprendido a vivir con el dolor de ser estéril. Pero cuando aquel desconocido entró en la sala de urgencias con un bebé abandonado, su lucha comenzó otra vez... Quería a aquel niño, y también Zane. La solución parecía obvia, hasta que apareció la madre biológica.

Se había desatado una terrible tormenta de nieve, pero Zane Broderick en lugar de poder irse a casa, tenía que terminar de supervisar las vías para evitar cualquier imprevisto en las pruebas del nuevo prototipo de tren que tendrían lugar al día siguiente. Estaba terminando los últimos metros cuando ve un bulto en las vías, se acerca pensando que el aullido proviene de un animal abandonado, pero para su sorpresa se encuentra con un bebé recién nacido prácticamente cubierto de nieve. Lo lleva lo más rápido posible hasta el hospital más cercano, y allí es atendido por Meg, una de las enfermeras que están de guardia esa noche.

Zane sabe que las posibilidades de que el bebé sobreviva son muy limitadas, para empezar ha perdido mucha sangre a través del cordón umbilical, y el latido es muy débil, además tiene hipotermia. Sin embargo no puede evitar sentir un vínculo con ese bebé, y decide no separarse de él hasta que su vida deje de correr peligro.

Meg, por su parte, sabe que no debe involucrarse demasiado con ningún paciente, en especial si éste es precisamente lo que ella más anhela, un bebé. Desde el momento en que los médicos le extirparon los ovarios, la vida de Meg cambió definitivamente. Ella sabe que nunca podrá tener un hijo propio, y piensa que eso es un impedimento en sus futuras relaciones, pues tarde o temprano la mayoría de los hombres desean tener uno.

En un principio la policía interroga a Zane como sospechoso, pues según ellos, hay un alto porcentaje de casos en los que la persona que encuentra a un bebé abandonado es la misma que lo ha dejado allí, o un pariente cercano que estaba al tanto de la situación. En principio, y como es lógico, esto molesta muchísimo a Zane, pues él ha obrado de corazón y no se esperaba que lo fuesen a acusar por ello. Aun así, pronto descubren que su sangre no tiene nada que ver con la de que hay en la ropa del pequeño, ni con el pequeño en sí, así que queda libre de toda sospecha.

Van pasando los días y Zane cada vez está más encariñado con el bebé, va cada día a verlo hasta que finalmente decide intentar adoptarlo. Sin embargo sabe que sin estar casado, no va a poder conseguir la custodia, es por ello que se le ocurre la genial idea de proponerle a Meg que se casen. Ésta en un principio duda, pues sabe que ya está sintiendo algo fuerte por él, mientras que él solo la ve como un medio para un fin. Pero su deseo de ser madre es superior a todo lo demás, así que acepta. En cuestión de días se casan y les conceden la custodia temporal del pequeño.

Todo va perfectamente, son dos personas que se están conociendo pero que parecen congeniar muy bien, y además les une el amor hacia el bebé, pero entonces aparece la madre de éste y todo se complica.

Hasta ahí el breve resumen de esta pequeña novela, en el cual he intentado no añadir más de lo que la sinopsis ya de por sí desvela. Ahora me centro en mi opinión personal.

Sinceramente todo es un poco descabellado y resulta demasiado inverosímil. Para empezar no me terminé de creer que él simplemente porque se encuentre al pequeño desee protegerlo hasta el punto de casarse con una desconocida para ello. Entiendo que la pérdida de su hermano le haya podido producir ahora la necesidad de "salvar" a este pequeñajo, al que apropósito le ha puesto el mismo nombre, pero creo que todo este tema está cogido demasiado por los pelos.

Después el tema de la esterilidad de ella, hay un aspecto que me ha molestado muchísimo: ¿De verdad un ginecólogo le puede decir a su paciente, la cual acaba de saber que no va a poder tener hijos biológicos nunca, que se compre un perro? Ya no es solo poco profesional, sino inhumano. Me lo dice a mí y lo mato allí mismo. Adoro a los perros, tengo una que no cambiaría por nada, sé que se les quiere como a un miembro de la familia, pero no es un hijo, y nunca podría sustituir a uno. Sin embargo la protagonista se plantea el comprarse uno... Hija de mi vida plantéate adoptar. No que da por hecho que ningún hombre la va a querer por no poder engendrar vida. Me parece una aptitud muy dura hacia sí misma, y además una falta de seguridad enorme. Sé que es un personaje ficticio, puramente inventado por su autora, pero de verdad me habría encantado preguntarle que si fuese al revés, si fuera su marido o el amor de su vida el que es estéril ¿lo dejaría? Porque sí, admito que es un duro golpe, pero te enamoras de su persona, no de lo puede o no puede hacer. Si esta protagonista es de novela histórica habría entendido todas sus dudas, pero siendo de actual me ha sabido a mal la forma de pensar que tiene. Hay millones de niños en el mundo que necesitan a unos padres que los quieran, y madre no es la que te trae al mundo, sino la que te quiere como tal.

Pero bueno dejando de lado todo esto, admito que a medida que iba leyendo el libro me ha ido gustando un poco más. La autora ha conseguido transmitirme la angustia de unos padres adoptivos temporales, cómo en cuestión de segundos la decisión de la "madre" biológica puede cambiar la vida de una pareja, y todos los sentimientos que esto conlleva. Y aunque me ha terminado convenciendo, a pesar de que el principio no me ha terminado de gustar, no dejo de reconocer que la trama del bebé abandonado la resuelve la autora de un plumazo, tirando por lo fácil, y que el libro cojea por muchos lados. Así que solo le doy un 3 sobre 5.

Aclarar que aparecen como secundarios, los que en otros libros fueron protagonistas. Aun así, yo no he leído los anteriores y no he sentido en ningún momento que me falte información. Aunque sí que es verdad que siempre es mejor leerlos en orden, pero no es necesario para disfrutar de esta novela en concreto que resulta ser la tercera de la serie.