Robin Schone - El amante

Crítica realizada por Adela

A los treinta seis años , Anne Aimes es una solterona cuyo único atractivo reside en su enorme riqueza. Pero tras su poco atractiva apariencia, se esconde una mujer apasionada que desea sentir sobre su piel las más ardientes caricias masculinas. Michel des Anges es el seductor del momento: todos alaban encarecidamente su capacidad para complacer a sus amantes . Y todo lo que le va a costar a Anne son diez mil libras.

Traspasado por la tragedia e impulsado por sus ansias de venganza, Michael busca olvidarse de sí mismo satisfaciendo a una mujer que lo único que le pide es que le dé placer, una mujer que ni siquiera sospecha cuáles son sus más íntimas necesidades o los verdaderos motivos por los que ha aceptado su propuesta. Incapaz de resistir la marea de un deseo cada vez más ardiente, Michael enredará a Anne en una sórdida telaraña en la que el precio del placer será la vida misma...

Crítica

Vaya por delante que no puedo evitar ser parcial con la señora Schone, una de mis escritoras de romántica erótica favoritas, y sin duda de entre ellas, la más "profunda" (o insoportablemente intelectual según sus detractoras). Con ella, el sexo tórrido y a veces vulgar es realmente el vehículo para el amor entre sus protagonistas, aunque a veces dicho vehículo viaje por caminos más que tortuosos y además vaya lento cual diligencia del correo. Con ella, el sexo es profundo como digo (en todas las acepciones de dicho término) e intensamente sentido y racionalizado.

Aunque tiende a repetir esquema respecto a sus protagonistas , generalmente maduros ellos y ellas, cercanos o incluso sobrepasando la cuarentena, y con un inicio de las relaciones basado unicamente en la consecución del placer físico, no puedo evitar que me guste, porque eso sí, la señora Schone escribe muy bien.

El amante es la primera de las dos novelas dedicadas a Michael y a Gabriel (protagonista de "La mujer de Gabriel"), dos hombres que han dedicado su juventud a prostituirse, aleccionados desde niños por la madame que los acogió, para dar placer uno a las mujeres, otro a los hombres.

Michel des Anges recibe su precioso nombre debido a su habilidad para hacer "ver los ángeles" a las mujeres que se acuestan con él y esta fama de amante legendario es lo que lleva a la protagonista a solicitar sus servicios. Pero vivir en provincias es lo que tiene, que las noticias a veces son viejas y Anne es una provinciana de bandera, solterona, virgen a su pesar y con una apariencia corriente. Como casi todas las protagonistas femeninas de la Schone, nada la hace especial, salvo la determinación con la que coge las riendas de su vida en el momento en que comienza la historia. Como la protagonista de "El tutor" o de "Amantes de escándalo", sabe lo que quiere y lo que quiere es sexo del bueno, no permitir que su carne se aje sin conocer el placer que un hombre puede proporcionarle. Y como Anne tiene dinero, va a usarlo para conseguir lo que quiere, y además del mejor. Pero lo dicho, las referencias de Anne son viejas, y cuando va a buscar a Michael, él ya no es lo que era, un incendio ha destrozado su rostro y ahora su profesión se ha ido al traste.

Michael intenta desilusionar a Anne, pero le esperan sorpresa tras sorpresa con ella. Porque para empezar ella valora más la sabiduría y la capacidad de Michael para darle placer que su hermosura perdida , y para seguir, encontrará en ella algo que creía no poder merecer, el amor y la ternura que cambiará su vida.

Mientras la relación de los protagonistas se enreda sobre sí misma como una serpiente, y al final los roles de la seducción se invierten, se inicia por el contrario el desenvolvimiento de la madeja que es la vida de Michael y la de su amigo Gabriel (sin duda, es recomendable leer las dos novelas para ver el cuadro completo) y las razones de sus sórdidas andanzas, con un pasado cruel y una merecida venganza .

Para mí, otro detalle impactacte es la cantidad de compasión que es capaz de generar el personaje de Michael, (y Gabriel con él), como la que en principio era el alma suplicante -Anne- se nos revela como una roca, como el cimiento a partir del cual Michael puede volver a vivir.

Y por supuesto, escenas hot por cada esquina , que para eso la novela es erótica, pero muy bien contadas.