Shayla Black - En las redes del placer

Crítica realizada por Srta_Escarlata

Una fantasía secreta

Hunter tenía todo lo que deseaba hasta que una bala le hizo replantearse su trayectoria como SEAL. Inquieto e inseguro sobre su futuro, acepta una intrigante proposición: realizar con su amigo Ben y la novia de éste, Kata, la más secreta fantasía de la joven, un trío. Lo que iba a ser una fantasía sexual sin importancia cambia de cariz al conocerla. Audaz y sexy, Kata es, además, vulnerable y distante. Decidido a que sea suya para siempre, sabe que para conseguirlo necesitará mucho más que una noche y que el tiempo corre en su contra.

Una obsesión incontrolable

Kata jamás deseó renunciar a la cómoda relación que mantenía con Ben y comenzar algo peligroso y prohibido con un desconocido. Sin embargo, a pesar de resistirse a él con todas sus fuerzas, se rinde finalmente al abrumador placer y a Hunter, el hombre capaz de satisfacer todas sus fantasías. Pero mientras se abandonan al poderoso deseo, comienzan a acechar las sombras del pasado.

Ahora, para mantenerla a salvo, Hunter le hace una atrevida proposición. Aceptarla le destruirá el corazón, rechazarla podría acabar con su vida.

Tenía muchas ganas de leer la historia del hermano hosco y gruñón de Kimber, el misterioso Hunter, y por fin la conseguimos en "En las redes del placer", que me ha encantado. Es una muy buena novela erótica, en la línea de las novelas anteriores que nos han publicado de Shayla Black (nada que ver con "Tiéntame en la oscuridad"), pero sin tríos.

Hunter se nos presenta como un SEAL que todavía se está recuperando de un disparo cuando su amigo Ben le propone un trío con Kata (una amiga con derecho a roce); por lo que, ocioso como está, se desplaza hasta Las Vegas para celebrar el cumpleaños de Kata y participar en el regalo sorpresa que Ben le tiene preparado. Sin embargo, Hunter se enamora perdidamente de Kata nada más verla (¡hacía mucho tiempo que no veía un flechazo de tal magnitud!).

Por su parte, Kata también se siente atraída por Hunter (no me extraña, está como un quesito), pero debido a sus antecedentes familiares no quiere sentirse sometida por ningún hombre en ningún aspecto de su vida. Esto supone un grave problema para ambos, porque Hunter, además de ser un hombre alfa, practica juegos de dominación-sumisión y es un Amo.

Desde el momento en que se conocen íntimamente comienza un tira y afloja en el que Hunter, contrarreloj, antes de que lo requieran para otra misión, debe conseguir que Kata se enamore de él; y Kata, aun sintiéndose enamorada de Hunter, lucha contra el autoritarismo que él manifiesta en prácticamente todas las facetas de su vida, especialmente en el ámbito sexual.

Además de los roces que ambos tienen en su relación, un asesino a sueldo irrumpe en la, hasta el momento, apacible vida de Kata. Como trabaja como agente de libertad condicional, es posible que uno de los presos que ha denunciado por darse a la fuga quiera vengarse de ella. Hunter pondrá todo su afán en descubrir al asesino y mantener con vida a Kata. A raíz de esta trama secundaria, se introducen en "En las redes del placer" personajes que ya conocíamos de novelas precedentes: Deke y Kimber, Jack y Morgan, Luc, Tyler; sabemos también un poquito más acerca de Logan, el hermano de Hunter, que sufre terriblemente porque alguien le ha roto el corazón (¡qué ganas le tengo a la novela en la que Logan sea el prota!); y el padre de Hunter, otro corazón roto.

En resumen, "En las redes del placer" es una estupenda novela erótica, con tensión entre los protagonistas y escenas muy subidas de tono. Tal vez el personaje de Kata es un poco monótono y machacón por su continua reticencia a entregarse completamente a Hunter, incluso viendo el ejemplo de Jack y Morgan. Me hace gracia que un machote como Hunter, que en las novelas anteriores parecía un hombretón duro y fuerte, caiga enamorado hasta las trancas por un flechazo. También me gusta que aparezcan, aunque sea poco, personajes de las otras novelas, porque así sabemos cómo les va; especialmente me gusta el personaje de Tyler, que en "Deliciosa rendición" me había desagradado mucho. La única pega que le puedo poner a esta novela es el desenlace de la trama del asesinato, que se resuelve al final de sopetón y con sorpresa.

Un 4 de 5.

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Crítica realizada por Mencía

Para celebrar su veinticinco cumpleaños kata se traslada a las Vegas con familiares y amigos. Entre ellos está Ben, su amigo con derecho a roce de los últimos años. Meses atrás Kata le confesó una de sus más secretas fantasías: un trío ¿y qué mejor ocasión que ésta para regalárselo? Para ello se pone en contacto con Hunter, un SEAL en vacaciones forzosas por un disparo, qué bien sabe que estará más que dispuesto a ser el tercero.

La pasión que siente Hunter desde el mismo instante en que sus ojos se paran en Kata es tan ingobernable como arrolladora. Por ello no siente ningún escrúpulo a la hora de ayudar a Ben a emborracharse, a fin de poder tener a Kata para él solo. Tras esa noche descubriremos la verdadera naturaleza de Hunter: él es un amo y necesita y reconoce en Kata a su perfecta sumisa.

Está claro que Kata no es de la misma opinión y menos cuando se entera que acabó casándose con él, tras esa noche de borrachera. A partir de este punto entramos de lleno en la compleja personalidad de Hunter, acrecentada por el hecho de que alguien atenta contra kata.

Descubrir quién quiere acabar con su vida e intentar impedírselo, al tiempo que trata de convencer a la chica que ella es realmente una sumisa le lleva a Hunter el resto de las páginas de esta novela.

Independientemente de que el tema sumisión- dominación en que se basa esta obra, sea o no de nuestro gusto, la construcción de esta novela cojea en varios puntos. En mi modesta opinión, ese amor a primera vista, por parte de Hunter, tan fulminante es excesivo (lujuria vale, pero ¿amor?). Y que después de salir de su cama a Kata le dé por tomar tequila como si le fuera la vida en ello tampoco me convenció, y menos cuando acaba con un certificado de matrimonio. Qué él sea tan posesivo como para aprovecharse del estado etílico en que se encontraba la chica, tampoco fue como para que me cayera bien, pero más que esto, fue su temible insistencia lo que estuvo a punto de ahogarme.

Shayla Black es una reconocida autora de romántica erótica, dada la construcción del protagonista masculino y el tipo de sexualidad a la que es adicto, estamos ante una de esas novelas que más que románticas son indudablemente eróticas. Curiosamente lo que más me ha gustado es la trama de intriga que la acompaña y el hecho que Kata, su protagonista, tenga el suficiente carácter como para intentar resistirse- con frecuencia en este tipo de novelas la personalidad de ellas no es tan fuerte- . En las redes del placer está pensada para aquellas que gustan de los protagonistas alfas en su máxima expresión, si es ese vuestro caso, en ella encontrareis entretenimiento y el mejor remedio contra los rigores del invierno. Pero que no quede duda de que Hunter es un convencido y experto dominante, amo y señor.